Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Münster, en Alemania, proporciona nuevas evidencias sobre la conveniencia de reducir el consumo de calorías en la dieta humana: un grupo de personas mayores que redujeron, durante tres meses, las calorías que tomaban obtuvieron mejores resultados al cabo de este tiempo en tests de memoria.

Los resultados de esta investigación suponen la primera evidencia de que la restricción de calorías podría prevenir el declive mental vinculado a la edad en humanos, explican los científicos. En estudios previos realizados con animales se había podido comprobar que tanto la reducción del consumo de calorías como de grasas podía tener efectos beneficiosos para el cerebro, pero estas mismas pruebas no se habían realizado hasta ahora con personas.

Un total de 50 adultos sanos, con una media de edad de 60 años, fueron divididos en tres grupos: al primer grupo se le aplicó una dieta sin calorías, al segundo grupo se le incrementó la proporción de grasas no saturadas en su dieta; y el tercer grupo siguió comiendo como siempre.

A los tres meses, los científicos constataron un incremento significativo en las puntuaciones de memoria verbal de los individuos del primer grupo, mientras que no se detectó ningún cambio notable en la memoria de las personas de los otros dos grupos.

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