Un informe sobre el estado de Internet en el mundo revela que el 50% de los ataques de denegación de servicio que sufre la red proceden de sólo cuatro países: China, Estados Unidos, Taiwan y Venezuela. Asimismo, el informe, elaborado por la empresa de telecomunicaciones Akamai, ofrece datos sobre el funcionamiento y la penetración per capita de Internet en los tres primeros meses de este año. Como era de esperar, Corea del Sur está a años luz del resto del mundo por su desarrollo de la red, con un 64% de conectados mediante banda ancha de alta velocidad. Estados Unidos posee la mayor cantidad de direcciones IP en el mundo (97 millones), sin embargo los mayores índices de penetración se registran en los países nórdicos, con Suecia a la cabeza (0,4 direcciones IP por persona).
Las operadoras de cable de fibra óptica, que habían paralizado las inversiones en nuevos despliegues submarinos después de la crisis de las telecomunicaciones de los años 90, anuncian ahora nuevos proyectos que supondrán una inversión de 7.000 millones de dólares en los próximos tres años. El sector está ahora más estabilizado y la demanda de banda ancha en el mundo no deja de crecer (a un ritmo del 50% anual), por lo que invertir en este momento parece tener sentido. Los nuevos despliegues afectarán sobre todo a zonas del mundo donde ha habido cierto déficit, como Oriente Medio, Asia y África. Así, dos de los proyectos más destacados son el cable que unirá China con Estados Unidos y el que lo hará entre Gran Bretaña e India.
Un nuevo protocolo de comunicación wireless ha sido ideado por investigadores del MIT y de BAE Systems para el ejército norteamericano. El nuevo protocolo permite sacar más provecho a una red móvil inalámbrica, ya que no envía datos en sí, sino una descripción de estos datos. En las pruebas realizadas hasta el momento los investigadores han demostrado que, usando el protocolo, es posible reducir una quinta parte el ancho de banda sin que se merme la calidad de la comunicación de datos. Para su desarrollo se ha partido de un nuevo campo de la teoría de la comunicación llamado “codificación de red” que trata de conseguir el máximo flujo de información en una red determinada.
Un estudio llevado a cabo por Salil Gunashekar, del departamento de ingeniería de la universidad británica de Leicester, ha descubierto que las señales de móviles y las ondas de radio se propagan con más intensidad cuando recorren grandes distancias sobre el mar al anochecer y en los meses de primavera y verano. Normalmente, las ondas de radio están más sujetas a las cambiantes condiciones meteorológicas de las zonas costeras, lo que les impide recorrer distancias más largas o llegar a su destino con la suficiente intensidad. El hallazgo de la Universidad de Leicester podría ayudar a mejorar el diseño de las redes de telefonía móvil de las zonas costeras (sobre todo en las islas) o los sistemas de comunicación de los barcos.
Un estudio llevado a cabo por IDC para la empresa Nortel ha puesto de manifiesto que cada vez más trabajadores pueden englobarse en la categoría de “hiperconectados”, es decir, aquellos usan más de siete dispositivos para conectarse y reclaman a sus empresas los medios para estar siempre online. Actualmente, el 16% de la mano está hiperconectada, pero IDC predice que ese porcentaje ascenderá hasta el 40% en sólo cinco años. Esta pujante tendencia está obligando a las empresas ha cambiar sus modos de trabajo muy rápidamente, así como a dar respuesta a las necesidades de comunicación de sus empleados.
El último informe del Observatorio Europeo de las Tecnologías de Información (OETI) recoge un incremento en el mercado de las TICs en la UE del 3% para este año, alcanzando una cifra de negocio de 761 mil millones de euros. España y Francia son los países que más impulso están dando a este sector, mientras que, por valor, el mercado del Reino Unido supera ampliamente a los demás, con 152 billones de euros (un 20% del mercado europeo total). Las telecomunicaciones van a registrar crecimientos mucho más modestos (un 2%). El informe recoge una caída en todo lo relacionado con la telefonía fija y un incremento de los servicios de datos, ya sean fijos o móviles.
Una red WiMax será construida por un consorcio formado por algunas de las empresas de telecomunicaciones, cable y entretenimiento más importantes de los Estados Unidos. El proyecto, que costará 14.000 millones de dólares, está liderado por Sprint Nextel y Clearwire y cuenta, entre otras, con la participación de Google o Intel. Se espera que la red quede lista en unos dos años y que proporcione acceso a Internet de alta velocidad a los usuarios de telefonía móvil. Según las empresas involucradas, la nueva red será un salto cualitativo importante que puede devolver a los Estados Unidos a la vanguardia de las telecomunicaciones.
Las operadoras de telefonía móvil consideran que no repartir el espectro UHF usado para transmitir las señales de televisión es un desperdicio de recursos. Según un informe de la empresa Spectrum Value Partners, encargado por Ericsson, Nokia, Telefónica y Vodafone, si los operadores móviles tuvieran a su disposición el 25% del espectro UHF la economía europea tendría una inyección extra de dinero de 95 mil millones de euros. Las operadoras quieren beneficiarse de la excelente cobertura que tiene el UHF para prestar servicios de banda ancha a más población y a precios más baratos, ya que no tendrían que llevar a cabo grandes inversiones.
Un proceso para transmitir imágenes médicas a través del teléfono móvil ha sido desarrollado por investigadores de las universidades de Jerusalén y Berkeley. Para ello, han creado un dispositivo de adquisición de datos con funciones limitadas, situado del lado del paciente, que envía a través del móvil información a un servidor central (en cualquier parte del mundo) encargado de convertir esos datos en imágenes médicas. Después, el servidor central envía de vuelta las imágenes al teléfono móvil para que sean analizadas por el especialista. El método, según sus creadores, podría ser muy útil para millones de personas en zonas remotas del mundo en desarrollo que no cuentan con equipos médicos modernos.