Recreación artística del planeta HD 40307g en primer plano (izquierda), junto a la estrella HD 40307 y otros dos planetas (derecha). El ambiente y continentes de la ilustración son especulativos. Imagen: J. Pinfield, RoPACS network, Universidad de Hertfordshire. Fuente: Universidad de Göttingen.
Un equipo internacional de astrónomos ha encontrado en el espacio una supertierra orbitando alrededor de una estrella cercana, que podría tener un clima similar al terrestre e incluso albergar vida.
El hallazgo, que recoge la revista Astronomy & Astrophysics, ha sido realizado por Mikko Tuomi, de la Universidad de Hertfordshire (Inglaterra) y Guillem Anglada-Escude, de la Universidad de Göttingen (Alemania), entre otros astrónomos.
Según publica Alphagalileo, la supertierra encontrada se halla en la zona de habitabilidad de una estrella conocida como HD 40307, una enana naranja situada a unos 42 años luz de nuestro planeta, en la constelación de Pictor, y cuya masa es algo menor que la del Sol.
En astrofísica, se define como zona de habitabilidad estelar a la región alrededor de cualquier estrella en la que, de encontrarse ubicado un planeta, la luminosidad y el flujo de radiación incidente sobre él (procedente de su estrella) permitiría la presencia de agua en estado líquido sobre su superficie.
La HD 40307, por su parte, es la estrella anfitriona de un sistema planetario del que hasta ahora se había pensado que solo contenía tres planetas, en una órbita demasiado cercana a dicha estrella como para albergar agua líquida. El descubrimiento de esos tres primeros planetas fue realizado en 2008.
Pero Tuomi y su equipo han conseguido detectar otros tres planetas más. Lo lograron eludiendo falsas señales originadas por la actividad estelar del sistema. Así pudieron registrar datos de otras tres supertierras, también en órbita.
Lo hicieron, según Mikko Tuomi, gracias a nuevas técnicas de análisis de datos que incluyen el uso de la longitud de onda a modo de filtro para reducir la influencia de actividad en las señales procedentes de la HD 40307.
Estas técnicas incrementaron significativamente la sensibilidad de los registros lo que permitió “revelar la existencia de tres supertierras (más) alrededor de la estrella analizada”, explica Tuomi.
El hallazgo, que recoge la revista Astronomy & Astrophysics, ha sido realizado por Mikko Tuomi, de la Universidad de Hertfordshire (Inglaterra) y Guillem Anglada-Escude, de la Universidad de Göttingen (Alemania), entre otros astrónomos.
Según publica Alphagalileo, la supertierra encontrada se halla en la zona de habitabilidad de una estrella conocida como HD 40307, una enana naranja situada a unos 42 años luz de nuestro planeta, en la constelación de Pictor, y cuya masa es algo menor que la del Sol.
En astrofísica, se define como zona de habitabilidad estelar a la región alrededor de cualquier estrella en la que, de encontrarse ubicado un planeta, la luminosidad y el flujo de radiación incidente sobre él (procedente de su estrella) permitiría la presencia de agua en estado líquido sobre su superficie.
La HD 40307, por su parte, es la estrella anfitriona de un sistema planetario del que hasta ahora se había pensado que solo contenía tres planetas, en una órbita demasiado cercana a dicha estrella como para albergar agua líquida. El descubrimiento de esos tres primeros planetas fue realizado en 2008.
Pero Tuomi y su equipo han conseguido detectar otros tres planetas más. Lo lograron eludiendo falsas señales originadas por la actividad estelar del sistema. Así pudieron registrar datos de otras tres supertierras, también en órbita.
Lo hicieron, según Mikko Tuomi, gracias a nuevas técnicas de análisis de datos que incluyen el uso de la longitud de onda a modo de filtro para reducir la influencia de actividad en las señales procedentes de la HD 40307.
Estas técnicas incrementaron significativamente la sensibilidad de los registros lo que permitió “revelar la existencia de tres supertierras (más) alrededor de la estrella analizada”, explica Tuomi.
Características del planeta
De los tres nuevos planetas descubiertos, el de mayor interés es el que se encuentra en la parte más externa de la órbita de la HD 40307. Esta supertierra tiene una masa de al menos siete veces la de la Tierra.
Su órbita alrededor de la estrella anfitriona tiene una distancia similar a la de órbita terrestre alrededor del Sol, por lo que este planeta recibe una cantidad de energía de su estrella parecida a la que recibe la Tierra de nuestro Sol.
