Una investigación reciente ha revelado que la soledad está vinculada a una serie de respuestas inmunes disfuncionales. En concreto, el análisis de cientos de personas constató que los individuos más solos mostraban más signos de reactivación del virus latente del herpes y producían más proteínas relacionadas con la inflamación, en comparación con individuos socialmente más conectados. El estudio revela la influencia negativa de la soledad sobre la salud pero, también, la importancia de las relaciones sociales para propiciar un estado físico óptimo.