Fuente: PhotoXpress.
La crisis económica ha producido muchos movimientos dentro y entre las empresas: algunas han tenido que despedir a parte de su personal, y otras han visto cómo algunos de sus empleados les decían adiós para darse nuevas oportunidades que consideraban mejores en otras compañías que les ofrecían condiciones distintas.
Estos movimientos de personal han hecho que muchos directivos lamenten la pérdida de piezas clave para sus negocios, y que la atracción y la retención de talento se hayan vuelto cada vez más complejas debido a la enorme competencia que ha habido en el mercado y a que muchos trabajadores ahora no están dispuestos a aceptar aquello con lo que no están satisfechos.
En este contexto, muchas empresas han empezado a evaluar sus estrategias para mejorarlas de acuerdo con sus objetivos. Una nueva encuesta de Right Management y Littler Mendelson, realizada en línea entre 430 altos ejecutivos de recursos humanos, reveló que el 41% de los contratantes ha incrementado su uso de trabajadores independientes durante los últimos dos años.
Pero este cambio debe producirse de manera cuidadosa, para que sus resultados sean positivos y para no tener tropiezos mayores en el proceso ya que, como manifiesta Neil Alexander, copresidente del grupo de práctica de fuerza de trabajo de Littler Mendelson, el aumento en el uso de contratistas independientes hace surgir preocupaciones con respecto a los cumplimientos legales.
En sus palabras: “Muchas firmas han tomado precauciones para ayudar a limitar la probabilidad de que un auditor del gobierno o la corte determine que dichos trabajadores han sido mal seleccionados. Tomarse el tiempo para diseñar un modelo de fuerza de trabajo con anticipación puede recompensar la productividad, disminuir los costes laborales globales, y ayudar a evitar a que se encuentre que esos trabajadores han sido mal seleccionados”.
Estos movimientos de personal han hecho que muchos directivos lamenten la pérdida de piezas clave para sus negocios, y que la atracción y la retención de talento se hayan vuelto cada vez más complejas debido a la enorme competencia que ha habido en el mercado y a que muchos trabajadores ahora no están dispuestos a aceptar aquello con lo que no están satisfechos.
En este contexto, muchas empresas han empezado a evaluar sus estrategias para mejorarlas de acuerdo con sus objetivos. Una nueva encuesta de Right Management y Littler Mendelson, realizada en línea entre 430 altos ejecutivos de recursos humanos, reveló que el 41% de los contratantes ha incrementado su uso de trabajadores independientes durante los últimos dos años.
Pero este cambio debe producirse de manera cuidadosa, para que sus resultados sean positivos y para no tener tropiezos mayores en el proceso ya que, como manifiesta Neil Alexander, copresidente del grupo de práctica de fuerza de trabajo de Littler Mendelson, el aumento en el uso de contratistas independientes hace surgir preocupaciones con respecto a los cumplimientos legales.
En sus palabras: “Muchas firmas han tomado precauciones para ayudar a limitar la probabilidad de que un auditor del gobierno o la corte determine que dichos trabajadores han sido mal seleccionados. Tomarse el tiempo para diseñar un modelo de fuerza de trabajo con anticipación puede recompensar la productividad, disminuir los costes laborales globales, y ayudar a evitar a que se encuentre que esos trabajadores han sido mal seleccionados”.
Nuevos modelos de fuerza de trabajo
Con una buena planificación e integrando la contratación de contratados independientes a las estrategias globales de la organización se pueden obtener esas ventajas de flexibilidad y de utilización del talento que se requiere sin incurrir en errores que pueden salir costosos.
De acuerdo con declaraciones de Michael Haid, vicepresidente de gestión de talento de Right Management, recogidos en un comunicado de dicha consultora: “Casi todas las compañías están reexaminando sus prácticas de gestión de talento con el fin de alinear su fuerza de trabajo con sus estrategias de negocio. Esto ha requerido un cambio de comportamiento que incluye la mayor flexibilidad que otorgan los contratistas independientes”.
