Expertos en inteligencia artificial y en física de partículas están estudiando conjuntamente cómo se puede aprovechar el aprendizaje automático para experimentos como los del Large Hadron Collider (LHC), del CERN (Ginebra, Suiza). Uno de sus usos más prácticos es filtrar la ingente cantidad de datos en tiempo real, algo que ya se aplica en experimentos 'de comprobación', pero los científicos temen que filtrar datos de forma automática y poco transparente podría desechar grandes descubrimientos involuntariamente.
Un equipo de investigación suizo ha creado una de las experiencias de realidad virtual más impresionante e intuitiva del momento. Bajo el nombre de Birdly se presenta un simulador de vuelo que permite al usuario meterse en la piel de un pájaro, con la inmersión de todo el cuerpo. Tras un recorrido de prueba por las principales ciudades del mundo, los investigadores planean fabricar y vender el simulador en breve.
La compañía suiza Nanolive, surgida de la EPFL, lanzará el día 14 al mercado un nuevo tipo de microscopio que por primera vez permitirá observar el interior de células vivas en 3D sin dañarlas. Se espera que el llamado “3D Cell Explorer” añada una nueva dimensión a la comprensión del funcionamiento celular.
Una colaboración entre psicólogos e informáticos de la Universidad de Washington ha permitido que un robot pueda aprender tal como lo hace un niño, de forma natural. A través de la observación y algoritmos de aprendizaje automático, el robot es capaz de averiguar cómo sus propias acciones dan lugar a diferentes resultados. A partir de ahí utiliza ese modelo probabilístico aprendido para deducir lo que una persona quiere hacer y completar la tarea.
Científicos suecos han desarrollado una cámara hiperespectral de infrarrojos que detecta, fotografía y graba el metano a nivel del suelo. Pesa 30 kilos y mide 50 x 45 x 25 centímetros. Ahora el objetivo es que pueda utilizarse en el aire, pues puede ayudar a medir y observar los gases de efecto invernadero.
La nueva generación de cámaras podría no tener lentes. En ello trabaja un equipo de investigadores de la Universidad Rice (EEUU), para lo que han creado FlatCam, un dispositivo que consta de una máscara codificada y un chip con un sensor del tamaño de una moneda.
Con la ayuda de los canales que distribuyen el agua y los nutrientes en las plantas, investigadores del Laboratorio de Electrónica Orgánica de la Universidad de Linköping (Suecia) han conseguido que una rosa genere componentes clave de los circuitos electrónicos. Esto abre una amplia gama de posibilidades.
Un equipo de investigación del Instituto de Tecnología de Georgia, en Estados Unidos, ha ideado una herramienta que permite la comunicación sin necesidad de hablar. El sistema está compuesto por unos sensores que se colocan en la lengua y los oídos y recogen los movimientos musculares que se producen. Además lleva un software integrado que traduce esos movimientos en órdenes para controlar dispositivos portátiles.
Investigadores japoneses han desarrollado un sensor de temperatura fisiológico flexible y ligero, que mide cambios de 0,02 grados centígrados en el rango de variación humano. Los dispositivos similares existentes hasta ahora requieren de un sistema externo que amplifique la señal, algo innecesario con el nuevo modelo.