Los expertos en gerencia aseguran que la lealtad y el compromiso se han convertido en las cualidades más demandadas por los empresarios. Sin embargo, un nuevo estudio señala que, en ocasiones, estos atributos son contraproducentes hasta para las empresas más consolidadas. Según los investigadores, los empleados de “confianza” en ocasiones utilizan información confidencial de las compañías para hacer daño, una vez fuera de ellas.
Frente a una tasa de paro que, lejos de estabilizarse, parece seguir subiendo constantemente están las empresas que ofertan trabajo y más de un centenar de candidatos que compiten por cada empleo. La situación pone en clara ventaja al contratante, que en muchos casos desvirtúa las capacidades de un candidato ofreciendo sueldos muy por debajo de la media. Recientes investigaciones aseguran, que ante ese panorama, los parados prefieren seguir cobrando el subsidio del Estado antes que aceptar su vejación como trabajadores.
Los juicios precipitados son la causa fundamental de las entrevistas “rápidas”. Además, en una hora de entrevista los dos primeros segundos son los que toman como referencia los jefes de recursos humanos para adjudicar un empleo. Estos, según los expertos, no deben ver sólo el curriculum del candidato, sino que además deben dilucidar si el aspirante está capacitado para “aprender”, porque un empleado que es capaz de continuar evolucionando dentro de la organización, impulsará más aún la misma.
La seriedad siempre se ha asociado a la profesionalidad, sin embargo, nuevos estudios ponen en entredicho esta impresión. Según los expertos, la falta de humor y risas en la oficina son el principal promotor del estrés laboral. Cuando reímos, ponemos en marcha unos cuatrocientos músculos, lo que equivale a unos 15 minutos de bicicleta. Los estudios han confirmado que, además de quemar calorías, reír ayuda a mejorar la perspectiva ante los problemas con el jefe y nos hace empleados más productivos. Por Iván Abreu Anaya.
Una nueva investigación, realizada a partir de la constatación de que el exceso de testosterona ciega a los hombres frente a opiniones contrarias y los anima a imponer sus propias decisiones, ha revelado que las mujeres son más colaboradoras en la oficina. Los datos arrojados por el presente estudio señalan la importancia de la sensatez, la complicidad y el instinto de auxilio de las mujeres en el entorno laboral.