Aunque, según la encuesta realizada, el 59% de los ejecutivos de recursos humanos ha asegurado que sus compañías no han aumentado el uso de contratistas independientes durante los últimos dos años, el hecho de que dos de cada cinco firmas sí lo hayan hecho muestra una tendencia que deja ver un cambio en la gestión del talento en las organizaciones.
Incluso, muchos de estos trabajadores terminan integrándose en las empresas como empleados de tiempo completo, aunque, como dice Haid, “muchos prefieren su independencia y las organizaciones deben acomodar los objetivos de estos trabajadores para permanecer competitivas en el mercado y atraer el mejor y más brillante talento disponible”.
Prácticas de trabajo flexible
Las prácticas de trabajo flexible son otras que están en la mira de los contratantes, y que se han convertido en una fuerte tendencia dentro de las organizaciones debido a que han probado ser muy eficaces y ofrecer muchas ventajas.
De acuerdo con la encuesta de Right Management, el 23% de los ejecutivos de recursos humanos afirmó que estas prácticas han aumentado, y mucho, dentro de sus compañías en el último año; el 54% dijo que han aumentado en alguna medida; y el 22% aseguró que no habían aumentado.
Estas prácticas incrementan la flexibilidad, permitiendo a las empresas aprovechar mejor el talento. Según Haid: “Las prácticas pueden consistir en horarios más flexibles, teletrabajo e incluso un mayor uso de trabajadores temporales o eventuales para proyectos específicos o tareas de corto plazo”.
Se trata de contar con el mejor talento para cada uno de los proyectos de una compañía sin tener que pensar en restricciones de tiempo o espacio. Y esto es cada vez más fácil con las tecnologías disponibles y la disposición de los directivos a integrarlas en sus negocios.
Con una buena planificación e integrando la contratación de contratados independientes a las estrategias globales de la organización se pueden obtener esas ventajas de flexibilidad y de utilización del talento que se requiere sin incurrir en errores que pueden salir costosos.
De acuerdo con declaraciones de Michael Haid, vicepresidente de gestión de talento de Right Management, recogidos en un comunicado de dicha consultora: “Casi todas las compañías están reexaminando sus prácticas de gestión de talento con el fin de alinear su fuerza de trabajo con sus estrategias de negocio. Esto ha requerido un cambio de comportamiento que incluye la mayor flexibilidad que otorgan los contratistas independientes”.
Aunque, según la encuesta realizada, el 59% de los ejecutivos de recursos humanos ha asegurado que sus compañías no han aumentado el uso de contratistas independientes durante los últimos dos años, el hecho de que dos de cada cinco firmas sí lo hayan hecho muestra una tendencia que deja ver un cambio en la gestión del talento en las organizaciones.
Incluso, muchos de estos trabajadores terminan integrándose en las empresas como empleados de tiempo completo, aunque, como dice Haid, “muchos prefieren su independencia y las organizaciones deben acomodar los objetivos de estos trabajadores para permanecer competitivas en el mercado y atraer el mejor y más brillante talento disponible”.
Prácticas de trabajo flexible
Las prácticas de trabajo flexible son otras que están en la mira de los contratantes, y que se han convertido en una fuerte tendencia dentro de las organizaciones debido a que han probado ser muy eficaces y ofrecer muchas ventajas.
De acuerdo con la encuesta de Right Management, el 23% de los ejecutivos de recursos humanos afirmó que estas prácticas han aumentado, y mucho, dentro de sus compañías en el último año; el 54% dijo que han aumentado en alguna medida; y el 22% aseguró que no habían aumentado.
Estas prácticas incrementan la flexibilidad, permitiendo a las empresas aprovechar mejor el talento. Según Haid: “Las prácticas pueden consistir en horarios más flexibles, teletrabajo e incluso un mayor uso de trabajadores temporales o eventuales para proyectos específicos o tareas de corto plazo”.
Se trata de contar con el mejor talento para cada uno de los proyectos de una compañía sin tener que pensar en restricciones de tiempo o espacio. Y esto es cada vez más fácil con las tecnologías disponibles y la disposición de los directivos a integrarlas en sus negocios.