Las tecnologías de la información y comunicación (TIC) han logrado implementar notablemente las posibilidades de las empresas. Ello es debido a la posibilidad que las TIC ofrecen a la hora de trabajar a distancia (teletrabajo). Por ello, gracias a ellas es factible fomentar que las personas con diversidad funcional (los mal llamados discapacitados) se incorporen a la plantilla de una determinada corporación.
En este contexto, Enter acaba de hacer público un informe sobre la práctica de teletrabajo no presencial en España. En este estudio se muestra que el 28,5% de la plantilla de las compañías TIC analizadas teletrabajaban. A su vez, el 42,4% del resto de los trabajadores de estas mismas empresas podrían incluirse como empleado objetivo en algún tipo de teletrabajo.
Empresas y teletrabajo
ENTER ha analizado a un total de 16 empresas de referencia en el sector de las TIC, entre ellas algunas tan significativas como : Accenture, Alcatel-Lucent, Atos Origin, Cisco Systems, EDS, Ericcson, Everis, Hewlett-Packard, IBM, Indra, Intel, IT Deusto, Microsoft, Nortel Networks, Oracle, Sun Microsystems y Telefónica. De estas empresas, más de la mitad tienen a disposición de su plantilla programas definidos y formalizados, así como accesos y herramientas no formalizados para teletrabajar.
Más de la mitad de estas empresas tienen empleados trabajando desde casa, tanto en labores administrativas como en funciones de consultoría y de servicio técnico al cliente. Asimismo, sólo una de las empresas tiene personas trabajando en telecentros. En cambio, la mayoría de las personas que desarrollan teletrabajo tienen su puesto asignado en la empresa pero, por diversos motivos, se han ausentado de su puesto.
La práctica del trabajo virtual
Dada la importancia del trabajo virtual, todas las empresas de este estudio tienen prácticas de trabajo virtual. Para ello, las corporaciones o bien tienen programas formales definidos, o bien sólo poseen accesos y herramientas a disposición de los empleados.
En este sentido, alrededor del 60% de estas empresas tienen ambas cosas, programas definidos y formalizados (por ejemplo un programa de administración, diseño, etc. propio) así como accesos y herramientas no formalizados. Por otro lado, el alrededor del 30% del conjunto de corporaciones analizadas no tienen programas formales. El 10% restante, tiene programas formales pero carece de accesos y herramientas no formalizados.
Las empresas señalan que la aplicación de las TIC al teletrabajo mejora los procesos de trabajo, incrementa la productividad, facilita el trabajo en equipo, mejora la conciliación de la vida laboral y familiar, mejora la comunicación en general, optimiza el espacio físico, reduce el tiempo de desplazamientos –así como los propios desplazamientos– de los empleados y disminuye el impacto ambiental de la actividad de la empresa, tal como hemos informado en otros artículos.
El futuro del teletrabajo
Las empresas estudiadas afirman que tienen la intención de incrementar las prácticas de trabajo a distancia. De este modo, se podrían encaminar hacia una mejora de la conciliación trabajo-familia, hacia una mayor satisfacción del trabajador y a un incremento de la productividad, señala el informe.
Por otro lado, tal y como ha informado a finales del 2008 el Instituto Dominicano de Telecomunicaciones, el trabajo a distancia podría convertirse también en una buena alternativa para las personas con diversidad funcional. Por ello, incrementar el número de trabajadores que realicen estas prácticas podría mejorar la situación socio-laboral de este colectivo.
En este contexto, Enter acaba de hacer público un informe sobre la práctica de teletrabajo no presencial en España. En este estudio se muestra que el 28,5% de la plantilla de las compañías TIC analizadas teletrabajaban. A su vez, el 42,4% del resto de los trabajadores de estas mismas empresas podrían incluirse como empleado objetivo en algún tipo de teletrabajo.
Empresas y teletrabajo
ENTER ha analizado a un total de 16 empresas de referencia en el sector de las TIC, entre ellas algunas tan significativas como : Accenture, Alcatel-Lucent, Atos Origin, Cisco Systems, EDS, Ericcson, Everis, Hewlett-Packard, IBM, Indra, Intel, IT Deusto, Microsoft, Nortel Networks, Oracle, Sun Microsystems y Telefónica. De estas empresas, más de la mitad tienen a disposición de su plantilla programas definidos y formalizados, así como accesos y herramientas no formalizados para teletrabajar.
Más de la mitad de estas empresas tienen empleados trabajando desde casa, tanto en labores administrativas como en funciones de consultoría y de servicio técnico al cliente. Asimismo, sólo una de las empresas tiene personas trabajando en telecentros. En cambio, la mayoría de las personas que desarrollan teletrabajo tienen su puesto asignado en la empresa pero, por diversos motivos, se han ausentado de su puesto.
La práctica del trabajo virtual
Dada la importancia del trabajo virtual, todas las empresas de este estudio tienen prácticas de trabajo virtual. Para ello, las corporaciones o bien tienen programas formales definidos, o bien sólo poseen accesos y herramientas a disposición de los empleados.
En este sentido, alrededor del 60% de estas empresas tienen ambas cosas, programas definidos y formalizados (por ejemplo un programa de administración, diseño, etc. propio) así como accesos y herramientas no formalizados. Por otro lado, el alrededor del 30% del conjunto de corporaciones analizadas no tienen programas formales. El 10% restante, tiene programas formales pero carece de accesos y herramientas no formalizados.
Las empresas señalan que la aplicación de las TIC al teletrabajo mejora los procesos de trabajo, incrementa la productividad, facilita el trabajo en equipo, mejora la conciliación de la vida laboral y familiar, mejora la comunicación en general, optimiza el espacio físico, reduce el tiempo de desplazamientos –así como los propios desplazamientos– de los empleados y disminuye el impacto ambiental de la actividad de la empresa, tal como hemos informado en otros artículos.
El futuro del teletrabajo
Las empresas estudiadas afirman que tienen la intención de incrementar las prácticas de trabajo a distancia. De este modo, se podrían encaminar hacia una mejora de la conciliación trabajo-familia, hacia una mayor satisfacción del trabajador y a un incremento de la productividad, señala el informe.
Por otro lado, tal y como ha informado a finales del 2008 el Instituto Dominicano de Telecomunicaciones, el trabajo a distancia podría convertirse también en una buena alternativa para las personas con diversidad funcional. Por ello, incrementar el número de trabajadores que realicen estas prácticas podría mejorar la situación socio-laboral de este colectivo.