Las temperaturas, la subida de los océanos y las emisiones de gases de efecto invernadero han alcanzado niveles récord el año pasado, convirtiendo a 2015 en el peor año de la historia moderna por una serie de indicadores clave, señala el informe Estado del Clima 2015, que se ha dado a conocer hoy y en el que han participado 450 científicos de todo el mundo.
La mayor parte de los indicadores del cambio climático han continuado mostrando una tendencia al recalentamiento del planeta, señala el informe, añadiendo que esta evolución debe confirmarse este año porque los primeros seis meses de 2016 han sido con mucho los más cálidos del globo, según datos recientes de los climatólogos de la Nasa.
Lluvias récord
Las concentraciones de los tres principales gases de efecto invernadero, el dióxido de carbono (CO2), el metano y el óxido nitroso, han escalado niveles sin precedentes en 2015, indica el informe, que se apoya en decenas de miles de datos obtenidos de numerosas fuentes independientes.
En todo el planeta, las concentraciones de CO2 han alcanzado en 2015 los 399,4 ppm, una elevación de 2,2ppm en relación a 2014. Los niveles de los océanos han alcanzado también su punto culminante el año pasado, con 70 milímetros más que la media registrada en 1993.
Los niveles de las aguas suben gradualmente alrededor del mundo, con una presión de 3,3 milímetros por año, según el informe, si bien la escalada más alta y rápida ha tenido lugar en ciertos puntos del Pacífico y del Océano Índico.
Esta tendencia debe acelerarse en los próximos decenios, en la medida en que los glaciares sigan derritiéndose, amenazando la vida de millones de personas que hoy viven en regiones costeras.
El año 2015 registró asimismo una estación de lluvias más abundante que la media, la cual ha provocado grandes inundaciones. Al mismo tiempo, severas sequías han caracterizado el año climático, afectando a superficies dos veces más importantes que en el año precedente (14% frente al 8% en 2014).
La mayor parte de los indicadores del cambio climático han continuado mostrando una tendencia al recalentamiento del planeta, señala el informe, añadiendo que esta evolución debe confirmarse este año porque los primeros seis meses de 2016 han sido con mucho los más cálidos del globo, según datos recientes de los climatólogos de la Nasa.
Lluvias récord
Las concentraciones de los tres principales gases de efecto invernadero, el dióxido de carbono (CO2), el metano y el óxido nitroso, han escalado niveles sin precedentes en 2015, indica el informe, que se apoya en decenas de miles de datos obtenidos de numerosas fuentes independientes.
En todo el planeta, las concentraciones de CO2 han alcanzado en 2015 los 399,4 ppm, una elevación de 2,2ppm en relación a 2014. Los niveles de los océanos han alcanzado también su punto culminante el año pasado, con 70 milímetros más que la media registrada en 1993.
Los niveles de las aguas suben gradualmente alrededor del mundo, con una presión de 3,3 milímetros por año, según el informe, si bien la escalada más alta y rápida ha tenido lugar en ciertos puntos del Pacífico y del Océano Índico.
Esta tendencia debe acelerarse en los próximos decenios, en la medida en que los glaciares sigan derritiéndose, amenazando la vida de millones de personas que hoy viven en regiones costeras.
El año 2015 registró asimismo una estación de lluvias más abundante que la media, la cual ha provocado grandes inundaciones. Al mismo tiempo, severas sequías han caracterizado el año climático, afectando a superficies dos veces más importantes que en el año precedente (14% frente al 8% en 2014).
Invasión de algas
El Ártico ha continuado a su vez recalentándose, con temperaturas 2,8 superiores a los niveles alcanzados en 2007 y 2011, al mismo tiempo que las temperaturas han sido más frías en la Antártida.
El retroceso de los glaciares montañosos también ha proseguido en todo el mundo, por 36 años consecutivos.
El calentamiento de los océanos ha agravado la proliferación de algas, que ha afectado a una zona importante del Pacífico norte que
va desde California a la Columbia Británica (Canadá), con “efectos significativos sobre la vida marina, los recursos costeros y los habitantes que dependen de esos recursos”.
La estación de huracanes en el Atlántico ha sido particularmente moderada por segundo año consecutivo, aunque los ciclones tropicales han estado por encima de la media global, señala en informe.
El Ártico ha continuado a su vez recalentándose, con temperaturas 2,8 superiores a los niveles alcanzados en 2007 y 2011, al mismo tiempo que las temperaturas han sido más frías en la Antártida.
El retroceso de los glaciares montañosos también ha proseguido en todo el mundo, por 36 años consecutivos.
El calentamiento de los océanos ha agravado la proliferación de algas, que ha afectado a una zona importante del Pacífico norte que
va desde California a la Columbia Británica (Canadá), con “efectos significativos sobre la vida marina, los recursos costeros y los habitantes que dependen de esos recursos”.
La estación de huracanes en el Atlántico ha sido particularmente moderada por segundo año consecutivo, aunque los ciclones tropicales han estado por encima de la media global, señala en informe.