Un estudio realizado en la Universidad de Bath, en el Reino Unido, ha revelado que los fumadores tienen el doble de posibilidades de dejar de fumar si participan en un grupo de apoyo, que si intentan hacerlo solos.

La investigación fue realizada comparando el éxito y la eficacia de dos tipos de servicios de ayuda a dejar de fumar, ofrecidos por el National Health Service (NHS). Uno de los tipos de ayuda comprendía la terapia de grupo, mientras que el otro estaba basado en la atención personal y en el suministro de fármacos.

Tras cuatro semanas de tratamiento, más de un tercio de los fumadores que habían asistido a grupos de apoyo había dejado de fumar, es decir, casi el doble que los participantes que habían abandonado el hábito mediante el otro sistema.

Según los científicos, estos resultados demuestran que la terapia de grupo, combinada con la medicación adecuada, le funciona muy bien a mucha gente. El siguiente paso en la investigación será el comprobar los resultados obtenidos con estas terapias, un año después de que comenzaran.
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