Mplanet - Innovation in B2B - Dan Henson, GE. Foto: Hyku. Everystockphoto.
Una vez “superada” la parte más complicada y profunda de la crisis el mundo empieza a sentirse diferente y los líderes de las organizaciones a respirar con más tranquilidad y a esperar que retornen las condiciones normales bajo las que operan sus empresas la mayor parte del tiempo.
Lo que muchos de los directivos alrededor del mundo parecen no haberse preguntado es qué pasará si se quedan esperando y actúan asumiendo que todo volverá a ser como antes, y la situación no regresa a ese punto esperado, sino que toma otro rumbo e impone nuevas reglas que exijan comportamientos diferentes…
Es esa precisamente la preocupación expresada en un nuevo estudio de la firma de servicios de negocio DBO, en el que se encontró que 44% de los directivos del Reino Unido creen que la situación volverá a la normalidad de antes de la crisis y que sus negocios no cambiarán fundamentalmente en los próximos cinco años.
Los autores de la investigación, que incluyen académicos, organizaciones de negocios y think-tanks, advierten a los directivos del mundo sobre la necesidad de que acepten que la economía no volverá a ser la misma y de que reinventen sus empresas si quieren que estas hagan parte del grupo de sobrevivientes.
Reinventarse para vivir en un mundo nuevo
De acuerdo con el estudio, el planeta vivirá una situación económica difícil y experimentará un crecimiento débil, por lo menos, hasta el año 2015, lo que hace necesario que esos directivos que creen firmemente que todo volverá a la normalidad durante los próximos dos años reevalúen su situación y tomen medidas urgentes para reinventarse y adaptarse a las condiciones de ese nuevo orden mundial que emergerá a medida que el desempeño económico mejore.
Es el momento de evaluar la situación actual de un negocio dentro del entorno económico y de tomar decisiones fundamentales acerca del futuro de ese negocio bajo las nuevas condiciones de los mercados y de la economía mundial. Aquellas empresas que quieran sobrevivir y continuar siendo competitivas, deberán transformarse y adaptarse a las nuevas necesidades y retos.
El informe habla de que el análisis del panorama para el cambio puede incluir un nuevo enfoque en todos los aspectos, es decir, que puede tratarse de contemplar la posibilidad de adoptar un nuevo modelo de negocios y de reevaluar todo aquello que se necesita para volver a tener un crecimiento sostenible que, posiblemente, sea mucho más bajo que el de antes.
Como lo explica Peter Hemington, socio de BDO, “A pesar de que la recesión pueda haber terminado –esperamos- quedarán las consecuencias. Como resultado, el entorno económico continuará siendo difícil por algún tiempo. Atado a ello, estamos pasando por un período de profundo cambio social y tecnológico, lo que significa que algunos modelos de negocio tendrán que marchitarse y morir, mientras que otros prosperarán y crecerán. Los negocios necesitan analizar cuidadosamente la dirección en la que está cambiando el mundo para reinventarse y asegurarse así de su supervivencia y su prosperidad en el nuevo entorno”.
Lo que muchos de los directivos alrededor del mundo parecen no haberse preguntado es qué pasará si se quedan esperando y actúan asumiendo que todo volverá a ser como antes, y la situación no regresa a ese punto esperado, sino que toma otro rumbo e impone nuevas reglas que exijan comportamientos diferentes…
Es esa precisamente la preocupación expresada en un nuevo estudio de la firma de servicios de negocio DBO, en el que se encontró que 44% de los directivos del Reino Unido creen que la situación volverá a la normalidad de antes de la crisis y que sus negocios no cambiarán fundamentalmente en los próximos cinco años.
Los autores de la investigación, que incluyen académicos, organizaciones de negocios y think-tanks, advierten a los directivos del mundo sobre la necesidad de que acepten que la economía no volverá a ser la misma y de que reinventen sus empresas si quieren que estas hagan parte del grupo de sobrevivientes.
Reinventarse para vivir en un mundo nuevo
De acuerdo con el estudio, el planeta vivirá una situación económica difícil y experimentará un crecimiento débil, por lo menos, hasta el año 2015, lo que hace necesario que esos directivos que creen firmemente que todo volverá a la normalidad durante los próximos dos años reevalúen su situación y tomen medidas urgentes para reinventarse y adaptarse a las condiciones de ese nuevo orden mundial que emergerá a medida que el desempeño económico mejore.
