En 1981, Alan Harvey Guth, físico y cosmólogo estadounidense investigador del MIT, elaboró la primera formulación de la teoría del universo inflacionario, que explica la expansión ultrarrápida del universo en los instantes iniciales tras el Big Bang y resuelve llamado problema del horizonte (la dificultad para los modelos cosmológicos de dar una explicación a la gran homogeneidad que el universo muestra a gran escala en la distribución de materia y radiación).
Ayer, Alan Guth estuvo en ICHEP2014, la Conferencia Internacional de Física de Altas Energías que estos días se celebra por primera vez en España (en Valencia), en su 37ª edición.
En su intervención, habló de dos temas principalmente. Por un lado, de los resultados del radiotelescopio BICEP2 en el Polo Sur. El pasado mes de marzo, este sistema parecía haber detectado la primera prueba directa de la inflación cósmica del Big Bang, la expansión inicial del universo, corroborando la teoría de Guth.
Sin embargo, más recientemente, se han revisado aquellos datos, y han surgido discrepancias sobre su interpretación. Algunos físicos ya ponen en duda su validez. Si estas dudas son verdad, “por desgracia, existen indicios de que esas primeras interpretaciones eran demasiado positivas”, ha declarado al respecto Guth a la plataforma Sinc.
A pesar de todo, el cosmólogo se mostró positivo: “Si se confirman estos resultados (del BICEP2), implicaría que la inflación es cierta; pero, si se descubre que eran erróneos, la teoría sigue siendo válida; lo malo es que habría que esperar a nuevos experimentos”.
La confirmación o lo contrario podría llegar en unos días: los físicos esperan ya datos del satélite Planck que podrían resultar claves al respecto. Guth reveló ayer que, de hecho, en pocos días, el equipo de Planck presentará un artículo en el que explicará los efectos del polvo cósmico sobre las medidas de BICEP2. Hoy mismo, a las 18:30, representantes de ambos proyectos aclararán dudas al público de ICHEP2014, de nuevo según Sinc.
Ayer, Alan Guth estuvo en ICHEP2014, la Conferencia Internacional de Física de Altas Energías que estos días se celebra por primera vez en España (en Valencia), en su 37ª edición.
En su intervención, habló de dos temas principalmente. Por un lado, de los resultados del radiotelescopio BICEP2 en el Polo Sur. El pasado mes de marzo, este sistema parecía haber detectado la primera prueba directa de la inflación cósmica del Big Bang, la expansión inicial del universo, corroborando la teoría de Guth.
Sin embargo, más recientemente, se han revisado aquellos datos, y han surgido discrepancias sobre su interpretación. Algunos físicos ya ponen en duda su validez. Si estas dudas son verdad, “por desgracia, existen indicios de que esas primeras interpretaciones eran demasiado positivas”, ha declarado al respecto Guth a la plataforma Sinc.
A pesar de todo, el cosmólogo se mostró positivo: “Si se confirman estos resultados (del BICEP2), implicaría que la inflación es cierta; pero, si se descubre que eran erróneos, la teoría sigue siendo válida; lo malo es que habría que esperar a nuevos experimentos”.
La confirmación o lo contrario podría llegar en unos días: los físicos esperan ya datos del satélite Planck que podrían resultar claves al respecto. Guth reveló ayer que, de hecho, en pocos días, el equipo de Planck presentará un artículo en el que explicará los efectos del polvo cósmico sobre las medidas de BICEP2. Hoy mismo, a las 18:30, representantes de ambos proyectos aclararán dudas al público de ICHEP2014, de nuevo según Sinc.
Esperando al ‘familiar’ de Higgs
Más allá de la importancia que pueda tener para los físicos y sus teorías, la confirmación de la teoría de la inflación resultaría clave porque “los primeros momentos de la inflación pueden dar lugar a extensiones del modelo estándar de las partículas elementales que respondan a cuestiones que este no resuelve”, explicaba también ayer Rolf-Dieter Heuer, el alemán que dirige el CERN, en la rueda de prensa compartida con Guth en ICHEP2014.
En esas “extensiones” se incluiría al inflatón, una partícula hipotética que sería la responsable de la inflación sufrida en el universo durante su etapa más temprana.
Según la teoría inflacionaria, el campo del inflatón habría establecido el mecanismo para conducir el período de rápida expansión existente desde 10-35 a 10-34 segundos después de la explosión inicial que formó el universo.
Juan Fuster, profesor del CSIC y copresidente de ICHEP2014, señaló en esa misma rueda de prensa la “familiaridad” que podría unir al bosón de Higgs y al inflatón. En declaraciones recogidas por EFE afirmó que “hay estudios que indican que el inflatón podría ser el bosón de Higgs”. Y que “puede no haber solo un Higgs”.
Para determinar este punto y conocer a fondo las –tal vez- múltiples personalidades del bosón más famoso habrá aún que esperar un tiempo. Los físicos señalan que este punto se analizará en la labor que desarrollará en adelante el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) de Ginebra, el acelerador de partículas ubicado en el CERN, tras diversas fases de revisión sobre su funcionamiento.
