Ayer se reunieron en la Universidad Complutense de Madrid más de 45 organizaciones –entre promotores, colaboradores y adhesiones- para la lectura de un manifiesto contra la ley de educación LOMCE. El evento estuvo presidido por Federico Mayor Zaragoza, exdirector general de la UNESCO, quien hizo un llamamiento a la “objeción de conciencia” de una ley que, según señalan los promotores del evento, es antidemocrática y segregadora.
Una investigación realizada por un psicopedagogo de la Universidad del País Vasco en 14 centros públicos y concertados del País Vasco y Cataluña y en una cooperativa de enseñanza de trabajo asociado de Vitoria-Gasteiz, ha revelado que la implicación del alumnado es mayor en las escuelas cooperativas que en las concertadas y las públicas. La causa de esta diferencia radicaría en que en los centros cooperativos se colabora más, lo que deriva en un mayor aprendizaje organizacional.
La crisis que vivimos favorece tanto el egocentrismo como el socio centrismo. Ambas actitudes aportan seguridad, pero provocan ceguera. En este contexto, una escuela comprensiva, en la que aprender esté vinculado a comprender, educará para una ciudadanía más democrática y ética, capaz de superar sus problemas.
Una investigación realizada por especialistas de la Universidad de Valencia sobre la ciencia ficción y la enseñanza en España ha revelado que, a pesar del gran interés que este género despierta entre los alumnos, su presencia es escasa en aulas y libros de texto. Los investigadores proponen que se realicen actividades de aprendizaje basadas en películas o series de ciencia ficción para mejorar la imagen que de la ciencia y de los científicos tiene el alumnado.
El pasado 21 de septiembre fue aprobado por el Consejo de Ministros el anteproyecto de la LOMCE, una ley de reforma educativa a la que se ha opuesto frontalmente la Asociación Ciudadan@s por la Educación Pública con un manifiesto hecho público hoy. La Asociación considera que la “Ley Wert” es una ley antidemocrática y segregadora.
Hay en el mundo un ser maestra que es distinto del ser maestro. Las educadoras que reconocen la autoridad a la obra de cada madre fomentan la convivencia entre los sexos y no enseñan a los niños a admirar un conocimiento que ha nacido en contra de la madre. Así, estas maestras se sitúan en la aurora del pensamiento, en la que está la lengua materna, la lengua que hablamos, que es la que nos trae de manera directa la realidad.
La convivencia pedagógica entre alumnos y profesores durante los años de instituto, ese periodo de tiempo en que adultos y jóvenes aprenden a compartir vivencias y conocimientos, se puede convertir en algo trascendental tanto para los discípulos como para los profesionales de la educación. Lo cierto es que la experiencia de enseñar y de aprender, aunque antigua, sigue renovándose con cada generación que llega a las aulas.
Cuanto más compleja se hace la sociedad, más necesita, para mantenerse equilibrada, instruirse para reconocer y tratar bien las emociones. Saber comunicar la semántica y la sintaxis de las emociones es una capacidad y una sensibilidad ineludible para aquel que desee ser un co-protagonista, atento, crítico y responsable en el escenario del mundo del siglo XXI.
"Ciudadan@s por la educación pública" es una organización ciudadana independiente que se formó en noviembre de 2011, con el firme objetivo de defender la enseñanza pública de nuestro país. Hoy, 17 de mayo, la organización ha lanzado su primera campaña en favor de la educación pública, en un intento de protegerla del desmantelamiento que está sufriendo. Y lo ha hecho con un enfoque positivo, mediante el testimonio de personas relevantes de las artes, la ciencia y el pensamiento, como Federico Mayor Zaragoza o Teresa Berganza.
Resulta necesario cambiar los textos de los libros escolares para despojarlos de la abstracción, del universalismo y de la falta de origen. La construcción de los relatos de estos libros debe hacerse desde la vida y para la vida, de tal manera que visibilicen la obra femenina de civilización, de creación y de recreación de la vida. De esta forma, cada persona, desde su diferencia como mujer u hombre, podrá evocar el sentido de veracidad aprendida de nuestras madres, que nos enseñaron, al empezar a hablar, que las palabras coincidían siempre con las cosas.