Google está trabajando en un coche que se conduce solo. Para ello, está construyendo varios prototipos que operan con seguridad y de forma autónoma, sin necesidad de intervención humana. No tienen ni volante, ni pedal de acelerador, ni pedal de freno... porque no los necesitan, explica Chris Urmson, director del proyecto, en el blog oficial de Google.
"Nuestro software y nuestros sensores hacen todo el trabajo", explica Urmson. "Los vehículos serán muy básicos, pero llevarán a la gente donde quiera ir con sólo pulsar un botón. Y eso es un paso importante hacia la mejora de la seguridad vial y la transformación de la movilidad de millones de personas", añade.
El equipo empezó con "lo más importante": la seguridad. Tienen sensores que eliminan los puntos ciegos, y pueden detectar objetos a una distancia de más de dos campos de fútbol en todas las direcciones, lo que es especialmente útil en calles muy transitadas con un montón de intersecciones, señala el investigador.
Por el momento han limitado la velocidad de estos primeros vehículos a 40 kilómetros por hora, aunque esa velocidad podrá aumentar si se demuestra que son seguros. "El interior lo hemos diseñado para el aprendizaje, así que no es de lujo, y no tiene demasiadas comodidades; pero hay dos asientos (con cinturones de seguridad), un espacio para las pertenencias de los pasajeros, botones para arrancar y parar, y una pantalla que muestra la ruta: eso es todo".
Google planea construir alrededor de cien vehículos prototipo, y más avanzado el verano, se comenzarán a probar las primeras versiones de estos vehículos que tienen controles manuales. "Si todo va bien, nos gustaría ejecutar un pequeño programa piloto en California en el próximo par de años. Vamos a aprender mucho de esta experiencia, y si la tecnología se desarrolla como esperamos, vamos a trabajar con nuestros socios para llevar esta tecnología al mundo de manera segura", afirma Urmson.
"Nuestro software y nuestros sensores hacen todo el trabajo", explica Urmson. "Los vehículos serán muy básicos, pero llevarán a la gente donde quiera ir con sólo pulsar un botón. Y eso es un paso importante hacia la mejora de la seguridad vial y la transformación de la movilidad de millones de personas", añade.
El equipo empezó con "lo más importante": la seguridad. Tienen sensores que eliminan los puntos ciegos, y pueden detectar objetos a una distancia de más de dos campos de fútbol en todas las direcciones, lo que es especialmente útil en calles muy transitadas con un montón de intersecciones, señala el investigador.
Por el momento han limitado la velocidad de estos primeros vehículos a 40 kilómetros por hora, aunque esa velocidad podrá aumentar si se demuestra que son seguros. "El interior lo hemos diseñado para el aprendizaje, así que no es de lujo, y no tiene demasiadas comodidades; pero hay dos asientos (con cinturones de seguridad), un espacio para las pertenencias de los pasajeros, botones para arrancar y parar, y una pantalla que muestra la ruta: eso es todo".
Google planea construir alrededor de cien vehículos prototipo, y más avanzado el verano, se comenzarán a probar las primeras versiones de estos vehículos que tienen controles manuales. "Si todo va bien, nos gustaría ejecutar un pequeño programa piloto en California en el próximo par de años. Vamos a aprender mucho de esta experiencia, y si la tecnología se desarrolla como esperamos, vamos a trabajar con nuestros socios para llevar esta tecnología al mundo de manera segura", afirma Urmson.
El proyecto
La evolución del proyecto se puede seguir en su página oficial, en Google Plus. Hasta ahora no han tenido ningún accidente, asegura la compañía.
Los coches son un paso natural para Google, recuerda Phys.org, puesto que ya ha recorrido cientos de miles de kilómetros en California con modelos Lexus SUV y Toyota Prius equipados con una combinación de sensores y ordenadores.
"Es como coger un telesilla tú solo, una cierta soledad que encontré muy agradable", declaró ayer Sergey Brin, co -fundador de Google, sobre la experiencia de montar en estos coches. El coche tiene motor eléctrico, y es compacto y con forma de burbuja, pensado para moverse en un campus corporativo o en el congestionado centro de la ciudad.
Google ha hecho énfasis en que no quiere profundizar en esta tecnología, y que se aliará con otras empresas para desarrollarla. Una de las dificultades tendrá que solventar es la ley, puesto que ésta no contempla aún la posibilidad de vehículos sin pedales ni volante, manejados por un conductor.
La evolución del proyecto se puede seguir en su página oficial, en Google Plus. Hasta ahora no han tenido ningún accidente, asegura la compañía.
Los coches son un paso natural para Google, recuerda Phys.org, puesto que ya ha recorrido cientos de miles de kilómetros en California con modelos Lexus SUV y Toyota Prius equipados con una combinación de sensores y ordenadores.
"Es como coger un telesilla tú solo, una cierta soledad que encontré muy agradable", declaró ayer Sergey Brin, co -fundador de Google, sobre la experiencia de montar en estos coches. El coche tiene motor eléctrico, y es compacto y con forma de burbuja, pensado para moverse en un campus corporativo o en el congestionado centro de la ciudad.
Google ha hecho énfasis en que no quiere profundizar en esta tecnología, y que se aliará con otras empresas para desarrollarla. Una de las dificultades tendrá que solventar es la ley, puesto que ésta no contempla aún la posibilidad de vehículos sin pedales ni volante, manejados por un conductor.