Un dispositivo capaz de leer, procesar y convertir en información relevante señales cerebrales, basándose en el registro electroencefalográfico (EEG), tiene como principal novedad su fácil portabilidad. Así, para mejor demostrar sus potenciales aplicaciones en situaciones cotidianas, ha sido implementado en una gorra de béisbol, el cerebro de cuyo portador queda conectado inalámbricamente al receptor de datos sin más incomodidades que media docena de electrodos añadidos a la misma.
Cinco de estos electrodos se adhieren a la frente del usuario, y el sexto queda situado detrás de su oreja izquierda. A diferencia de lo que sucede con las técnicas habituales de EEG, estos electródos no necesitan ningún gel que intermedie su contacto con el cuero cabelludo, según informa physorg.com.
Lectura bioeléctrica
Las aplicaciones de este sistema serán muchas, y de momento ha sido utilizado por Li-Wei Ko (de la National Chiao-Tung Unviersity, Taiwan) y otros investigadores de la Universidad de California (San Diego) para analizar el EEG de diversos individuos durante el desarrollo de un estudio en el que han medido el grado de somnolencia y la capacidad de respuesta de los mismos ante diversas pruebas de conducción.
Las pruebas de conducción se realizaron en una plataforma de realidad virtual que, basándose principalmente en técnicas hidráulicas y pantallas tridimensionales, imprimía en los sujetos la sensación extremadamente realista de que el automóvil que estaban “conduciendo” se desviaba por momentos del centro de la calzada, acercándose peligrosamente al borde de la misma.
Por un lado, se medían los tiempos de respuesta de los sujetos ante esas contingencias en la plataforma de realidad virtual, calculándose a partir de dichos tiempos el grado de somnolencia que sufrían; y, por otro, se analizaba la información enviada por las gorras de béisbol que llevaban puestas, es decir, se interpretaba dicho grado de somnolencia a partir de la actividad cerebral de los sujetos, reflejada en sus EEG. El grado de correlación de unos y otros datos ascendió al 75%.
Uso cotidiano
El estudio forma parte de una más amplia investigación, Prótesis Neurológicas no-invasivas Usando EEG Portátil e Inalámbrica, en cuya descripción se enmarca un dispositivo como el que nos ocupa, y donde se da cuenta de sus potenciales aplicaciones tanto para pacientes discapacitados de forma irreversible (con miembros u órganos internos inutilizados e inoperables), como para el mucho más numeroso grupo de población que sufre discapacidades episódicas durante su vida cotidiana.
Agudeza mental reducida, falta de atención, disminución de capacidad de los órganos decisorios, son algunos de los trastornos (a menudo de catastróficas consecuencias) que sufren estas personas, para las que sería de extraordinaria utilidad una monitarización continua de su actividad cerebral.
El dispositivo que Li-Wei Ko ha implementado en la gorra de béisbol puede proporcionarla, y además lo hace en alta resolución y en tiempo real, mediante elementos como: sensores electroencefalográficos microelectromecánicos, captación de señales de baja energía, amplificación y digitalización, telemetría inalámbrica, Bluetooth para transmisión en distancias cortas y radio-frecuencia para las largas, cancelación del artefacto “en línea” y un sofisticado y eficaz procesamiento de las señales.
Tecología avanzada
El avance en las tecnologías implicadas permite a día de hoy tanto una considerable autonomía energética del dispositivo (actualmente puede permanecer dos días en funcionamiento antes de requerir la carga de la batería) como una considerable reducción en sus costes de producción. A todo ello hay que añadir la no desdeñable ventaja (no olvidemos que se trataría de un uso cotidiano del dispositivo), de no requerir la utilización de los mencionados “geles”.
Por otro lado, si bien la potencial utilidad del ingenio para su aplicación y uso en el ámbito médico-sanitario ya tiene de por sí una más que notable importancia, Li-Wei Ko ha asegurado que las tendrá también en otros entornos. Y ha anunciado de paso su intención de miniaturizarlo.
Cinco de estos electrodos se adhieren a la frente del usuario, y el sexto queda situado detrás de su oreja izquierda. A diferencia de lo que sucede con las técnicas habituales de EEG, estos electródos no necesitan ningún gel que intermedie su contacto con el cuero cabelludo, según informa physorg.com.
Lectura bioeléctrica
Las aplicaciones de este sistema serán muchas, y de momento ha sido utilizado por Li-Wei Ko (de la National Chiao-Tung Unviersity, Taiwan) y otros investigadores de la Universidad de California (San Diego) para analizar el EEG de diversos individuos durante el desarrollo de un estudio en el que han medido el grado de somnolencia y la capacidad de respuesta de los mismos ante diversas pruebas de conducción.
Las pruebas de conducción se realizaron en una plataforma de realidad virtual que, basándose principalmente en técnicas hidráulicas y pantallas tridimensionales, imprimía en los sujetos la sensación extremadamente realista de que el automóvil que estaban “conduciendo” se desviaba por momentos del centro de la calzada, acercándose peligrosamente al borde de la misma.
Por un lado, se medían los tiempos de respuesta de los sujetos ante esas contingencias en la plataforma de realidad virtual, calculándose a partir de dichos tiempos el grado de somnolencia que sufrían; y, por otro, se analizaba la información enviada por las gorras de béisbol que llevaban puestas, es decir, se interpretaba dicho grado de somnolencia a partir de la actividad cerebral de los sujetos, reflejada en sus EEG. El grado de correlación de unos y otros datos ascendió al 75%.
Uso cotidiano
El estudio forma parte de una más amplia investigación, Prótesis Neurológicas no-invasivas Usando EEG Portátil e Inalámbrica, en cuya descripción se enmarca un dispositivo como el que nos ocupa, y donde se da cuenta de sus potenciales aplicaciones tanto para pacientes discapacitados de forma irreversible (con miembros u órganos internos inutilizados e inoperables), como para el mucho más numeroso grupo de población que sufre discapacidades episódicas durante su vida cotidiana.
Agudeza mental reducida, falta de atención, disminución de capacidad de los órganos decisorios, son algunos de los trastornos (a menudo de catastróficas consecuencias) que sufren estas personas, para las que sería de extraordinaria utilidad una monitarización continua de su actividad cerebral.
El dispositivo que Li-Wei Ko ha implementado en la gorra de béisbol puede proporcionarla, y además lo hace en alta resolución y en tiempo real, mediante elementos como: sensores electroencefalográficos microelectromecánicos, captación de señales de baja energía, amplificación y digitalización, telemetría inalámbrica, Bluetooth para transmisión en distancias cortas y radio-frecuencia para las largas, cancelación del artefacto “en línea” y un sofisticado y eficaz procesamiento de las señales.
Tecología avanzada
El avance en las tecnologías implicadas permite a día de hoy tanto una considerable autonomía energética del dispositivo (actualmente puede permanecer dos días en funcionamiento antes de requerir la carga de la batería) como una considerable reducción en sus costes de producción. A todo ello hay que añadir la no desdeñable ventaja (no olvidemos que se trataría de un uso cotidiano del dispositivo), de no requerir la utilización de los mencionados “geles”.
Por otro lado, si bien la potencial utilidad del ingenio para su aplicación y uso en el ámbito médico-sanitario ya tiene de por sí una más que notable importancia, Li-Wei Ko ha asegurado que las tendrá también en otros entornos. Y ha anunciado de paso su intención de miniaturizarlo.