Gráfico: IVIE. Click para ampliar.
España tiene una tasa de abandono temprano de estudios que triplica al objetivo europeo del 10 por ciento y está muy lejos de alcanzar el 85 por ciento de jóvenes que pide la UE con al menos educación secundaria, si bien se observa una ruptura en la evolución del abandono en los últimos dos años.
Sin embargo, la escolarización infantil es una de las más altas de Europa y España está alineada con el objetivo europeo de 2020 para graduados en educación superior, al mismo tiempo que la formación continua está también por encima de la media europea, aunque alejada de los objetivos comunitarios para 2010 y 2015.
Estas son las principales conclusiones del estudio Estrategia de educación y formación 2020: ¿Cumplimos los objetivos?”, que acaba de publicar el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas en el número 135 de su revista Capital Humano.
Abandono temprano de estudios
El abandono temprano en España es demasiado elevado, con tasas que casi triplican el objetivo europeo del 10%. Pese a la gravedad española, se observa una ruptura en la evolución del abandono en los últimos dos años.
El abandono temprano en España fue en 2010 del 28,4%; uno de los más altos de la UE, aunque ha descendido 2,8 puntos porcentuales en el último año, y 3,5 puntos porcentuales si se consideran los dos últimos años.
Según los últimos datos publicados, la tasa media de abandono escolar temprano era en 2010 del 14,1% en la Unión Europea, porcentaje bastante alejado del objetivo fijado para 2010 de al menos un 10% y mucho más del de 2020 de alcanzar porcentajes menores a ese 10%.
El concepto de abandono temprano se refiere al porcentaje de jóvenes de 18 a 24 años que han logrado como máximo la educación secundaria obligatoria y no continúan estudiando o formándose a fin de alcanzar estudios de educación secundaria postobligatoria.
En la mayoría de los países miembros el porcentaje de abandono escolar temprano disminuyó entre el 2000 y el 2010, pero el progreso realizado ha sido insuficiente para alcanzar el punto de referencia.
Educación secundaria postobligatoria
Por otro lado, España, con un 61,2%, está muy lejos de alcanzar el objetivo de un 85% de jóvenes con al menos secundaria postobligatoria.
Eslovaquia, República Checa y Polonia muestran porcentajes por encima del 90% y Austria, Suecia, Chipre, Lituania, Irlanda y Eslovenia superan la cota del 85%. Además, la media europea se sitúa en un lejano 79%, aunque muy por encima de los porcentajes que presentan Malta (53,3%), Portugal (58,7%) y España (61,2%).
En este campo, el objetivo de la UE para 2010 consiste en que al menos un 85% de los jóvenes entre 20 y 24 años tengan finalizada la educación secundaria postobligatoria.
No obstante, se ha preferido prescindir de este indicador en los objetivos de 2020 por considerarse muy cercano a la tasa de abandono temprano anteriormente comentada. Existen en 2010 diferencias notables también en este indicador entre los países europeos.
Educación infantil
La escolarización infantil en España es de las más altas de la Unión Europea, con un 99,3%. En 2009, Francia, Países Bajos, Bélgica y España muestran una escolarización infantil prácticamente universal, por encima del 99%, y países como Estonia, Alemania, Reino Unido e Italia se sitúan por encima del 95% establecido para 2020, por lo que se espera que para ese año hayan alcanzado también una escolarización cercana al 100%.
La media europea se sitúa en un 91,7%. En cambio, países como Grecia, Polonia o incluso Finlandia se sitúan por debajo del 72%.
Los nuevos objetivos del marco estratégico para 2020 es que el 95% de los niños entre cuatro años de edad y la edad de comienzo de la educación obligatoria, participen en la educación infantil. El Consejo Europeo señala que una educación infantil de calidad ofrece un aprendizaje más eficaz en las etapas educativas posteriores.
Sin embargo, la escolarización infantil es una de las más altas de Europa y España está alineada con el objetivo europeo de 2020 para graduados en educación superior, al mismo tiempo que la formación continua está también por encima de la media europea, aunque alejada de los objetivos comunitarios para 2010 y 2015.
Estas son las principales conclusiones del estudio Estrategia de educación y formación 2020: ¿Cumplimos los objetivos?”, que acaba de publicar el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas en el número 135 de su revista Capital Humano.
