Un astrofísico y un palentólogo de la Universidad de Washington han aplicado a la Tierra los conocimientos actuales sobre la vida de las estrellas y los planetas y han establecido que el fin del mundo ya ha comenzado porque dentro de 500 millones de años desaparecerá toda forma de vida sobre la Tierra. No consideran posible adaptarse a los futuros cambios ni que lleguemos a sobrevivir en otros planetas. Por Eduardo Martínez.
El año que termina ha sido emblemático en lo que se refiere a la historia del clima de la Tierra desde que se establecieran las primeras mediciones de temperatura en 1860. Ha sido el segundo más cálido de la historia documentada, con temperaturas medias superiores en medio grado a las de los últimos cuarenta años. Como resultado, las anomalías se han generalizado en todos los continentes, señalando que el cambio climático forma parte ya de la historia del siglo XXI. Por Vanessa Marsh.
La celebración del último congreso de la Unión Geofísica Americana ha desvelado la magnitud de los cambios que ocurren en el Ártico, donde los niveles de hielo han descendido alarmantemente hasta alcanzar los de los años cincuenta y puede incluso que los de varios siglos atrás. El impacto humano ha perturbado los ciclos de la Oscilación Ártica, acelerado la elevación de la temperatura de los océanos y provocado la elevación del nivel del mar. Por Eduardo Martínez.
Un proyecto científico para elaborar el primer mapa mental humano ha sido propuesto por un profesor del Instituto de Ciencias Biológicas de Tsukuba (Japón) con la finalidad de radiografiar el mundo de las ideas y de completar así el mapa del genoma humano, limitado a la realidad corporal. El proyecto se basa en la hipótesis de que las ideas y conceptos son limitados, a pesar de la diversidad cultural y de la complejidad del espíritu humano. Una nueva aventura que revolucionará la ciencia, la cultura y los sistemas de creencias. Por Eduardo Martínez.
En determinadas condiciones la materia puede enfriarse a medida que se le aporta calor, lo que desvela una nueva paradoja de la física que han descubierto científicos franceses y austriacos. La paradoja reabre el debate sobre la frontera que separa al mundo microscópico del macroscópico y sobre la misma definición de temperatura, al mismo tiempo que afectará al desarrollo de la nanotecnología. Por Eduardo Martínez.
La posibilidad de que un gran asteroide choque contra la Tierra no es de cien o doscientos años, sino de mil años, según una investigación realizada con el apoyo de satélites militares. La investigación ha analizado 300 impactos de pequeños meteoritos ocurridos en la atmósfera desde 1994 y ha establecido sólidas bases estadísticas para extrapolar la frecuencia a objetos de mayor tamaño. Por Eduardo Martínez.
Dos científicos norteamericanos sugieren que las partículas exóticas que aparecen y desaparecen en el vacío absoluto obedecen a una energía de naturaleza desconocida que es reflejo de dimensiones adicionales de la materia, complementarias del ancho, longitud y altura que sitúan a los cuerpos en el espacio. Pretenden demostrarlo con una nueva versión del Efecto Casimir, según el cual el vacío puede generar movimiento en contra del principio clásico de conservación de la energía. Por Vanessa Marsh.
Una investigación sobre el fenómeno de la ola que se desencadena en los partidos de fútbol más emocionantes ha podido determinar que estos comportamientos se corresponden con los de las células cardiacas y con la propagación de los incendios forestales, lo que desvela una interesante correspondencia entre algunos comportamientos grupales y los fenómenos biológicos. Por Raúl Morales.
Las observaciones astronómicas realizadas por el satélite espacial Hubble en los últimos doce años permiten augurar a los 13.000 científicos reunidos en Houston, en el marco del Congreso Mundial del Espacio, que en 2010 muchos de nuestros conocimientos sobre el Universo serán renovados porque las nuevas capacidades de la observación nos permitirán asistir en directo a la infancia del Universo y al nacimiento de muchas galaxias. Por Eduardo Martínez.
Un grupo de investigadores de la Universidad de San Diego, en California, ha creado un ordenador capaz de comprender las emociones humanas y de desvelar incluso los sentimientos ocultos. Ha construido un léxico de expresión emocional a partir del análisis de 10.000 rostros en un intento de elevar la sensibilidad de las máquinas. Por Eduardo Martínez.