Un gran número de células de la boca expuestas en laboratorio al humo de los cigarrillos electrónicos mueren en pocos días, según investigadores de la Universidad Laval, que publican su trabajo en la revista Journal of Cellular Physiology.
El equipo del profesor Mahmoud Rouabhia, de la Facultad de medicina dental de la citada universidad, llegó a esta conclusión después de exponer células del epitelio de las encías al humo de los cigarros electrónicos, tal como se señala en un comunicado.
El epitelio bucal es la primera línea de defensa del organismo contra el mundo exterior, recuerda el investigador. Su integridad nos protege contra las 500 especies de microorganismos que viven en nuestra boca.
Para simular lo que se produce en la boca de una persona después de una sesión de vapeo, los investigadores colocaron células epiteliales en una pequeña cámara que contenía un poco de líquido para hacer las veces de la saliva.
El humo del cigarrillo electrónico fue introducido entonces en esta cámara con la ayuda de una bomba a razón de dos “inhalaciones” de 5 segundos por minuto, durante 15 minutos cada día.
Las observaciones microscópicas constataron que el porcentaje de células muertas o agonizantes, que se sitúa en el 2% en los cultivos celulares no expuestos, pasó al 18%, al 40% y al 53% después, respectivamente, de 1, 2 y 3 días de exposición al humo del vapeo.
Contrariamente a lo que podría creerse, el humo del cigarrillo electrónico no es únicamente vapor de agua, explica el profesor Rouabhia. No contiene los mismos compuestos del cigarro ordinario, como el alquitrán, pero expone los tejidos de la boca y de las vías respiratorias a los compuestos producidos por el calentamiento de la glicerina vegetal, del propilenglicol, de los olores y de la nicotina que se encuentra en los cigarrillos electrónicos. La glicerina líquida o glicerina vegetal se usa para hacer el líquido de vaporizadores, al igual que el propilenglicol.
Los efectos acumulativos de estos daños celulares no están todavía documentados, pero son inquietantes, según los investigadores. Los daños causados a la barrera bucal que asegura nuestra defensa puede aumentar el riesgo de infección, de inflamación y de enfermedades periodontales. A más largo plazo, puede incluso provocar riesgo de cáncer. Es lo que estos investigadores van a investigar después de este descubrimiento.
El equipo del profesor Mahmoud Rouabhia, de la Facultad de medicina dental de la citada universidad, llegó a esta conclusión después de exponer células del epitelio de las encías al humo de los cigarros electrónicos, tal como se señala en un comunicado.
El epitelio bucal es la primera línea de defensa del organismo contra el mundo exterior, recuerda el investigador. Su integridad nos protege contra las 500 especies de microorganismos que viven en nuestra boca.
Para simular lo que se produce en la boca de una persona después de una sesión de vapeo, los investigadores colocaron células epiteliales en una pequeña cámara que contenía un poco de líquido para hacer las veces de la saliva.
El humo del cigarrillo electrónico fue introducido entonces en esta cámara con la ayuda de una bomba a razón de dos “inhalaciones” de 5 segundos por minuto, durante 15 minutos cada día.
Las observaciones microscópicas constataron que el porcentaje de células muertas o agonizantes, que se sitúa en el 2% en los cultivos celulares no expuestos, pasó al 18%, al 40% y al 53% después, respectivamente, de 1, 2 y 3 días de exposición al humo del vapeo.
Contrariamente a lo que podría creerse, el humo del cigarrillo electrónico no es únicamente vapor de agua, explica el profesor Rouabhia. No contiene los mismos compuestos del cigarro ordinario, como el alquitrán, pero expone los tejidos de la boca y de las vías respiratorias a los compuestos producidos por el calentamiento de la glicerina vegetal, del propilenglicol, de los olores y de la nicotina que se encuentra en los cigarrillos electrónicos. La glicerina líquida o glicerina vegetal se usa para hacer el líquido de vaporizadores, al igual que el propilenglicol.
Los efectos acumulativos de estos daños celulares no están todavía documentados, pero son inquietantes, según los investigadores. Los daños causados a la barrera bucal que asegura nuestra defensa puede aumentar el riesgo de infección, de inflamación y de enfermedades periodontales. A más largo plazo, puede incluso provocar riesgo de cáncer. Es lo que estos investigadores van a investigar después de este descubrimiento.
Polémica
Este descubrimiento aumentará la polémica sobre los cigarrillos electrónicos. El cigarrillo/cigarro electrónico es un sistema electrónico inhalador que utiliza una resistencia y batería para calentar y vaporizar una solución líquida. La solución líquida puede contener aromas y nicotina líquida.
La polémica principal que rodea a esta tecnología se refiere a si puede ser considerada como una alternativa real al tabaco con menor impacto sobre la salud.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos alertó en 2009 de la presencia de agentes cancerígenos y otras sustancias tóxicas (como dietilenglicol) en el humo de los cigarrillos electrónicos, a partir de un estudio preliminar de varias marcas.
Lo que aporta de nuevo el estudio de la Universidad Laval es que el humo de los cigarrillos electrónicos altera el tejido epitelial de la boca, incrementando la muerte de las células que componen este tejido y aumentando el riesgo de contraer enfermedades que en el peor de los casos pueden llegar a convertirse en cáncer, aunque los efectos acumulativos de estos daños van a ser estudiados ahora.
Este descubrimiento aumentará la polémica sobre los cigarrillos electrónicos. El cigarrillo/cigarro electrónico es un sistema electrónico inhalador que utiliza una resistencia y batería para calentar y vaporizar una solución líquida. La solución líquida puede contener aromas y nicotina líquida.
La polémica principal que rodea a esta tecnología se refiere a si puede ser considerada como una alternativa real al tabaco con menor impacto sobre la salud.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos alertó en 2009 de la presencia de agentes cancerígenos y otras sustancias tóxicas (como dietilenglicol) en el humo de los cigarrillos electrónicos, a partir de un estudio preliminar de varias marcas.
Lo que aporta de nuevo el estudio de la Universidad Laval es que el humo de los cigarrillos electrónicos altera el tejido epitelial de la boca, incrementando la muerte de las células que componen este tejido y aumentando el riesgo de contraer enfermedades que en el peor de los casos pueden llegar a convertirse en cáncer, aunque los efectos acumulativos de estos daños van a ser estudiados ahora.
Referencia
E-Cigarette Vapor Induces an Apoptotic Response in Human Gingival Epithelial Cells Through the Caspase-3 Pathway. Journal of Cellular Physiology. Accepted manuscript online: 3 November 2016. DOI: 10.1002/jcp.25677View/save citation
E-Cigarette Vapor Induces an Apoptotic Response in Human Gingival Epithelial Cells Through the Caspase-3 Pathway. Journal of Cellular Physiology. Accepted manuscript online: 3 November 2016. DOI: 10.1002/jcp.25677View/save citation