En el estudio más extenso realizado hasta ahora sobre el tema, investigadores de diversas universidades del mundo analizaron registros médicos de los últimos 24 años, y referentes a más de un millón de hombres.

De esta forma, descubrieron que existe una tendencia significativamente mayor de intento de suicidio en los hombres con un cociente intelectual más bajo, y en comparación con los hombres con un cociente intelectual más alto.

Los científicos piensan que esta relación podría deberse a varias razones. Por un lado, los hombres con menor cociente intelectual tienden a tener un estatus socioeconómico más bajo, menos ingresos, y ciertas desventajas sociales.

Por otro lado, el cociente intelectual bajo se ha relacionado con un incremento de comportamientos nocivos, como el alcoholismo. Por último, un cociente intelectual bajo limita la capacidad individual para enfrentar las tensiones de la vida o los eventos traumáticos, así como para identificar soluciones prácticas para los problemas que se planteen.

Todas estas situaciones pueden propiciar la aparición de comportamientos y pensamientos suicidas, afirman los investigadores. El suicidio es un grave problema social, sobre todo entre los jóvenes adultos, pero aún se conoce poco sobre las causas que conducen a una acción tan drástica.

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