El paisaje es un concepto que va más allá de lo que la vista abarca. Hay gente dispuesta a desplazarse a un lugar para conocer un entorno o para establecerse allí, por múltiples motivos, entre otros por la historia asociada al lugar. Si el espacio se deteriora, por ejemplo, por un incendio forestal, el valor del paisaje se reduce.
Un equipo de ingenieros de la Universidad de Córdoba ha creado una aplicación informática, denominada Visual-Seveif, que estima el valor económico de los paisajes para ayudar a la Administración a tomar mejores decisiones en la gestión de recursos vinculados a su conservación, como por ejemplo los medios preventivos de los fuegos.
“El paisaje incluye no sólo al territorio, sino también a las personas que lo habitan y la historia social y natural asociada a este espacio”, explica Miguel Ángel Herrera, investigador del Departamento de Ingeniería Forestal. “Es un concepto que la política comunitaria ha incorporado desde el Convenio Europeo del Paisaje, también conocido como Convenio de Florencia de 2000, y que ha sido asumido por la mayoría de los Estados miembros de la UE. En España, se traspuso en 2008 a la legislación nacional y forma parte la política autonómica. En Andalucía ya existe una Estrategia de Paisaje regional que incluye un observatorio de este recurso”, incide el profesor de la Escuela de Ingeniería Agronómica y de Montes de la UCO, en la nota de prensa de ésta.
Debido a la importancia adquirida por este concepto (en términos ecológicos, el paisaje se puede considerar como un nivel superior al ecosistema) un equipo de ingenieros de la UCO que trabaja en el ámbito forestal inició hace unos años una línea de investigación para conocer el valor de los paisajes.
“Evidentemente, cuando observamos un paisaje, ahí existe algo más valioso que la suma de la madera del monte o de los frutos que se pueden obtener de él”, explica Francisco Rodríguez y Silva, investigador principal del proyecto. Esa concepción economicista es habitual a la hora de valorar el recurso. “Hay gente que piensa que el valor de un paisaje de sierra es menor que, por ejemplo, el de una farmacia en el centro de Córdoba. Algo no encaja”, indica el investigador.
Un equipo de ingenieros de la Universidad de Córdoba ha creado una aplicación informática, denominada Visual-Seveif, que estima el valor económico de los paisajes para ayudar a la Administración a tomar mejores decisiones en la gestión de recursos vinculados a su conservación, como por ejemplo los medios preventivos de los fuegos.
“El paisaje incluye no sólo al territorio, sino también a las personas que lo habitan y la historia social y natural asociada a este espacio”, explica Miguel Ángel Herrera, investigador del Departamento de Ingeniería Forestal. “Es un concepto que la política comunitaria ha incorporado desde el Convenio Europeo del Paisaje, también conocido como Convenio de Florencia de 2000, y que ha sido asumido por la mayoría de los Estados miembros de la UE. En España, se traspuso en 2008 a la legislación nacional y forma parte la política autonómica. En Andalucía ya existe una Estrategia de Paisaje regional que incluye un observatorio de este recurso”, incide el profesor de la Escuela de Ingeniería Agronómica y de Montes de la UCO, en la nota de prensa de ésta.
Debido a la importancia adquirida por este concepto (en términos ecológicos, el paisaje se puede considerar como un nivel superior al ecosistema) un equipo de ingenieros de la UCO que trabaja en el ámbito forestal inició hace unos años una línea de investigación para conocer el valor de los paisajes.
“Evidentemente, cuando observamos un paisaje, ahí existe algo más valioso que la suma de la madera del monte o de los frutos que se pueden obtener de él”, explica Francisco Rodríguez y Silva, investigador principal del proyecto. Esa concepción economicista es habitual a la hora de valorar el recurso. “Hay gente que piensa que el valor de un paisaje de sierra es menor que, por ejemplo, el de una farmacia en el centro de Córdoba. Algo no encaja”, indica el investigador.
El instrumento
Para valorar en términos económicos los espacios naturales, los ingenieros han creado una herramienta informática. El instrumento pretende dar una respuesta técnica a los gestores de los recursos públicos y que la toma de decisiones no esté condicionada por arbitrariedades de los políticos. El software permite evaluar si recursos y calcular si los recursos destinados para su mantenimiento son suficientes.
La principal amenaza estudiada son los incendios forestales. Actualmente, la Junta de Andalucía destina decenas de millones de euros en prevención y extinción de los fuegos en el ámbito rural, estiman los investigadores de la UCO. “Tiene que haber un instrumento para evaluar si la inversión es adecuada en relación al valor del paisaje y estamos trabajando para dar respuesta a esta pregunta”, valora Herrera.
