El Orinoco representa uno de los ecosistemas más ricos en América del Sur. Imagen: Darkiller.
Un grupo de investigadores venezolanos han descubierto 13 nuevas especies de peces y un crustáceo no catalogadas hasta ahora en una investigación científica.
Los hallazgos se realizaron al explorar los recursos y la biodiversidad en la confluencia de los ríos Orinoco y Ventuari, en el Estado de Amazonas en Venezuela, según una nota del canal de noticias CDN.
Patrocinada por distintas universidades -como la Universidad Central de Venezuela, la de Centro Occidental (UCLA) o la experimental de los Llanos- y por diferentes instituciones conservacionistas -como Conservación Internacional de Venezuela o la Fundación Cisneros, entre otras- , la expedición se planteó realizar una evaluación rápida y explorar y documentar la biodiversidad acuática, la diversidad económica y social de los diferentes pueblos indígenas autóctonos que habitan en esta zona, así como establecer las posibles amenazas y las oportunidades, tanto ecoambientales como económicas, que existen en esta región.
A lo largo de tres semanas, los investigadores consiguieron catalogar la existencia de 357 especies de plantas, 157 especies de aves y 245 especies de peces; entre ellos las 13 especies de peces y un crustáceo decápodo de los que hasta ahora se desconocía su existencia.
Tras el trabajo de campo realizado, los científicos aseguran que la riqueza de especies en la confluencia de ambos ríos es muy superior a la que se ha registrado en otras expediciones de este tipo realizadas anteriormente en otros cursos fluviales del continente Suramericano.
Los hallazgos se realizaron al explorar los recursos y la biodiversidad en la confluencia de los ríos Orinoco y Ventuari, en el Estado de Amazonas en Venezuela, según una nota del canal de noticias CDN.
Patrocinada por distintas universidades -como la Universidad Central de Venezuela, la de Centro Occidental (UCLA) o la experimental de los Llanos- y por diferentes instituciones conservacionistas -como Conservación Internacional de Venezuela o la Fundación Cisneros, entre otras- , la expedición se planteó realizar una evaluación rápida y explorar y documentar la biodiversidad acuática, la diversidad económica y social de los diferentes pueblos indígenas autóctonos que habitan en esta zona, así como establecer las posibles amenazas y las oportunidades, tanto ecoambientales como económicas, que existen en esta región.
A lo largo de tres semanas, los investigadores consiguieron catalogar la existencia de 357 especies de plantas, 157 especies de aves y 245 especies de peces; entre ellos las 13 especies de peces y un crustáceo decápodo de los que hasta ahora se desconocía su existencia.
Tras el trabajo de campo realizado, los científicos aseguran que la riqueza de especies en la confluencia de ambos ríos es muy superior a la que se ha registrado en otras expediciones de este tipo realizadas anteriormente en otros cursos fluviales del continente Suramericano.
Una zona por explorar
Según el estudio, Venezuela destaca por la variedad y riqueza de la biodiversidad en sus ambientes fluviales.
Ana Liz Flores, Directora Técnica de Conservación Internacional Venezuela (CI), en declaraciones al canal de noticias afirmó que este primer estudio representa una pequeña muestra de la riqueza que albergan estos ríos y auguró que en próximas expediciones se conseguirán datar nuevas especies.
“Nosotros – afirmó la investigadora- sólo hicimos un estudio rápido de la zona, pero estoy segura que en este delta interno hay docenas de plantas y animales, que serán completamente nuevas para la Ciencia".
Esta zona de Venezuela conforma el espacio más característico del Estado Amazonas, ya que alberga a la mayoría de las especies endémicas del país y a las comunidades indígenas formadas por las etnias Piaroa, Yabarana, Ye kuanas y Baniva.
Por ello, desde 1978, la región fue calificada como paraje protegido y pasó a constituir el Parque Nacional de Yapacana. El parque, además de la variedad de especies que alberga, resulta de especial interés para las expediciones científicas porque su flora representa un espacio en la que se puede estudiar la evolución de la vegetación del Paleotrópico y del Neotrópico.
Según el estudio, Venezuela destaca por la variedad y riqueza de la biodiversidad en sus ambientes fluviales.
Ana Liz Flores, Directora Técnica de Conservación Internacional Venezuela (CI), en declaraciones al canal de noticias afirmó que este primer estudio representa una pequeña muestra de la riqueza que albergan estos ríos y auguró que en próximas expediciones se conseguirán datar nuevas especies.
“Nosotros – afirmó la investigadora- sólo hicimos un estudio rápido de la zona, pero estoy segura que en este delta interno hay docenas de plantas y animales, que serán completamente nuevas para la Ciencia".
Esta zona de Venezuela conforma el espacio más característico del Estado Amazonas, ya que alberga a la mayoría de las especies endémicas del país y a las comunidades indígenas formadas por las etnias Piaroa, Yabarana, Ye kuanas y Baniva.
Por ello, desde 1978, la región fue calificada como paraje protegido y pasó a constituir el Parque Nacional de Yapacana. El parque, además de la variedad de especies que alberga, resulta de especial interés para las expediciones científicas porque su flora representa un espacio en la que se puede estudiar la evolución de la vegetación del Paleotrópico y del Neotrópico.