Un bebé tiene un mayor riesgo de asma si su padre fumaba antes de la concepción, según un estudio presentado en el Congreso Internacional de la Sociedad Respiratoria Europea (ERS), ayer en Múnich.

Se trata del primer estudio en humanos para analizar la relación entre el hábito de fumar de un padre antes de la concepción y el asma de un niño. Los resultados se suman a la creciente evidencia de estudios en animales que sugieren que las exposiciones del padre antes de la paternidad pueden dañar a su hijo.

El estudio analizó los hábitos de fumar de más de 13.000 hombres y mujeres a través de un cuestionario. Los investigadores analizaron el vínculo de las madres y los padres, y observaron el número de años que una persona había fumado antes de la concepción, la incidencia de asma en los niños y si el padre había dejado el tabaco antes de que el bebé fuera concebido.

Los resultados mostraron que el asma no alérgica (sin fiebre del heno) era significativamente más frecuente en los niños con un padre que había fumado antes de la concepción. El riesgo de asma aumentaba si el padre había fumado antes de tener 15 años, y crecía cuanto más tiempo hubiera estado fumando.

Los investigadores, en cambio, no observaron ninguna relación entre el tabaquismo de la madre antes de la concepción y el asma de un niño.


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