El robot Hiro. Fuente: Tecnalia.
Hace ya más de 60 años que los primeros robots llegaron al mundo de la industria. Desde entonces, por razones de seguridad, han desempeñado su trabajo aislados en jaulas, impidiendo la colaboración entre trabajadores y máquinas.
Ahora, el centro de investigación Tecnalia Research & Innovation inicia una nueva era incorporando a la industria europea el primer robot que puede trabajar codo a codo con las personas, con un doble objetivo: mejorar las capacidades de los trabajadores en condiciones de seguridad; y aumentar la competitividad de las fábricas en los mercados internacionales. Para ello cuenta con el robot Hiro, el secreto mejor guardado por Japón en los últimos años en materia de robótica industrial.
El robot Hiro realiza así su primer viaje fuera de Japón. Durante años, este país, líder en robótica industrial, ha desarrollado esta tecnología considerándola “patrimonio nacional protegido” que no compartía fuera de sus fronteras, pero ahora ha confiado en Tecnalia para que Hiro pueda adaptarse e incorporarse a empresas de todo el mundo, empezando por Europa.
Tecnalia apuesta por combinar la inteligencia del ser humano con las propiedades de los robots industriales, ya que el 99% de las tareas son más eficientes si son mixtas.
La novedad de Hiro es que es un robot social, es decir, está preparado para compartir espacio de trabajo con las personas en condiciones de absoluta seguridad y en el caso de entrar en contacto físico con algún humano, está programado para paralizarse de forma automática. Los robots se ocuparán de realizar aquellas tareas que puedan suponer un riesgo para la salud de los trabajadores, para garantizar al máximo la seguridad de la plantilla.
La estimación es que en un plazo de seis años, a nivel estatal, el 60% del tejido industrial que realiza labores de ensamblaje final de producto contará en sus cadenas productivas con este tipo de robot. Los sectores que se beneficiarán de esta nueva tecnología serán automóvil, auxiliar, plástica, alimentación, madera, bebidas, agricultura, aeronáutica, ferroviario y energético, entre otros.
Ahora, el centro de investigación Tecnalia Research & Innovation inicia una nueva era incorporando a la industria europea el primer robot que puede trabajar codo a codo con las personas, con un doble objetivo: mejorar las capacidades de los trabajadores en condiciones de seguridad; y aumentar la competitividad de las fábricas en los mercados internacionales. Para ello cuenta con el robot Hiro, el secreto mejor guardado por Japón en los últimos años en materia de robótica industrial.
El robot Hiro realiza así su primer viaje fuera de Japón. Durante años, este país, líder en robótica industrial, ha desarrollado esta tecnología considerándola “patrimonio nacional protegido” que no compartía fuera de sus fronteras, pero ahora ha confiado en Tecnalia para que Hiro pueda adaptarse e incorporarse a empresas de todo el mundo, empezando por Europa.
Tecnalia apuesta por combinar la inteligencia del ser humano con las propiedades de los robots industriales, ya que el 99% de las tareas son más eficientes si son mixtas.
La novedad de Hiro es que es un robot social, es decir, está preparado para compartir espacio de trabajo con las personas en condiciones de absoluta seguridad y en el caso de entrar en contacto físico con algún humano, está programado para paralizarse de forma automática. Los robots se ocuparán de realizar aquellas tareas que puedan suponer un riesgo para la salud de los trabajadores, para garantizar al máximo la seguridad de la plantilla.
La estimación es que en un plazo de seis años, a nivel estatal, el 60% del tejido industrial que realiza labores de ensamblaje final de producto contará en sus cadenas productivas con este tipo de robot. Los sectores que se beneficiarán de esta nueva tecnología serán automóvil, auxiliar, plástica, alimentación, madera, bebidas, agricultura, aeronáutica, ferroviario y energético, entre otros.
Aspecto humanoide
El robot Hiro, desarrollado por Industrias Kawada, tiene aspecto humanoide en la parte superior y cuerpo de robot en la parte inferior.
Según la filosofía japonesa, dotar a los robots de aspecto humano favorece su inserción en el entorno laboral y su interactuación con los trabajadores. Por ello, en la parte superior cuenta con cabeza, tronco y dos extremidades que acaban en forma de mano.
Además, dispone de un total de cuatro ojos, dos en la cara y uno en cada mano, lo que le facilita realizar operaciones incómodas o peligrosas para los seres humanos.
En la parte inferior, en cambio, dispone de un mecanismo con ruedas para desplazarse, una solución más operativa al tratarse de un robot dedicado a la industria.
Tecnalia está desarrollando la inteligencia del robot, para adaptarlo a la industria, para que pueda realizar diferentes acciones y en diferentes escenarios en función de las necesidades de cada fábrica y cada cliente.
Así, contó con la experiencia y la visión industrial del fabricante aeronáutico AIRBUS, uno de sus clientes estratégicos. Ambos se desplazaron a Japón donde pudieron analizar conjuntamente la capacidad de respuesta de este robot a necesidades reales de la industria.
El robot Hiro, desarrollado por Industrias Kawada, tiene aspecto humanoide en la parte superior y cuerpo de robot en la parte inferior.
Según la filosofía japonesa, dotar a los robots de aspecto humano favorece su inserción en el entorno laboral y su interactuación con los trabajadores. Por ello, en la parte superior cuenta con cabeza, tronco y dos extremidades que acaban en forma de mano.
Además, dispone de un total de cuatro ojos, dos en la cara y uno en cada mano, lo que le facilita realizar operaciones incómodas o peligrosas para los seres humanos.
En la parte inferior, en cambio, dispone de un mecanismo con ruedas para desplazarse, una solución más operativa al tratarse de un robot dedicado a la industria.
Tecnalia está desarrollando la inteligencia del robot, para adaptarlo a la industria, para que pueda realizar diferentes acciones y en diferentes escenarios en función de las necesidades de cada fábrica y cada cliente.
Así, contó con la experiencia y la visión industrial del fabricante aeronáutico AIRBUS, uno de sus clientes estratégicos. Ambos se desplazaron a Japón donde pudieron analizar conjuntamente la capacidad de respuesta de este robot a necesidades reales de la industria.