Los ciudadanos, gestores públicos y proveedores de servicios europeos podrán acceder a datos medioambientales importantes mucho más ágilmente desde ayer, después del lanzamiento del satélite de la ESA Sentinel 1-A.
El satélite, de 2,3 toneladas, despegó en un cohete Soyuz del Puerto Espacial Europeo en Kourou, en la Guayana Francesa, a las 23:02 hora española. La primera unidad o etapa se separó 118 segundos (2 minutos) más tarde, seguida de la cofia (209 seg, 3 minutos y medio), la etapa 2 (287 seg, casi 5 minutos) y el ensamblaje superior (526 seg, casi 9 minutos).
Tras un encendido de 617 segundos (10 minutos), la unidad superior Fregat colocó a Sentinel en una órbita heliosíncrona a 693 Kilómetros de altitud. El satélite se separó de la etapa superior 23 minutos y 24 segundos después del despegue.
“Sentinel-1A inaugura una nueva página en la puesta en marcha de Copernicus, la segunda iniciativa emblemática en el programa espacial de la UE después del sistema de navegación Galileo”, declara Jean-Jacques Dordain, director general de la ESA (Agencia Espacial Europea), en la nota de ésta. “El programa Copernicus proporcionará a los europeos los mejores servicios de medio ambiente y seguridad que proporciona el espacio”.
Esta misión es la primera de seis familias de satélites que integrarán el núcleo de la red de vigilancia medioambiental europea Copernicus. Copernicus proporcionará información operacional relativa a la superficie terrestre del planeta, a los océanos y a la atmósfera, para contribuir a la toma de decisiones ambientales y de seguridad y a las necesidades de los ciudadanos y los proveedores de servicios.
Diseñada como una constelación de dos satélites – Sentinel-1A y -1B –, esta misión equipada con un radar de banda C proporcionará imágenes de las superficies terrestre y oceánica de Europa, Canadá y las regiones polares casi en tiempo real, obtenidas en cualquier momento del día o la noche y en todas las condiciones meteorológicas.
El satélite, de 2,3 toneladas, despegó en un cohete Soyuz del Puerto Espacial Europeo en Kourou, en la Guayana Francesa, a las 23:02 hora española. La primera unidad o etapa se separó 118 segundos (2 minutos) más tarde, seguida de la cofia (209 seg, 3 minutos y medio), la etapa 2 (287 seg, casi 5 minutos) y el ensamblaje superior (526 seg, casi 9 minutos).
Tras un encendido de 617 segundos (10 minutos), la unidad superior Fregat colocó a Sentinel en una órbita heliosíncrona a 693 Kilómetros de altitud. El satélite se separó de la etapa superior 23 minutos y 24 segundos después del despegue.
“Sentinel-1A inaugura una nueva página en la puesta en marcha de Copernicus, la segunda iniciativa emblemática en el programa espacial de la UE después del sistema de navegación Galileo”, declara Jean-Jacques Dordain, director general de la ESA (Agencia Espacial Europea), en la nota de ésta. “El programa Copernicus proporcionará a los europeos los mejores servicios de medio ambiente y seguridad que proporciona el espacio”.
Esta misión es la primera de seis familias de satélites que integrarán el núcleo de la red de vigilancia medioambiental europea Copernicus. Copernicus proporcionará información operacional relativa a la superficie terrestre del planeta, a los océanos y a la atmósfera, para contribuir a la toma de decisiones ambientales y de seguridad y a las necesidades de los ciudadanos y los proveedores de servicios.
Diseñada como una constelación de dos satélites – Sentinel-1A y -1B –, esta misión equipada con un radar de banda C proporcionará imágenes de las superficies terrestre y oceánica de Europa, Canadá y las regiones polares casi en tiempo real, obtenidas en cualquier momento del día o la noche y en todas las condiciones meteorológicas.
Continuidad
Equipada con un potente radar de apertura sintética, esta misión garantiza la continuidad con el satélite europeo Envisat, que dejó de funcionar en 2012 tras 10 años de servicio. La tecnología se basa en una sólida herencia de radares en satélites, iniciada con ERS-1 hace 23 años.
“El lanzamiento del primer satélite Sentinel-1 marca un cambio en la filosofía de nuestros programas de observación de la Tierra”, señala Volker Liebig, Director de Programas de Observación de la Tierra de la ESA.
“En meteorología, los satélites han estado proporcionando datos fiables para el pronóstico del tiempo durante más de 35 años. Con el programa Copernicus ahora tendremos una fuente de información similar para servicios medioambientales, así como para aplicaciones en seguridad y en el ámbito de la respuesta ante desastres”.
Además de transmitir datos a estaciones de tierra de todo el planeta para su rápida distribución, Sentinel-1 cuenta también con un terminal láser para transmitir a través de los satélites del Sistema Europeo de Repetición de Datos (European Data Relay System), en órbita geoestacionaria, para la transmisión continua de datos.
El despliegue
Los paneles solares y la antena del satélite están siendo desplegadas en este momento, en una compleja secuencia que se espera que dure unas 11 horas. La finalización de la secuencia será anunciada en www.esa.int/sentinel-1 y via Twitter.
Tras la fase inicial de 'lanzamiento y órbita temprana' el satélite entrará en la fase de commissioning, en la que todos los instrumentos serán probados y calibrados. Se espera que la misión empiece sus operaciones dentro de tres meses.
Thales Alenia Space Italy es el contratista principal, y Airbus DS Germany es responsable del radar de banda C. Airbus DS UK proporcionó el subsistema electrónico del radar central. Los datos de los satélites Sentinel serán abiertos y gratuitos. Los datos en bruto serán analizados y procesados por proveedores de servicios tanto del sector público como del privado.
Equipada con un potente radar de apertura sintética, esta misión garantiza la continuidad con el satélite europeo Envisat, que dejó de funcionar en 2012 tras 10 años de servicio. La tecnología se basa en una sólida herencia de radares en satélites, iniciada con ERS-1 hace 23 años.
“El lanzamiento del primer satélite Sentinel-1 marca un cambio en la filosofía de nuestros programas de observación de la Tierra”, señala Volker Liebig, Director de Programas de Observación de la Tierra de la ESA.
“En meteorología, los satélites han estado proporcionando datos fiables para el pronóstico del tiempo durante más de 35 años. Con el programa Copernicus ahora tendremos una fuente de información similar para servicios medioambientales, así como para aplicaciones en seguridad y en el ámbito de la respuesta ante desastres”.
Además de transmitir datos a estaciones de tierra de todo el planeta para su rápida distribución, Sentinel-1 cuenta también con un terminal láser para transmitir a través de los satélites del Sistema Europeo de Repetición de Datos (European Data Relay System), en órbita geoestacionaria, para la transmisión continua de datos.
El despliegue
Los paneles solares y la antena del satélite están siendo desplegadas en este momento, en una compleja secuencia que se espera que dure unas 11 horas. La finalización de la secuencia será anunciada en www.esa.int/sentinel-1 y via Twitter.
Tras la fase inicial de 'lanzamiento y órbita temprana' el satélite entrará en la fase de commissioning, en la que todos los instrumentos serán probados y calibrados. Se espera que la misión empiece sus operaciones dentro de tres meses.
Thales Alenia Space Italy es el contratista principal, y Airbus DS Germany es responsable del radar de banda C. Airbus DS UK proporcionó el subsistema electrónico del radar central. Los datos de los satélites Sentinel serán abiertos y gratuitos. Los datos en bruto serán analizados y procesados por proveedores de servicios tanto del sector público como del privado.