Los hombres que buscan una pareja pasajera se fijan más en el cuerpo de las mujeres. Por el contrario, aquéllos que aspiran a conseguir una relación estable se fijan más en el rostro, revela un estudio realizado por psicólogos de la Universidad de Texas en Austin (Estados Unidos).

Esto sería porque el cuerpo de la mujer proporciona generalmente información clave acerca de su momento de fertilidad, mientras que la cara transmite información sobre sus características reproductivas generales, explican los investigadores.

El hecho de que los hombres se fijen en diversos aspectos de la mujer en función del tipo de relación que pretenden conseguir sugiere que existe una adaptación psicológica en los varones destinada a encontrar patrones de fertilidad en sus potenciales parejas.

Según los autores del estudio, el emparejamiento es clave en la maquinaria de la selección natural, y esta investigación, en la que participaron 375 estudiantes universitarios, ayuda a clarificar el porqué de ciertas preferencias.

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