Se calcula que hasta un 80% de las personas con antecedentes de depresión pueden volver a deprimirse de nuevo. Sin embargo, poco se sabe acerca de los factores específicos que ponen a estos individuos en situación de riesgo. Una nueva investigación sugiere que la causa podría estar en las cosas a las que se presta más atención en la vida.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Binghamton, en Nueva York (EEUU), analizaron a160 mujeres, 60 de las cuales tenían antecedentes de depresión y otras 100 no.
A todas ellas, les mostraron una serie de dos caras, una con una expresión neutra y la otra con una expresión enojada, triste o feliz. Mediante s eguimiento ocular (evaluación de dónde se fijan las miradas) los científicos descubrieron que las mujeres con antecedentes de depresión prestaban más atención a las caras enojadas.
Y, lo que es más importante, entre estas mujeres, aquellas con mayor propensión a mirar más a los rostros enojados presentaron un mayor riesgo de desarrollar depresión de nuevo, en los dos años posteriores al estudio.
Brandon Gibb, profesor de psicología en la Universidad de Binghamton y uno de los autores de la investigación señala en un comunicado de dicha Universidad que, en el día a día, prestamos más atención a ciertas cosas. Si esa atención se destina "a las personas que parecen estar enojadas con usted o ser críticas con usted, entonces usted estará en riesgo de caer en una depresión".
Un equipo de investigadores de la Universidad de Binghamton, en Nueva York (EEUU), analizaron a160 mujeres, 60 de las cuales tenían antecedentes de depresión y otras 100 no.
A todas ellas, les mostraron una serie de dos caras, una con una expresión neutra y la otra con una expresión enojada, triste o feliz. Mediante s eguimiento ocular (evaluación de dónde se fijan las miradas) los científicos descubrieron que las mujeres con antecedentes de depresión prestaban más atención a las caras enojadas.
Y, lo que es más importante, entre estas mujeres, aquellas con mayor propensión a mirar más a los rostros enojados presentaron un mayor riesgo de desarrollar depresión de nuevo, en los dos años posteriores al estudio.
Brandon Gibb, profesor de psicología en la Universidad de Binghamton y uno de los autores de la investigación señala en un comunicado de dicha Universidad que, en el día a día, prestamos más atención a ciertas cosas. Si esa atención se destina "a las personas que parecen estar enojadas con usted o ser críticas con usted, entonces usted estará en riesgo de caer en una depresión".
Cómo puede ayudar un ordenador
Para hacer frente a este tipo de sesgos de la atención nocivos para la psique, existen programas y juegos de ordenador que ya están siendo utilizados para entrenar la atención de la gente.
Este enfoque, que ya ha demostrado ser prometedor en el tratamiento de la ansiedad, se está probando también para el tratamiento de la depresión. Según los autores del estudio, este demuestra la utilidad de estos programas y juegos, capaces de cambiar la tendencia a atender ciertas cosas y, en consecuencia, la probabilidad de alimentar el riesgo de caer en estados depresivos.
"Es un primer paso muy importante en el desarrollo de una nueva línea de tratamiento para personas tanto en peligro de sufrir una depresión como ya deprimidas", aseguran. "Algunos individuos podrían usar estos sistemas, en lugar de la terapia tradicional, o como complemento a cualquier terapia covnencional", afirma Gibb.
Entrenar la atención meditando
Otra forma de entrenar la atención que también funciona contra este trastorno es la meditación, demostró un estudio de 2013. En concreto, un tipo de meditación conocido como mindfulness (atención y conciencia plena), que consiste en adoptar una actitud de atención completa a la experiencia actual (emociones, pensamientos o sensaciones), sin juicio.
Esta técnica, que tiene su origen en la tradición budista, fue aplicada por investigadores de la Universidad Católica de Leuven (KU Leuven), en Bélgica, a estudiantes de secundaria. Como resultado, se constató una reducción de los síntomas de depresión, ansiedad y estrés en los jóvenes, tanto de manera inmediata como seis meses después del desarrollo del programa. Además, los jóvenes que siguieron este sistema se mostraron menos propensos a desarrollar síntomas de depresión grave o mayor.
Para hacer frente a este tipo de sesgos de la atención nocivos para la psique, existen programas y juegos de ordenador que ya están siendo utilizados para entrenar la atención de la gente.
Este enfoque, que ya ha demostrado ser prometedor en el tratamiento de la ansiedad, se está probando también para el tratamiento de la depresión. Según los autores del estudio, este demuestra la utilidad de estos programas y juegos, capaces de cambiar la tendencia a atender ciertas cosas y, en consecuencia, la probabilidad de alimentar el riesgo de caer en estados depresivos.
"Es un primer paso muy importante en el desarrollo de una nueva línea de tratamiento para personas tanto en peligro de sufrir una depresión como ya deprimidas", aseguran. "Algunos individuos podrían usar estos sistemas, en lugar de la terapia tradicional, o como complemento a cualquier terapia covnencional", afirma Gibb.
Entrenar la atención meditando
Otra forma de entrenar la atención que también funciona contra este trastorno es la meditación, demostró un estudio de 2013. En concreto, un tipo de meditación conocido como mindfulness (atención y conciencia plena), que consiste en adoptar una actitud de atención completa a la experiencia actual (emociones, pensamientos o sensaciones), sin juicio.
Esta técnica, que tiene su origen en la tradición budista, fue aplicada por investigadores de la Universidad Católica de Leuven (KU Leuven), en Bélgica, a estudiantes de secundaria. Como resultado, se constató una reducción de los síntomas de depresión, ansiedad y estrés en los jóvenes, tanto de manera inmediata como seis meses después del desarrollo del programa. Además, los jóvenes que siguieron este sistema se mostraron menos propensos a desarrollar síntomas de depresión grave o mayor.
Referencia bibliográfica:
M. L. Woody, M. Owens, K. L. Burkhouse, B. E. Gibb. Selective Attention Toward Angry Faces and Risk for Major Depressive Disorder in Women: Converging Evidence From Retrospective and Prospective Analyses. Clinical Psychological Science (2015). DOI: 10.1177/2167702615581580.
M. L. Woody, M. Owens, K. L. Burkhouse, B. E. Gibb. Selective Attention Toward Angry Faces and Risk for Major Depressive Disorder in Women: Converging Evidence From Retrospective and Prospective Analyses. Clinical Psychological Science (2015). DOI: 10.1177/2167702615581580.