Abandono temprano de estudios
El abandono temprano en España es demasiado elevado, con tasas que casi triplican el objetivo europeo del 10%. Pese a la gravedad española, se observa una ruptura en la evolución del abandono en los últimos dos años.
El abandono temprano en España fue en 2010 del 28,4%; uno de los más altos de la UE, aunque ha descendido 2,8 puntos porcentuales en el último año, y 3,5 puntos porcentuales si se consideran los dos últimos años.
Según los últimos datos publicados, la tasa media de abandono escolar temprano era en 2010 del 14,1% en la Unión Europea, porcentaje bastante alejado del objetivo fijado para 2010 de al menos un 10% y mucho más del de 2020 de alcanzar porcentajes menores a ese 10%.
El concepto de abandono temprano se refiere al porcentaje de jóvenes de 18 a 24 años que han logrado como máximo la educación secundaria obligatoria y no continúan estudiando o formándose a fin de alcanzar estudios de educación secundaria postobligatoria.
En la mayoría de los países miembros el porcentaje de abandono escolar temprano disminuyó entre el 2000 y el 2010, pero el progreso realizado ha sido insuficiente para alcanzar el punto de referencia.
Educación secundaria postobligatoria
Por otro lado, España, con un 61,2%, está muy lejos de alcanzar el objetivo de un 85% de jóvenes con al menos secundaria postobligatoria.
Eslovaquia, República Checa y Polonia muestran porcentajes por encima del 90% y Austria, Suecia, Chipre, Lituania, Irlanda y Eslovenia superan la cota del 85%. Además, la media europea se sitúa en un lejano 79%, aunque muy por encima de los porcentajes que presentan Malta (53,3%), Portugal (58,7%) y España (61,2%).
En este campo, el objetivo de la UE para 2010 consiste en que al menos un 85% de los jóvenes entre 20 y 24 años tengan finalizada la educación secundaria postobligatoria.
No obstante, se ha preferido prescindir de este indicador en los objetivos de 2020 por considerarse muy cercano a la tasa de abandono temprano anteriormente comentada. Existen en 2010 diferencias notables también en este indicador entre los países europeos.
Educación infantil
La escolarización infantil en España es de las más altas de la Unión Europea, con un 99,3%. En 2009, Francia, Países Bajos, Bélgica y España muestran una escolarización infantil prácticamente universal, por encima del 99%, y países como Estonia, Alemania, Reino Unido e Italia se sitúan por encima del 95% establecido para 2020, por lo que se espera que para ese año hayan alcanzado también una escolarización cercana al 100%.
La media europea se sitúa en un 91,7%. En cambio, países como Grecia, Polonia o incluso Finlandia se sitúan por debajo del 72%.
Los nuevos objetivos del marco estratégico para 2020 es que el 95% de los niños entre cuatro años de edad y la edad de comienzo de la educación obligatoria, participen en la educación infantil. El Consejo Europeo señala que una educación infantil de calidad ofrece un aprendizaje más eficaz en las etapas educativas posteriores.
Gráficos: IVIE. Click para ampliar.
Educación Superior
En el campo de la educación superior, España alcanza en 2010 el objetivo europeo de 2020 de al menos un 40% de graduados en educación superior, si bien el número de graduados superiores en titulaciones relacionadas con ciencias y tecnología es relativamente bajo.
En 2009, los países con un mayor número de graduados de 20 a 29 años en ciencia y tecnología por 1.000 habitantes son Francia (20,2), Rumanía (20), Finlandia (19), Lituania (18,5) o Eslovaquia y Reino Unido (17,5).
La media de la Unión Euro-pea se sitúa en un 14,3 y España en un 12,5, aunque sí ha cumplido el objetivo, que era cercano al 11,4. En la parte baja del indicador se encuentran Chipre (4,6) o Malta (7), que también han cumplido con su objetivo parti-cular de aumento de un 15% del número de graduados en ciencias y tecnología. Así, países como Francia o Reino Unido, a la cabeza en número de este tipo de graduados, no habían cumplido en 2009 sus objetivos particulares.
La Unión Europea se ha planteado como objetivo estratégico para 2020 aumentar el porcentaje de graduados en educación superior entre los 30 y los 34 años hasta el 40%, aunque los objetivos según los programas de reformas nacionales de cada país varían en función de si en la actualidad ya se han alcanzado o se está muy cerca del 40%, aumentándolos, o si el objetivo es demasiado ambicioso respecto del nivel del que partían.