Este hecho aumenta las probabilidades de que sea habitable, porque supone que el planeta no sería ni demasiado cálido ni demasiado frío. Asimismo, en él sería posible tanto la existencia de agua líquida como de una atmósfera estable, lo que incrementa también sus probabilidades de habitabilidad, según publica la Universidad de Göttingen en un comunicado.
Otro factor importante en este sentido es que esta supertierra parece girar sobre su propio eje, a medida que orbita alrededor de la HD 4037, generando ciclos de día y noche como los existentes en nuestro planeta. Esto favorecería la creación en ella de un entorno similar al terrestre.
Guillem Angla-Escude afirma además que: “La HD 40307 es una estrella de secuencia principal perfectamente estable, por lo que no existe razón alguna para que no pudiera propiciar un clima como el de la Tierra”.
Mikko Tuomi llevó a cabo esta investigación como miembro de la red europea de ciencia RoPACS (Rocky Planets Around Cool Stars), una iniciativa para la búsqueda de planetas que orbitan estrellas.
Una promesa más lejana
A principios de este año, la nave Kepler encontró un planeta, el Kepler-22b, con una órbita similar al de la supertierra recién encontrada, conocida como HD 4037g.
El Kepler-22b fue el primer exoplaneta encontrado en una zona habitable y, según los científicos, es un planeta susceptible de albergar vida ya que puede que presente todas las condiciones para ello, como agua, y temperatura y atmósfera adecuadas. Este planeta tiene 2,4 veces el radio de la tierra y orbita su estrella (Kepler-22) en 289 días.
Sin embargo, el Kepler 22d se encuentra a 600 años luz de la Tierra, mientras que la supertierra HD 4037g está mucho más cerca, a “solo” 42 años luz de nosotros.
De los tres nuevos planetas descubiertos, el de mayor interés es el que se encuentra en la parte más externa de la órbita de la HD 40307. Esta supertierra tiene una masa de al menos siete veces la de la Tierra.
Su órbita alrededor de la estrella anfitriona tiene una distancia similar a la de órbita terrestre alrededor del Sol, por lo que este planeta recibe una cantidad de energía de su estrella parecida a la que recibe la Tierra de nuestro Sol.
Este hecho aumenta las probabilidades de que sea habitable, porque supone que el planeta no sería ni demasiado cálido ni demasiado frío. Asimismo, en él sería posible tanto la existencia de agua líquida como de una atmósfera estable, lo que incrementa también sus probabilidades de habitabilidad, según publica la Universidad de Göttingen en un comunicado.
Otro factor importante en este sentido es que esta supertierra parece girar sobre su propio eje, a medida que orbita alrededor de la HD 4037, generando ciclos de día y noche como los existentes en nuestro planeta. Esto favorecería la creación en ella de un entorno similar al terrestre.
Guillem Angla-Escude afirma además que: “La HD 40307 es una estrella de secuencia principal perfectamente estable, por lo que no existe razón alguna para que no pudiera propiciar un clima como el de la Tierra”.
Mikko Tuomi llevó a cabo esta investigación como miembro de la red europea de ciencia RoPACS (Rocky Planets Around Cool Stars), una iniciativa para la búsqueda de planetas que orbitan estrellas.
Una promesa más lejana
A principios de este año, la nave Kepler encontró un planeta, el Kepler-22b, con una órbita similar al de la supertierra recién encontrada, conocida como HD 4037g.
El Kepler-22b fue el primer exoplaneta encontrado en una zona habitable y, según los científicos, es un planeta susceptible de albergar vida ya que puede que presente todas las condiciones para ello, como agua, y temperatura y atmósfera adecuadas. Este planeta tiene 2,4 veces el radio de la tierra y orbita su estrella (Kepler-22) en 289 días.
Sin embargo, el Kepler 22d se encuentra a 600 años luz de la Tierra, mientras que la supertierra HD 4037g está mucho más cerca, a “solo” 42 años luz de nosotros.
Referencia bibliográfica:
M. Tuomi et al. Habitable-zone super-Earth candidate in a six-planet system around the K2.5V star HD 40307. Astronomy & Astrophysics (2012).
M. Tuomi et al. Habitable-zone super-Earth candidate in a six-planet system around the K2.5V star HD 40307. Astronomy & Astrophysics (2012).