El universo no se expande a la misma velocidad en todas las direcciones, según una investigación sobre 800 cúmulos de galaxias que cuestiona el modelo cosmológico actual.
El eslabón perdido de la evolución de los agujeros negros está dentro de un remoto cúmulo estelar: es el primer agujero negro de masa intermedia confirmado por la ciencia.
Un pequeño hongo ha permitido comprobar que el gas cósmico procedente del Big Bang es el que da estructura a la gran red de filamentos que forma el universo. La telaraña biológica replica la web cósmica.
En un exoplaneta descubierto en 2013 y situado a 390 años luz de la Tierra llueve hierro en vez de agua porque su lado nocturno permanece en oscuridad perpetua y recibe vapor de hierro procedente del lado diurno, con temperaturas de 2.400ºC.
El universo evoluciona en el interior de una burbuja de 250 millones de años luz de diámetro donde la densidad de la materia es menor que en el resto del cosmos. Así determina la constante de Hubble sin necesidad de “nueva física”.
Las megaconstelaciones de satélites que rodean la Tierra están perjudicando la investigación astronómica, especialmente a los grandes telescopios. Pronto serán más de 30.000 objetos que dificultarán la detección de asteroides peligrosos.
Un gran asteroide pasará cerca de la Tierra el próximo 29 de abril, a más de 6 millones de kilómetros de nuestro planeta y a más de 31.000 kilómetros por hora. No representa un peligro, que acecha más bien en noviembre 2020 y en abril 2029.
Una misteriosa estrella, situada a 150 años luz de nosotros, muestra anomalías que solo pueden explicarse como resultado de la fusión de dos enanas blancas ocurrida hace 1.300 millones de años. Seguramente falló al explotar como supernova.
Una proteína completa de origen extraterrestre ha sido descubierta en un meteorito encontrado en Argelia en 1990. Refuerza la teoría de que la vida en nuestro planeta procede del espacio.
La mayor explosión después del Big Bang creó un boquete en el universo en el que caben 15 galaxias como la Vía Láctea. Ocurrió en un agujero negro supermasivo situado a 390 millones de años luz de la Tierra y duró cientos de millones de años.