The New York Times destaca en un artículo el último golpe de Donald Trump: ha despedido a parte de la cúpula científica de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos y se propone sustituirla por empresarios, en un gesto que la comunidad científica ha interpretado como destinado a degradar la ciencia y poner al alza los intereses comerciales.
La EPA es la encargada de proteger la salud humana y el medio ambiente. La sustitución de científicos por empresarios, que son los que deben ser vigilados por la EPA, pone de manifiesto el alto nivel de distorsión de las instituciones públicas, cada vez más sometidas a los intereses de poderes económicos que nadie ha elegido.
La medida viene acompañara de importantes recortes en el presupuesto de la EPA, así como con instrucciones precisas para impedir que las actividades contaminantes de las empresas sean contenidas para frenar el calentamiento global y proteger el agua potable. También la EPA ha eliminado algunos datos científicos sobre el cambio climático de sus sitios web.
Lo que pasa en la EPA no afecta sólo a Estados Unidos, ya que es el segundo país del mundo (después de China) que más emisiones de CO2 lanza a la atmósfera, acelerando un calentamiento global que nos afecta a todos.
Le Monde advierte al respecto que todos los indicadores climáticos están en rojo, y que nadie cree ya que se pueda contener la subida de temperatura en los límites establecidos en el Acuerdo de París de diciembre de 2015. El clima se está metiendo en un callejón sin salida.
La EPA es la encargada de proteger la salud humana y el medio ambiente. La sustitución de científicos por empresarios, que son los que deben ser vigilados por la EPA, pone de manifiesto el alto nivel de distorsión de las instituciones públicas, cada vez más sometidas a los intereses de poderes económicos que nadie ha elegido.
La medida viene acompañara de importantes recortes en el presupuesto de la EPA, así como con instrucciones precisas para impedir que las actividades contaminantes de las empresas sean contenidas para frenar el calentamiento global y proteger el agua potable. También la EPA ha eliminado algunos datos científicos sobre el cambio climático de sus sitios web.
Lo que pasa en la EPA no afecta sólo a Estados Unidos, ya que es el segundo país del mundo (después de China) que más emisiones de CO2 lanza a la atmósfera, acelerando un calentamiento global que nos afecta a todos.
Le Monde advierte al respecto que todos los indicadores climáticos están en rojo, y que nadie cree ya que se pueda contener la subida de temperatura en los límites establecidos en el Acuerdo de París de diciembre de 2015. El clima se está metiendo en un callejón sin salida.