Más allá de la importancia que pueda tener para los físicos y sus teorías, la confirmación de la teoría de la inflación resultaría clave porque “los primeros momentos de la inflación pueden dar lugar a extensiones del modelo estándar de las partículas elementales que respondan a cuestiones que este no resuelve”, explicaba también ayer Rolf-Dieter Heuer, el alemán que dirige el CERN, en la rueda de prensa compartida con Guth en ICHEP2014.
En esas “extensiones” se incluiría al inflatón, una partícula hipotética que sería la responsable de la inflación sufrida en el universo durante su etapa más temprana.
Según la teoría inflacionaria, el campo del inflatón habría establecido el mecanismo para conducir el período de rápida expansión existente desde 10-35 a 10-34 segundos después de la explosión inicial que formó el universo.
Juan Fuster, profesor del CSIC y copresidente de ICHEP2014, señaló en esa misma rueda de prensa la “familiaridad” que podría unir al bosón de Higgs y al inflatón. En declaraciones recogidas por EFE afirmó que “hay estudios que indican que el inflatón podría ser el bosón de Higgs”. Y que “puede no haber solo un Higgs”.
Para determinar este punto y conocer a fondo las –tal vez- múltiples personalidades del bosón más famoso habrá aún que esperar un tiempo. Los físicos señalan que este punto se analizará en la labor que desarrollará en adelante el Gran Colisionador de Hadrones (LHC) de Ginebra, el acelerador de partículas ubicado en el CERN, tras diversas fases de revisión sobre su funcionamiento.
Segundo tema: el multiverso
Alan Guth habló en su intervención de un segundo tema importante: la existencia de un multiverso. Señaló: “Creo que un mundo de infinitos universos, con infinitos ‘Big Bangs’, es la mejor explicación que tenemos para la realidad que observamos”, publica Sinc.
Diversos físicos (como Martin Rees, Andrei Linde o el Nobel Steven Weinberg) han defendido esta hipótesis, según la cual nuestro universo podría ser únicamente un islote aislado en el seno de un inmenso “multiverso”.
“Muchos modelos actuales, ya sean admitidos (como la relatividad general) o especulativos (como la teoría de cuerdas), conducen naturalmente a multiversos. Esos universos múltiples aparecen de hecho como consecuencia de teorías elaboradas para responder a cuestiones específicas de la física de partículas o de la gravitación”, escribía en 2007 en Tendencias21 Aurélien Barrau, físico del Laboratorio de Física Subatómica y de Cosmología de Grenoble.
En 2013, los científicos Laura Mersini-Houghton y Richard Holman afirmaron haber descubierto, a través del telescopio Planck, una posible evidencia de la existencia de otros universos más allá del nuestro. Pero esta afirmación ha creado controversia en la comunidad científica.
El término “multiverso” lleva de cualquier modo rondando la mente humana desde 1895, año en que fue acuñado por el psicólogo William James, que creía que el universo no es un sistema cerrado y acabado, sino inacabado y en tensión y enfrentamiento. Por ello es un multiverso en formación.
El ICHEP2014, por su parte, continuará hoy y mañana explorando la conexión entre la cosmología y la física de partículas. El evento ha congregado, desde el pasado dos de julio, a un millar de físicos en Valencia.
Alan Guth habló en su intervención de un segundo tema importante: la existencia de un multiverso. Señaló: “Creo que un mundo de infinitos universos, con infinitos ‘Big Bangs’, es la mejor explicación que tenemos para la realidad que observamos”, publica Sinc.
Diversos físicos (como Martin Rees, Andrei Linde o el Nobel Steven Weinberg) han defendido esta hipótesis, según la cual nuestro universo podría ser únicamente un islote aislado en el seno de un inmenso “multiverso”.
“Muchos modelos actuales, ya sean admitidos (como la relatividad general) o especulativos (como la teoría de cuerdas), conducen naturalmente a multiversos. Esos universos múltiples aparecen de hecho como consecuencia de teorías elaboradas para responder a cuestiones específicas de la física de partículas o de la gravitación”, escribía en 2007 en Tendencias21 Aurélien Barrau, físico del Laboratorio de Física Subatómica y de Cosmología de Grenoble.
En 2013, los científicos Laura Mersini-Houghton y Richard Holman afirmaron haber descubierto, a través del telescopio Planck, una posible evidencia de la existencia de otros universos más allá del nuestro. Pero esta afirmación ha creado controversia en la comunidad científica.
El término “multiverso” lleva de cualquier modo rondando la mente humana desde 1895, año en que fue acuñado por el psicólogo William James, que creía que el universo no es un sistema cerrado y acabado, sino inacabado y en tensión y enfrentamiento. Por ello es un multiverso en formación.
El ICHEP2014, por su parte, continuará hoy y mañana explorando la conexión entre la cosmología y la física de partículas. El evento ha congregado, desde el pasado dos de julio, a un millar de físicos en Valencia.