Cátedra de Ciencia, Tecnología y Religión.
Escuela Técnica Superior de Ingeniería.
Universidad Pontificia de Comillas. En preparación hasta el 1.04.2006.
La imagen del hombre en la ciencia moderna, ¿permite hablar de la naturaleza espiritual del hombre? Una atención rigurosa a la imagen científica del ser humano permite distinguir la realidad del “alma” humana. Por otro lado, la doctrina cristiana sobre el hombre puede asumir íntegramente la idea natural del hombre, cuyo único horizonte es la muerte, y situar en la “llamada” sobrenatural de Dios la introducción del ser humano en una condición espiritual que lo relaciona con una dimensión metafísica.
El altruismo constituye un misterio clave y duradero para la biología. A mediados del siglo XX, el biólogo William Donald Hamilton señaló una posible causa evolutiva para la existencia de este comportamiento: el altruismo favorecería la transmisión no directa de los genes de cualquier individuo, a través de la reproducción de sus parientes más cercanos, con los que se compartese comparte en gran medida la información genética individual. Esto ha sido demostrado a través de una simulación informática con quinientas generaciones de robots sencillos.
En estos últimos años, las posturas reduccionistas sobre el ser humano parecen dominar el terreno científico y filosófico. Cuando en los años 60 del siglo XX, Desmond Morris escandalizó a muchos con “El Mono Desnudo” y “El zoo humano” abrió una brecha en la interpretación biológica de lo humano. Aportaba nuevos datos a las obras clásicas de Darwin, “La Descendencia del Hombre” (1871) y “La expresión de las emociones en el Hombre y en el animal” (1872). Un libro de Carlos Beorlegui, profesor de Antropología en Deusto, acerca ahora las posturas entre la ciencia, la filosofía y la religión. Por María Dolores Prieto Santana.
El 21 de octubre de 1868 se aprobó el “Decreto de Libertad Religiosa” por el que la Teología dejaba de ser facultad universitaria. El 25 de octubre de 1868, el Ministro de Fomento de España, Manuel Ruiz Zorrilla, firmaba el Decreto “Nueva organización a la Segunda Enseñanza y a las Facultades de Filosofía y Letras, Ciencias, Farmacia, Medicina, Derecho y Teología”. A partir de entonces, obviamente, no ha sido un hecho normal, en la Universidad de nuestro país, la concesión de un Doctorado honoris causa en Teología. Sin embargo en 2011 la UNED ha nombrado Doctor honoris causa al teólogo Hans Küng; y el teólogo José María Castillo lo ha sido de la Universidad de Granada. Dos gestos que parecen propiciar la vuelta de la Teología, como conocimiento socialmente organizado, a la Universidad española. Pero ¿qué Teología?
La religión puede estimular comportamientos morales, pero sólo si se cree en un Dios punitivo y castigador. Si, por el contrario, se tiene fe en un Dios amoroso o misericordioso, la religión no ejercería ninguna influencia sobre las actitudes morales de los creyentes.
La Fundación John Templeton es una organización religiosa que trabaja por catalizar los descubrimientos sobre las grandes cuestiones de la humanidad, como la complejidad, la evolución o la creatividad. En la presente edición, su premio anual, que supone un montante de más de un millón de euros, ha recaído en un científico ateo, Martin Rees.
Científicos de la Universidad de Duke, en Estados Unidos, han constatado, a partir de un estudio de ocho años de duración en el que participaron 268 personas, que los individuos que pertenecen a minorías religiosas, los individuos no religiosos o aquéllos que han sufrido una experiencia religiosa que les ha cambiado la vida presentan una mayor atrofia del hipocampo que los individuos protestantes.
Los defensores de una filosofía de vida naturalista, suelen considerar que la realidad física es la única realidad posible y que toda referencia trascendente queda fuera de esta perspectiva. En una encuesta realizada por la revista digital Revolución Naturalista (abril de 2011), se propone conocer la postura de los lectores. Para ello, se les invita a elegir su posición entre cuatro posibilidades: No Naturalista (Religioso), No Naturalista (No religioso), Naturalista (Fisicalista) y Naturalista (No fisicalista). Se daba por supuesto que no se puede ser Naturalista (Religioso). ¿Es eso así? En estos últimos meses, dentro de colectivos no religiosos, e incluso abiertamente ateos, está emergiendo un debate sobre la posibilidad de entender la filosofía naturalista de una manera más abierta que sea compatible con la experiencia espiritual.
Los resultados de un estudio realizado en la Universidad de Edimburgo revelan que la religiosidad puede hacer que la gente se sienta más feliz, pero sólo en aquellos casos en los que el grado de religiosidad individual se ajusta al grado de religiosidad de la sociedad. Según el autor de la investigación, la gente es más feliz cuando se encuentra en un grupo social afín a sus propias creencias religiosas.