El concepto de Sociedad de la Información se creó a partir del papel central que fue tomando la información dentro de las nuevas rutinas de las personas, las empresas y los países, impulsado, además, por las nuevas tecnologías y las posibilidades que ofrecen internet y los diferentes medios electrónicos.
El e-Learning se ha convertido en una opción real y muy valiosa para muchas empresas y universidades, así como empleados y estudiantes, en el mundo que han encontrado una manera de continuar con su formación ahorrando costos y tiempo, y permitiéndose una mayor flexibilidad que se adapte mejor a sus estilos de vida.
A lo anterior se suma la posibilidad que tiene la gente de interactuar con otras culturas y de construir contenidos en la red, lo que hace que exista una riqueza de fuentes enorme y una actualización de contenidos relativamente rápida.
Se trata, por un lado, de educación a distancia auto dirigida, que es aquella en la que existen materiales de formación independiente, cuando el usuario se conecta y encuentra contenidos, materiales y evaluaciones; y, por otro, de educación a distancia dirigida, que es en la que se aprovechan diferentes herramientas como chats, foros y videoconferencias, y se construyen diferentes actividades de aprendizaje.
En Estados Unidos, por ejemplo, de acuerdo con un estudio del Alfred P. Sloan Foundation, el crecimiento de la incorporación estudiantil norteamericana a la educación online supera el 10% anual.
Ahorro de tiempo y dinero
En tiempos de crisis económica muchas empresas y universidades deben recortar sus gastos sin dejar de funcionar y, por lo tanto, lo que deben hacer es llegar a muchos con menos. El e-Learning se vuelve cómodo para el estudiante porque es en su propio tiempo y tiene menos costos, pero, a la vez, para las empresas y universidades, ya que significa entrenar y educar, respectivamente, de una forma más sencilla a las personas que están contratando y recibiendo durante todo el año, virtualmente y sin sacarlos de sus trabajos o de sus países de residencia.
Por una lado están las universidades, que cada vez migran más hacia ofrecer la mayoría de sus programas a distancia y que, incluso, tienen ahora carreras presenciales que cuentan con actividades online; y, por otro, están las empresas, en las que hay distintas modalidades de e-Learning como los contenidos propios de la empresa que son cerrados al público y administrados por recursos humanos, la continuación del desarrollo profesional de los empleados, y los cursos de bienestar para los trabajadores y sus familias.
Según explicó a Tendencias21 Bodil Maul, gerente de cuentas corporativas de Netting Solutions con gran experiencia en la implementación de soluciones de e-Learning en empresas multinacionales, “Hoy en día muchas multinacionales cuentan con programas de e-Learning como parte de su estrategia de entrenamiento; algunas tienen sus propias plataformas (LMS) y desarrollan el contenido internamente y otras deciden hacer outsourcing”.
Ninette Gaxiola, coordinadora de educación corporativa de la empresa Netting Solutions que ofrece soluciones para audiencias en América Latina, Norte América y Europa, declaró a su vez a Tendencias21: “El e-Learning, entendido como la posibilidad de incorporar las nuevas tecnologías de información y comunicación en los procesos de producción, transmisión y gestión del conocimiento, nos da la oportunidad de realizar esta tarea de una forma más efectiva, rentable y acorde a las necesidades de una sociedad 2.0 en la que la tecnología nos permite colaborar activamente. No se trata solo de poner a disposición del personal cursos en línea, sino de identificar y construir, con el apoyo de los expertos, la estrategia que responda a las necesidades particulares de cada grupo integrando los elementos tecnológicos más útiles para cada objetivo y en cada ocasión.”
“Algo fundamental es tener una estrategia en la que se sepa exactamente por qué se quiere utilizar este medio de educación y capacitación, e, igualmente, contar con métricas claras para evaluar su impacto en la organización y en sus usuarios”, explica Maul.
El mundo móvil
Y es que el e-Learning hace parte de un conjunto de tecnologías, medios, herramientas y estrategias del mundo de hoy, que es un “mundo móvil” en el que las personas están “on the go”, no se detienen, sino que continúan con sus tareas desde donde estén. Muchas grandes empresas a nivel mundial aceptan e, incluso, ofrecen a sus empleados la opción de trabajar desde la casa, ya que se espera que todo sea más rápido y eficiente, sin importar dónde ni cómo.
Hay que tener en cuenta que una gran variedad de estas herramientas electrónicas no solo funcionan en los computadores, sino también desde los otros dispositivos móviles, lo que hace que realmente muchas personas accedan a ellas y puedan trabajar en su formación desde los lugares menos pensados.
En la actualidad, la gente quiere flexibilidad y rapidez; quiere contar con la opción de adaptar todas sus labores al estilo de vida que lleva, trabajar y aprovechar los tiempos libres durante los viajes, así como poder, simultáneamente, combinar actividades personales y formativas que contribuyan con la superación personal.
