Pongamos que usted se olvidó del Día de San Valentín, y ya es demasiado tarde para enviar a esa persona especial un ramo de rosas. Algún día, por lo menos, podrá enviarle su olor.
Un laboratorio de París, bajo la dirección de David Edwards, ex alumno de la Universidad Tecnológica de Michigan (MTU, EE.UU.), ha creado el oPhone , que permitirá enviar olores -oNotes-, a través de Bluetooth y los accesorios de teléfonos inteligentes, a Ophones a lo largo de toda la región, el país o el océano. Se puede enviar por correo electrónico, Twitter o texto.
Edwards explica que la idea comenzó en una clase con estudiantes de diseño, en Harvard, donde es profesor. "Invitamos a los jóvenes estudiantes a traer sus diseños soñados", señala en la nota de prensa de la MTU. "Tenemos un tema diferente cada año, y aquel año eran los mundos virtuales."
El profesor se llevó a dos de los estudiantes a París para trabajar en el proyecto. Normalmente, dice, hay un final claro a la vista, pero con su proyecto nadie tenía ni idea de quién iba a pagar por la investigación o incluso si habría un mercado. Ahora que su investigación está ganando popularidad, y ha aparecido en Wired y la prensa británica, Edwards cree que el mercado está al llegar.
Perfiles aromáticos
"Creamos perfiles aromáticos", cuenta Blake Armstrong , director de comunicaciones de negocios en Vapor Communications, una organización que opera desde Le Laboratorie (Le Lab) en París. "Y los ponemos en un oChip, que emite fielmente ese olor."
Edwards señala que los cuatro chips iniciales que vendrán con los primeros oPhones se podrán combinar en forma de miles de olores diferentes, producidos durante 20-30 segundos, lo que él llama "una evolución del olor."
El secreto está en una reproducción exacta del aroma encerrado en esos chips conectados a los dispositivos. Los olores son capturados primero en cera después de haber sido perfeccionados por "La Nariz", una experta en aromas de Le Lab, Marlène Staiger, que deconstruye los olores.
Por ejemplo, con el café, "el aroma más universalmente reconocidos", sustituye palabras como "cítrico" o " baya" por esencias reales que se crean ordenando moléculas y combinándolas en diferentes porcentajes.
De hecho, Le Lab está trabajando con Café Coutume, tienda de café de primera clase de París, utilizando Ophones para crear experiencias sensoriales completas.
"Imagínese que usted está online y quiere saber a qué olería una determinada marca de café", dice Edwards. "O bien, usted está en una larga cola esperando para pedir. Usted simplemente pulsa el oNote y vive la experiencia."
Un laboratorio de París, bajo la dirección de David Edwards, ex alumno de la Universidad Tecnológica de Michigan (MTU, EE.UU.), ha creado el oPhone , que permitirá enviar olores -oNotes-, a través de Bluetooth y los accesorios de teléfonos inteligentes, a Ophones a lo largo de toda la región, el país o el océano. Se puede enviar por correo electrónico, Twitter o texto.
Edwards explica que la idea comenzó en una clase con estudiantes de diseño, en Harvard, donde es profesor. "Invitamos a los jóvenes estudiantes a traer sus diseños soñados", señala en la nota de prensa de la MTU. "Tenemos un tema diferente cada año, y aquel año eran los mundos virtuales."
El profesor se llevó a dos de los estudiantes a París para trabajar en el proyecto. Normalmente, dice, hay un final claro a la vista, pero con su proyecto nadie tenía ni idea de quién iba a pagar por la investigación o incluso si habría un mercado. Ahora que su investigación está ganando popularidad, y ha aparecido en Wired y la prensa británica, Edwards cree que el mercado está al llegar.
Perfiles aromáticos
"Creamos perfiles aromáticos", cuenta Blake Armstrong , director de comunicaciones de negocios en Vapor Communications, una organización que opera desde Le Laboratorie (Le Lab) en París. "Y los ponemos en un oChip, que emite fielmente ese olor."
Edwards señala que los cuatro chips iniciales que vendrán con los primeros oPhones se podrán combinar en forma de miles de olores diferentes, producidos durante 20-30 segundos, lo que él llama "una evolución del olor."
El secreto está en una reproducción exacta del aroma encerrado en esos chips conectados a los dispositivos. Los olores son capturados primero en cera después de haber sido perfeccionados por "La Nariz", una experta en aromas de Le Lab, Marlène Staiger, que deconstruye los olores.
Por ejemplo, con el café, "el aroma más universalmente reconocidos", sustituye palabras como "cítrico" o " baya" por esencias reales que se crean ordenando moléculas y combinándolas en diferentes porcentajes.
De hecho, Le Lab está trabajando con Café Coutume, tienda de café de primera clase de París, utilizando Ophones para crear experiencias sensoriales completas.
"Imagínese que usted está online y quiere saber a qué olería una determinada marca de café", dice Edwards. "O bien, usted está en una larga cola esperando para pedir. Usted simplemente pulsa el oNote y vive la experiencia."
Sectores
El resultado para Coutume, y para todos los usuarios de oPhone, es una nube de perfume puro alrededor del dispositivo. Tal vez de 15 centímetros de diámetro, se libera y luego desaparece, conservando su aura personal y sutil.
Y hay otros sectores que podrían beneficiarse de esta tecnología, añade Edwards. "Las casas de perfumes, por supuesto, el sector culinario, el de los viajes, o también el de la salud." Los olores pueden ayudar a pacientes con Alzhéimer a recuperar la memoria a través de las sensaciones olfativas, señala.
Ya se han previsto mejoras para una versión Beta que saldrá a finales de año del teléfono emisor de aromas, para una audiencia limitada . Primero esperan a las reacciones de este reducido grupo, antes de un lanzamiento más amplio en 2015. El oPhone será con el tiempo más pequeño, "más íntimo", según Armstrong.
El resultado para Coutume, y para todos los usuarios de oPhone, es una nube de perfume puro alrededor del dispositivo. Tal vez de 15 centímetros de diámetro, se libera y luego desaparece, conservando su aura personal y sutil.
Y hay otros sectores que podrían beneficiarse de esta tecnología, añade Edwards. "Las casas de perfumes, por supuesto, el sector culinario, el de los viajes, o también el de la salud." Los olores pueden ayudar a pacientes con Alzhéimer a recuperar la memoria a través de las sensaciones olfativas, señala.
Ya se han previsto mejoras para una versión Beta que saldrá a finales de año del teléfono emisor de aromas, para una audiencia limitada . Primero esperan a las reacciones de este reducido grupo, antes de un lanzamiento más amplio en 2015. El oPhone será con el tiempo más pequeño, "más íntimo", según Armstrong.