El porcentaje de graduados de la Unión Europea es en 2010 del 33,6%. Los países europeos con el porcentaje más alto son Irlanda con casi el 50% de titulados y Dinamarca con el 47%. España, con el 40,6% ha superado en 2010 el punto de referencia fijado para 2020, por lo que para ese año el objetivo nacional se ha situado en el 44%.
Formación continua
Por último, España se sitúa ligeramente por encima de la media europea en participación en formación continua, si bien el 10,8% alcanzado no llega al objetivo europeo del 12,5% para 2010 ni del 15% de 2020.
En España, la formación permanente en los últimos años estaba estabilizada en torno al 10,4%, pero en el último año ha aumentado hasta el 10,8%.
La comparación con años anteriores a 2005 es difícil por un cambio metodológico en la EPA, por lo que se presenta una ruptura de serie a partir de ese año, debido a que se tiene en cuenta una mayor cobertura de las actividades de educación y formación distinguiendo entre formación reglada y no reglada.
En la Unión Europea la evolución, tras la ruptura en 2003, fue de aumento hasta 2005 y a partir de ese año se produce una estabilización con ligera tendencia al descenso. Alcanzar, por tanto, el objetivo para 2020 es un reto para bastantes países de la Unión Europea.
En el campo de la educación superior, España alcanza en 2010 el objetivo europeo de 2020 de al menos un 40% de graduados en educación superior, si bien el número de graduados superiores en titulaciones relacionadas con ciencias y tecnología es relativamente bajo.
En 2009, los países con un mayor número de graduados de 20 a 29 años en ciencia y tecnología por 1.000 habitantes son Francia (20,2), Rumanía (20), Finlandia (19), Lituania (18,5) o Eslovaquia y Reino Unido (17,5).
La media de la Unión Euro-pea se sitúa en un 14,3 y España en un 12,5, aunque sí ha cumplido el objetivo, que era cercano al 11,4. En la parte baja del indicador se encuentran Chipre (4,6) o Malta (7), que también han cumplido con su objetivo parti-cular de aumento de un 15% del número de graduados en ciencias y tecnología. Así, países como Francia o Reino Unido, a la cabeza en número de este tipo de graduados, no habían cumplido en 2009 sus objetivos particulares.
La Unión Europea se ha planteado como objetivo estratégico para 2020 aumentar el porcentaje de graduados en educación superior entre los 30 y los 34 años hasta el 40%, aunque los objetivos según los programas de reformas nacionales de cada país varían en función de si en la actualidad ya se han alcanzado o se está muy cerca del 40%, aumentándolos, o si el objetivo es demasiado ambicioso respecto del nivel del que partían.
El porcentaje de graduados de la Unión Europea es en 2010 del 33,6%. Los países europeos con el porcentaje más alto son Irlanda con casi el 50% de titulados y Dinamarca con el 47%. España, con el 40,6% ha superado en 2010 el punto de referencia fijado para 2020, por lo que para ese año el objetivo nacional se ha situado en el 44%.
Formación continua
Por último, España se sitúa ligeramente por encima de la media europea en participación en formación continua, si bien el 10,8% alcanzado no llega al objetivo europeo del 12,5% para 2010 ni del 15% de 2020.
En España, la formación permanente en los últimos años estaba estabilizada en torno al 10,4%, pero en el último año ha aumentado hasta el 10,8%.
La comparación con años anteriores a 2005 es difícil por un cambio metodológico en la EPA, por lo que se presenta una ruptura de serie a partir de ese año, debido a que se tiene en cuenta una mayor cobertura de las actividades de educación y formación distinguiendo entre formación reglada y no reglada.
En la Unión Europea la evolución, tras la ruptura en 2003, fue de aumento hasta 2005 y a partir de ese año se produce una estabilización con ligera tendencia al descenso. Alcanzar, por tanto, el objetivo para 2020 es un reto para bastantes países de la Unión Europea.
Referencia
Estrategia de educación y formación 2020:¿Cumplimos los objetivos? Revista Capital Humano, n.º 1352012. 14 de mayo de 2012. Ivie (Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas).
Descargar el estudio
Estrategia de educación y formación 2020:¿Cumplimos los objetivos? Revista Capital Humano, n.º 1352012. 14 de mayo de 2012. Ivie (Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas).
Descargar el estudio