El Grupo Irizar, especializado en fabricar autobuses y autocares, ha desarrollado el primer autobús eléctrico urbano de Europa, el i2e. Para ello, ha desarrollado íntegramente un sistema propulsor totalmente eléctrico.

El i2e es un autobús estándar, de doce metros de longitud y capacidad para 76 pasajeros. Está impulsado por un motor de 230 kilovatios (kw) alimentado por baterías de sodio-níquel que, junto con los ultracondensadores, le proporcionan una autonomía de entre 200 y 250 kilómetros. Las baterías se cargan durante la noche y, además, pueden almacenar la energía recuperada de las frenadas durante la circulación.

En el proyecto ha colaborado la corporación tecnológica vasca Tecnalia, a través del grupo de trabajo de eDrive Control. El resultado final es un autobús respetuoso con el medio ambiente, que ahorra 33.000 litros de combustible al año y que elimina 88 toneladas/año de CO2 al ambiente.

Todos los elementos de seguridad se han reforzado, y sin embargo, el peso del autobús ha disminuido al haber utilizado aleaciones de aluminio. Es el primer autobús que cumple la normativa de seguridad antivuelco R66.

La gestión energética, explican los investigadores, ha supuesto un reto durante el desarrollo del vehículo, ya que las condiciones de funcionamiento y las potencias necesarias son muy diferentes a las de un vehículo ligero.

En agosto, los Transportes Metropolitanos de Barcelona incorporaron a su flota un i2e. Se trata del primero de los dos vehículos eléctricos que se sumarán al servicio en período de pruebas de larga duración en el marco del proyecto europeo ZeUS de promoción del transporte eléctrico urbano, financiado por la UE.


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