Es el momento de evaluar la situación actual de un negocio dentro del entorno económico y de tomar decisiones fundamentales acerca del futuro de ese negocio bajo las nuevas condiciones de los mercados y de la economía mundial. Aquellas empresas que quieran sobrevivir y continuar siendo competitivas, deberán transformarse y adaptarse a las nuevas necesidades y retos.
El informe habla de que el análisis del panorama para el cambio puede incluir un nuevo enfoque en todos los aspectos, es decir, que puede tratarse de contemplar la posibilidad de adoptar un nuevo modelo de negocios y de reevaluar todo aquello que se necesita para volver a tener un crecimiento sostenible que, posiblemente, sea mucho más bajo que el de antes.
Como lo explica Peter Hemington, socio de BDO, “A pesar de que la recesión pueda haber terminado –esperamos- quedarán las consecuencias. Como resultado, el entorno económico continuará siendo difícil por algún tiempo. Atado a ello, estamos pasando por un período de profundo cambio social y tecnológico, lo que significa que algunos modelos de negocio tendrán que marchitarse y morir, mientras que otros prosperarán y crecerán. Los negocios necesitan analizar cuidadosamente la dirección en la que está cambiando el mundo para reinventarse y asegurarse así de su supervivencia y su prosperidad en el nuevo entorno”.
Flexibilidad para sobrevivir
Lo que plantea la investigación es importante no solo para la situación actual, sino para que en el futuro los líderes tengan presente la importancia de la flexibilidad y la capacidad de adaptación, que son, en últimas, habilidades fundamentales para salir fortalecidos de los tiempos de crisis. Es esencial que los directivos aprendan a transformarse a la par con el mundo para no quedarse en eras que ya no van más.
Teniendo en cuenta lo complejo de la recesión económica por la que acaba de pasar el mundo, en la que, según afirma el reporte, (durante 2009) la economía del Reino Unido se encogió 4,8% (el ritmo más rápido de retroceso anual en 88 años y seis veces más severo que le promedio global), los líderes deben ser conscientes de que aún los esperan tiempos difíciles de poca seguridad y de crecimiento débil, por lo que su reacción debe ser activa y estar encaminada hacia la transformación.
Pero no todo es malo ni hay por qué perder las esperanzas; como tantas veces se ha repetido, los tiempos de crisis son momentos para crecer y mejorar. Como lo afirma Ian Pearson, futurista de Futurizon, en el reporte, “Creo que la recesión fue bastante saludable. Ha reforzado la necesidad de desechar una horrible cantidad de elementos inútiles de la economía. Las compañías que sean más rápidas en su modificación y que estén más dispuestas a apoderarse de nuevas técnicas y nuevos modelos de negocio prosperarán y saldrán de la recesión mucho más ricas de lo que eran”.
Así las cosas, solo queda decir que el futuro es de aquellos líderes visionarios que no le tengan miedo al cambio y que se atrevan a transformar sus negocios en empresas viables en el nuevo entorno económico.
Lo que plantea la investigación es importante no solo para la situación actual, sino para que en el futuro los líderes tengan presente la importancia de la flexibilidad y la capacidad de adaptación, que son, en últimas, habilidades fundamentales para salir fortalecidos de los tiempos de crisis. Es esencial que los directivos aprendan a transformarse a la par con el mundo para no quedarse en eras que ya no van más.
Teniendo en cuenta lo complejo de la recesión económica por la que acaba de pasar el mundo, en la que, según afirma el reporte, (durante 2009) la economía del Reino Unido se encogió 4,8% (el ritmo más rápido de retroceso anual en 88 años y seis veces más severo que le promedio global), los líderes deben ser conscientes de que aún los esperan tiempos difíciles de poca seguridad y de crecimiento débil, por lo que su reacción debe ser activa y estar encaminada hacia la transformación.
Pero no todo es malo ni hay por qué perder las esperanzas; como tantas veces se ha repetido, los tiempos de crisis son momentos para crecer y mejorar. Como lo afirma Ian Pearson, futurista de Futurizon, en el reporte, “Creo que la recesión fue bastante saludable. Ha reforzado la necesidad de desechar una horrible cantidad de elementos inútiles de la economía. Las compañías que sean más rápidas en su modificación y que estén más dispuestas a apoderarse de nuevas técnicas y nuevos modelos de negocio prosperarán y saldrán de la recesión mucho más ricas de lo que eran”.
Así las cosas, solo queda decir que el futuro es de aquellos líderes visionarios que no le tengan miedo al cambio y que se atrevan a transformar sus negocios en empresas viables en el nuevo entorno económico.