Ingenieros del MIT (Boston, EE.UU.) han desarrollado un sistema para crear circuitos biológicos sintéticos hechos de genes que convierten señales analógicas, es decir, continuas, en señales digitales, es decir, de 'sí' o 'no'. Estos circuitos podrán, por ejemplo, medir el nivel de glucosa en sangre, y decidir en función de sus propias medidas si liberan insulina, glucagón, o ninguna de las dos.