El Gobierno impone un mínimo de eficiencia a las universidades españolas

El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes el Real Decreto Ley de Medidas Urgentes de Racionalización del Gasto Público en el ámbito educativo, que modifican la Ley Orgánica de Universidades (LOU) y la Ley Orgánica de Educación (LOE), para introducir nuevas medidas en enseñanza universitaria y no universitaria con el objetivo de recortar 3.000 millones de euros buscando que los estudiantes respondan al "esfuerzo que hace el conjunto de los ciudadanos".
 
Se trata de "primar el esfuerzo que hacen los ciudadanos para que los alumnos estudien en el ámbito de la igualdad de oportunidades", según ha afirmado la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Soraya Sáenz de Santamaría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que ha estado acompañada por el  ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert.
 
El titular de Educación, ha señalado que las iniciativas aprobadas con este decreto responden a las peticiones de las comunidades autónomas para alcanzar el objetivo de déficit y "hacer más eficiente el gasto educativo". Según ha dicho, el Gobierno modifica algunos aspectos de las leyes educativas para dar una "mayor flexibilidad" a las autonomías. Asimismo, ha reiterado que estas iniciativas "no son la reforma educativa del Gobierno", sino que sientan las "condiciones previas" para la misma.
 
Wert ha enumerado los cambios en educación no universitaria, como la medida temporal que permite a las comunidades autónomas aumentar en un 20 por ciento el número máximo de alumnos por clase previsto en la LOE: 25 en Primaria y 30 en Secundaria. En este sentido, el ministro ha señalado que se elimina la "rigidez" que suponía que en el momento en el que se elevara a 31 alumnos un grupo, éste se dividiera en dos de 15 y 16 alumnos respectivamente. "Queremos evitar una disfunción y un coste muy elevado", ha apostillado.

Mínimos lectivos
 
Para los profesores, el Gobierno establece un mínimo de 25 horas lectivas en Educación Infantil y Primaria y de 20 horas en las restantes enseñanzas, sin perjuicio de las reducciones que correspondan por ejercicio de funciones de dirección o coordinación del centro. A juicio del ministro, es una medida que exige un "esfuerzo" por parte de los docentes "pero que tampoco va a afectar a la calidad de la educación.
 
En cuanto a los ciclos de Formación Profesional de 2.000 horas que se iban a implantar el curso que viene, el Ejecutivo ha decidido aplazarlos al curso 2013-2014. Para las comunidades que ya los han puesto en marcha, Wert ha anunciado podrán seguir impartiéndolos, pero que esta medida responde a una petición "mayoritaria" de los consejeros de Educación.
 
El Ejecutivo elimina la obligatoriedad de ofertar al menos dos modalidades de Bachillerato en los términos previstos en la LOE. Según el ministro, esta obligatoriedad carecía de "sentido práctico" en los casos en los que no hubiera suficiente demanda y ha incidido en que no se trata de limitar las modalidades de selección por parte del alumnado, sino de "conjugar la oferta de forma eficiente".
 
El decreto incluye también otra iniciativa temporal para modificar el criterio de nombramiento de sustitutos determinando que las bajas inferiores a 10 días lectivos deberán ser atendidas por los recursos del propio centro. Así, el nombramiento de funcionarios interinos por sustitución transitoria de los profesores titulares se producirá únicamente cuando hayan transcurrido diez días lectivos desde la situación que da origen a dicho nombramiento.

Cambios en universidades

En cuanto a las modificaciones de la Ley Orgánica de Universidades, el Gobierno ha establecido medidas de racionalización del gasto que afecta a las enseñanzas universitarias que desarrollarán las comunidades en diálogo con las comunidades autónomas. En este sentido, Wert ha señalado que se establecen "mínimos de eficiencia" para evitar, por ejemplo, que cuatro universidades de una misma comunidad impartan un título, que en total están matriculado 23 alumnos.
 
El coste de la primera matrícula cubrirá a partir del curso que viene entre el 15 y el 25 por ciento del coste real en los títulos de grado y Másteres habilitantes para el ejercicio de una profesión. La segunda matrícula cubrirá entre el 30 y el 40 por ciento del coste real; tercera entre el 65 y el 75 por ciento; y la cuarta matrícula entre el 90 y el cien por cien del coste real de las enseñanzas.
 
Para el resto de Másteres, los no habilitantes para el ejercicio de una profesión, la primera matrícula cubrirá entre el 40 y el 50 por ciento y entre el 65 y el 75 por ciento de los costes a partir de la segunda matrícula.
 
