Un estudio realizado en la Escuela de Ciencias de la Salud de Jönköping, en Suecia, ha demostrado que el significado y el equilibrio en la vida cotidiana son cruciales para la salud de las mujeres. En cambio, el elemento previsor principal de la salud de los hombres es la capacidad de éstos para gestionar las exigencias de su vida laboral.

En la investigación participaron un total de 2.683 hombres y mujeres pertenecientes al grupo de población activa de Suecia, a los que se les pidió que contestaran a dos encuestas separadas en el tiempo por un intervalo de dos años.

Los resultados obtenidos demostraron que las mujeres incapaces de cubrir las exigencias tanto de su vida privada como de su trabajo se sienten muy estresadas, lo que puede llevarlas a pedir la baja laboral. En cambio, la salud de los hombres se encuentra principalmente influenciada sólo por su situación laboral.

Según estos resultados, los investigadores señalan que deberían considerarse diversas estrategias que atiendan necesidades diferentes, con el fin de impulsar la salud tanto de hombres como de mujeres.

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