En fin, son muchas las opciones con las que cuentan quienes realmente tienen la voluntad de aprender sin que se vean afectados sus actividades cotidianas y su tiempo libre. Es un mundo en movimiento en donde cada vez importa menos el dónde, cuándo y cómo.
El e-Learning se ha convertido en una opción real y muy valiosa para muchas empresas y universidades, así como empleados y estudiantes, en el mundo que han encontrado una manera de continuar con su formación ahorrando costos y tiempo, y permitiéndose una mayor flexibilidad que se adapte mejor a sus estilos de vida.
A lo anterior se suma la posibilidad que tiene la gente de interactuar con otras culturas y de construir contenidos en la red, lo que hace que exista una riqueza de fuentes enorme y una actualización de contenidos relativamente rápida.
Se trata, por un lado, de educación a distancia auto dirigida, que es aquella en la que existen materiales de formación independiente, cuando el usuario se conecta y encuentra contenidos, materiales y evaluaciones; y, por otro, de educación a distancia dirigida, que es en la que se aprovechan diferentes herramientas como chats, foros y videoconferencias, y se construyen diferentes actividades de aprendizaje.
En Estados Unidos, por ejemplo, de acuerdo con un estudio del Alfred P. Sloan Foundation, el crecimiento de la incorporación estudiantil norteamericana a la educación online supera el 10% anual.
Ahorro de tiempo y dinero
En tiempos de crisis económica muchas empresas y universidades deben recortar sus gastos sin dejar de funcionar y, por lo tanto, lo que deben hacer es llegar a muchos con menos. El e-Learning se vuelve cómodo para el estudiante porque es en su propio tiempo y tiene menos costos, pero, a la vez, para las empresas y universidades, ya que significa entrenar y educar, respectivamente, de una forma más sencilla a las personas que están contratando y recibiendo durante todo el año, virtualmente y sin sacarlos de sus trabajos o de sus países de residencia.
Por una lado están las universidades, que cada vez migran más hacia ofrecer la mayoría de sus programas a distancia y que, incluso, tienen ahora carreras presenciales que cuentan con actividades online; y, por otro, están las empresas, en las que hay distintas modalidades de e-Learning como los contenidos propios de la empresa que son cerrados al público y administrados por recursos humanos, la continuación del desarrollo profesional de los empleados, y los cursos de bienestar para los trabajadores y sus familias.
Según explicó a Tendencias21 Bodil Maul, gerente de cuentas corporativas de Netting Solutions con gran experiencia en la implementación de soluciones de e-Learning en empresas multinacionales, “Hoy en día muchas multinacionales cuentan con programas de e-Learning como parte de su estrategia de entrenamiento; algunas tienen sus propias plataformas (LMS) y desarrollan el contenido internamente y otras deciden hacer outsourcing”.
Ninette Gaxiola, coordinadora de educación corporativa de la empresa Netting Solutions que ofrece soluciones para audiencias en América Latina, Norte América y Europa, declaró a su vez a Tendencias21: “El e-Learning, entendido como la posibilidad de incorporar las nuevas tecnologías de información y comunicación en los procesos de producción, transmisión y gestión del conocimiento, nos da la oportunidad de realizar esta tarea de una forma más efectiva, rentable y acorde a las necesidades de una sociedad 2.0 en la que la tecnología nos permite colaborar activamente. No se trata solo de poner a disposición del personal cursos en línea, sino de identificar y construir, con el apoyo de los expertos, la estrategia que responda a las necesidades particulares de cada grupo integrando los elementos tecnológicos más útiles para cada objetivo y en cada ocasión.”
“Algo fundamental es tener una estrategia en la que se sepa exactamente por qué se quiere utilizar este medio de educación y capacitación, e, igualmente, contar con métricas claras para evaluar su impacto en la organización y en sus usuarios”, explica Maul.
El mundo móvil
Y es que el e-Learning hace parte de un conjunto de tecnologías, medios, herramientas y estrategias del mundo de hoy, que es un “mundo móvil” en el que las personas están “on the go”, no se detienen, sino que continúan con sus tareas desde donde estén. Muchas grandes empresas a nivel mundial aceptan e, incluso, ofrecen a sus empleados la opción de trabajar desde la casa, ya que se espera que todo sea más rápido y eficiente, sin importar dónde ni cómo.
Hay que tener en cuenta que una gran variedad de estas herramientas electrónicas no solo funcionan en los computadores, sino también desde los otros dispositivos móviles, lo que hace que realmente muchas personas accedan a ellas y puedan trabajar en su formación desde los lugares menos pensados.
En la actualidad, la gente quiere flexibilidad y rapidez; quiere contar con la opción de adaptar todas sus labores al estilo de vida que lleva, trabajar y aprovechar los tiempos libres durante los viajes, así como poder, simultáneamente, combinar actividades personales y formativas que contribuyan con la superación personal.
En fin, son muchas las opciones con las que cuentan quienes realmente tienen la voluntad de aprender sin que se vean afectados sus actividades cotidianas y su tiempo libre. Es un mundo en movimiento en donde cada vez importa menos el dónde, cuándo y cómo.