Una nueva investigación realizada por científicos de la Universidad de Concordia, en Canadá, ha revelado que una dosis nasal de oxitocina puede mejorar la percepción de uno mismo en situaciones sociales.

La oxitocina es una hormona que el organismo libera de manera natural en situaciones como el nacimiento de un hijo, en el caso de las madres, o el establecimiento de lazos sociales.

El presente estudio ha demostrado que esta hormona, aplicada de forma artificial, puede además cambiar la forma en que las personas se ven a sí mismas en situaciones sociales. En concreto, individuos sometidos al efecto de la oxitocina pasaron a percibirse a sí mismos como más extrovertidos, más abiertos a nuevas ideas, y más confiados.

En la investigación participaron 100 hombres y mujeres, de entre 18 y 35 años. Algunos de estos participantes inhalaron oxitocina con un spray nasal, mientras que otros inhalaron un placebo. Noventa minutos después, todos ellos rellenaron una serie de cuestionarios sobre cómo se sentían.

Los voluntarios que se habían autosuministrado la oxitocina intranasal informaron de mayores tasas de extraversión y apertura a las experiencias que los voluntarios que recibieron el placebo, explican los autores del estudio. Concretamente, la administración de oxitocina amplió ciertas características de la personalidad de los participantes, como la calidez, la confianza, el altruismo y la franqueza.

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