Los primeros resultados de esta investigación han sido publicados recientemente en la revista científica Environmental Science & Policy. En el artículo han planteado la metodología para evaluar cualitativamente el paisaje a partir de un sistema de información geográfica. Para ello, seleccionaron la sierra de Aracena (norte de la provincia de Huelva). El parque natural está catalogado como paisaje terrestre protegido.
Los investigadores encuestaron a unas 600 personas, en su mayoría visitantes, y les interrogaron por el valor que atribuían a la zona. Entre las preguntas estaba, por ejemplo: “¿Cuánto está dispuesto a pagar por observar este paisaje?”. Las valoraciones de los ciudadanos respecto a recursos naturales a través de cuestionarios no son habituales en Europa, pero en Estados Unidos se emplean de forma recurrente.
Paralelamente, el equipo de ingenieros ha presentado su propuesta en diferentes foros técnicos, como el Congreso de Investigación de Recursos Forestales (Coimbra, Portugal, 2014) y el Simposio Internacional de Economía de Fuego y Planificación (Ciudad de Méjico, 2012).
La aplicación está accesible en la web del investigador principal: franciscorodriguezysilva.com. La herramienta permite visualizar la expansión espacial de la superficie en combustión de forma gráfica y determinar el impacto económico de los daños y perjuicios en la superficie afectada. Incluye además un módulo que permite calcular el índice de peligro potencial en las celdas que previamente hayan sido generadas por el usuario.
Hace un año, investigadores de Cataluña presentaron un modelo matemático que permite estimar la probabilidad de un paisaje de tener uno de estos tres tipos de incendio: propiciado por el viento, por la forma del terreno o por la cantidad de combustible disponible para el fuego. La herramienta resulta útil para desarrollar estrategias de gestión territorial y forestal que prevengan el inicio y la propagación del fuego, explicaban.
Para valorar en términos económicos los espacios naturales, los ingenieros han creado una herramienta informática. El instrumento pretende dar una respuesta técnica a los gestores de los recursos públicos y que la toma de decisiones no esté condicionada por arbitrariedades de los políticos. El software permite evaluar si recursos y calcular si los recursos destinados para su mantenimiento son suficientes.
La principal amenaza estudiada son los incendios forestales. Actualmente, la Junta de Andalucía destina decenas de millones de euros en prevención y extinción de los fuegos en el ámbito rural, estiman los investigadores de la UCO. “Tiene que haber un instrumento para evaluar si la inversión es adecuada en relación al valor del paisaje y estamos trabajando para dar respuesta a esta pregunta”, valora Herrera.
Los primeros resultados de esta investigación han sido publicados recientemente en la revista científica Environmental Science & Policy. En el artículo han planteado la metodología para evaluar cualitativamente el paisaje a partir de un sistema de información geográfica. Para ello, seleccionaron la sierra de Aracena (norte de la provincia de Huelva). El parque natural está catalogado como paisaje terrestre protegido.
Los investigadores encuestaron a unas 600 personas, en su mayoría visitantes, y les interrogaron por el valor que atribuían a la zona. Entre las preguntas estaba, por ejemplo: “¿Cuánto está dispuesto a pagar por observar este paisaje?”. Las valoraciones de los ciudadanos respecto a recursos naturales a través de cuestionarios no son habituales en Europa, pero en Estados Unidos se emplean de forma recurrente.
Paralelamente, el equipo de ingenieros ha presentado su propuesta en diferentes foros técnicos, como el Congreso de Investigación de Recursos Forestales (Coimbra, Portugal, 2014) y el Simposio Internacional de Economía de Fuego y Planificación (Ciudad de Méjico, 2012).
La aplicación está accesible en la web del investigador principal: franciscorodriguezysilva.com. La herramienta permite visualizar la expansión espacial de la superficie en combustión de forma gráfica y determinar el impacto económico de los daños y perjuicios en la superficie afectada. Incluye además un módulo que permite calcular el índice de peligro potencial en las celdas que previamente hayan sido generadas por el usuario.
Hace un año, investigadores de Cataluña presentaron un modelo matemático que permite estimar la probabilidad de un paisaje de tener uno de estos tres tipos de incendio: propiciado por el viento, por la forma del terreno o por la cantidad de combustible disponible para el fuego. La herramienta resulta útil para desarrollar estrategias de gestión territorial y forestal que prevengan el inicio y la propagación del fuego, explicaban.
Referencia bibliográfica:
Juan Ramón Molina, Francisco Rodríguez y Silva, Miguel Ángel Herrera: Integrating economic landscape valuation into Mediterranean territorial planning. Environmental Science & Policy (2016). doi:10.1016/j.envsci.2015.11.010
Juan Ramón Molina, Francisco Rodríguez y Silva, Miguel Ángel Herrera: Integrating economic landscape valuation into Mediterranean territorial planning. Environmental Science & Policy (2016). doi:10.1016/j.envsci.2015.11.010