Sobre este punto el ministro ha dicho que hasta ahora el coste medio real de un curso de 60 créditos es de unos 6.000 euros para la administración pública y que, cada vez que se repite "se incurre nuevamente en ese mismo coste". "No tiene sentido que la parte de precio público sea la misma para el alumno que aprueba y se esfuerza que para el que suspende", ha apostillado.
 
Otra de las medidas se refiere a la matrícula de los alumnos extranjeros procedentes de países de fuera de la Unión Europea sin permiso de residencia, que, a partir del curso que viene, salvo que haya acuerdos de reciprocidad con sus países de origen, tendrán que abonar el 100% del coste de su plaza universitaria.

Se penalizará a las universidades ineficientes
 
También se incorpora el principio de estabilidad presupuestaria a las universidades que consiste en el diseño de un sistema que garantice la estabilidad presupuestaria de los campus, no sólo en el momento de elaborar el presupuesto sino también en la liquidación del mismo. El titular de Educación ha indicado que se establecerá además un sistema punitivo para aquellas universidades que incumplan, a cargo de las comunidades autónomas.
 
Se propone adaptar el régimen de dedicación del profesorado universitario según si cumplen sólo con la función docente o  investigadora o con ambas. Así, los funcionarios docentes sin sexenio en activo o vivo, ampliarán su dedicación máxima docente de 24 a 32 créditos al año; los que mantengan los sexenios activos o vivos (que acrediten estar investigando), seguirían en la misma situación de dedicación máxima, los 24 créditos anuales.
 
Asimismo, para aquellos profesores que muestren excelencia en la investigación se especialicen en ésta reducirán su dedicación máxima docente a un máximo de 16 créditos. Esto último se acreditará mediante un sexenio de excelencia que se definirá en desarrollos normativos posteriores.
 
En cuanto a las becas generales, el ministro ha aclarado que se configuran "como un derecho", cuando el alumno se encuentre dentro de del umbral económico establecido hasta ahora. Sin embargo, ha advertido de que se van a cambiar los umbrales de rendimiento, que en la actualidad se sitúan en el 80 por ciento de créditos superados en la mayoría de las carreras, con el objetivo de "estimular el rendimiento y la exigencia".

La Eurocámara y la  Comisión Europea avisan: "cortedad de miras"

El mismo día que el Gobierno aprobaba esta reforma educativa, el Parlamento europeo aprobaba un informe que lamenta los recortes presupuestarios en el ámbito de la educación superior, así como la "constante subida de las matrículas".

Los diputados instan a los Estados miembros a aumentar la inversión pública en materia de educación para mejorar la competitividad de las universidades europeas, favorecer la movilidad y promover el acceso a la educación para todos los estudiantes, independientemente de su origen social.

Asimismo, la Comisión Europea ha avisado este viernes al Gobierno español de que los recortes de 3.000 millones de euros en educación harán más difícil reducir la tasa de abandono escolar, que en España está en el 30%, una de las más altas de la UE. Bruselas cree que los ajustes en educación constituyen una medida "corta de miras" que sólo debería usarse "como último recurso".

El Ejecutivo comunitario admite que "los Estados miembros son plenamente responsables a la hora de organizar sus sistemas educativos y su financiación". Pero resalta que "recortar los presupuestos de educación es una medida corta de miras y debería ser el último recurso", según ha explicado a Europa Press el portavoz de Educación, Dennis Abbot, al ser preguntado por los recortes en España.
 
Todos los Estados miembros se han comprometido, destaca la Comisión, a reducir el abandono escolar al 10% y aumentar la tasa de licenciados al 40% de aquí a 2020. "El nivel de abandono escolar en España supera actualmente el 30%. Recortar los presupuestos de educación puede hacer más difícil alcanzar estos objetivos", ha indicado el portavoz.
 
Al menos el 35% de los puestos de trabajo en el futuro requerirán una alta cualificación, según Bruselas. Por ello, el Ejecutivo comunitario ve esencial mantener la inversión para dar a los jóvenes la formación que necesitan para que la UE mantenga su competitividad.
 
La Comisión ha propuesto un "incremento significativo" en el presupuesto para educación de la UE para el periodo 2014-2020. Ello permitirá dar hasta 5 millones de becas para intercambio de estudiantes y de prácticas en empresa, según Bruselas.