Investigadores italianos y alemanes han anunciado la creación de un nuevo medicamento contra la tuberculosis que podría acabar con las cepas de esta enfermedad más resistentes a los tratamientos tradicionales.

Un 6% de los casos de tuberculosis diagnosticados en el mundo cada año pertenece a este tipo de cepas que han desarrollado resistencia a los antibióticos comúnmente utilizados como tratamiento. La tuberculosis está extendida sobre todo en Japón, los países de la antigua Unión Soviética, Corea y África del sur.

Los resultados de las pruebas llevadas a cabo sugieren que el linezolido, un antibiótico sintético, ayudaría a eliminar la enfermedad en los casos más resistentes. Un total de 89 pacientes fueron tratados con él de tuberculosis multiresistente o ultrarresistente,

Los resultados: en tres de cada cuatro casos desaparecieron los bacilos de los esputos y se pudieron esterilizar los cultivos. Ocho de cada 10 pacientes que culminaron todo el tratamiento fueron considerados como recuperados. Los investigadores han reconocido que este tratamiento conlleva una tasa elevada de efectos secundarios, pero señalan que todos son reversibles.

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