NotasHoy escribe Antonio Piñero He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: sobre el profeta Daniel, ¿era un personaje del tiempo de Nabucodonosor o del tiempo de Antioco IV? la enciclopedia judaica apoya lo segundo. Respuesta: Sin duda alguna tiene razón la Enciclopedia Judaica. Por favor consulte las siguientes obras: “Introducción Al Antiguo Testamento” de J. L. Sicre, Editorial Verbo Divino Estella 2003 y con el mismo título Werner H. Schmidt, Edit. Sígueme, Salamanca 1999. Saludos Pregunta: Gracias a la investigación y la arqueología en la actualidad que comentario podría darnos con respecto a "l@s otr@s hij@s de María y que serian herman@s del Señor Jesucristo". Respuesta: El evangelista Mateo, defensor de la virginidad de María antes del parto, parece indicar que la madre de Jesús tuvo una vida marital normal al menos después del nacimiento de su primogénito: "Y no la conoció hasta el día en que ella dio a luz..." (1,25). A pesar de los esfuerzos de algunos exegetas por ofrecer una traducción diferente --" y sin haberla conocido dio a luz...", basándose en un pretendido tras¬fondo arameo de la frase griega--, la versión normal del texto es la que acabamos de presentar. Mt 12,46; 13,55 y Mc 3,31-35 aluden con normalidad a los hermanos de Jesús, e incluso citan sus nombres: Santiago, José, Simón y Judas, y al menos dos hermanas, aunque sin dar sus nombres. En los evangelios, todos compuestos originalmente en griego, se emplea el vocablo adelphós, que significa siempre "hermano carnal" para referirse a los hermanos de Jesús; si hubieran pretendido sus autores expresar "primo" o "pariente" tenían a su disposición otras palabras (anepsiós, por ejemplo), que no hubieran inducido a una innecesaria confusión a sus lectores griegos. La primitiva iglesia de Jerusalén fue gobernada en sus primeros años por un “hermano del Señor”, Santiago, sin que nadie entendiera este parentesco de un modo analógico ni sintiera la necesidad de precisar que no era un verdadero hermano, sino un "primo" o "pariente". Pablo habla tranquilamente de el “hermano del Señor” en Gálatas 1,19 y 1 Corintios 9,5 pregunta: “¿No tengo derecho a llevar conmigo (como mujer) a una hermana en la fe lo mismo que los otros apóstoles, los hermanos del Señor y Pedro?”. En el libro que acaba de reeditarse en mayo por Edita Trotta, “Jesús y las mujeres”, Madrid, mayo 2014, dedico un capítulo entero al tema. El libro es muy fácil de conseguir y creo que hay versión electrónica. Pregunta: Sobre la existencia de la “Fuente Q” y respecto al “Problema Sinóptico” ¿Quién copió de quién entre los tres primeros evangelistas? Respuesta: Esta respuesta no es mía, sino de un lector, al que aprecio mucho y que firma con el pseudónimo de Peio Salburúa: Sobre Q soy agnóstico. Me parece verosímil que existiese una o varias colecciones con dichos de Jesús, pero también me parece atractiva la Hipótesis de Farrer o Marcos sin Q. No lo he leído, pero sé que hace unos meses los defensores de esta hipótesis hicieron una obra colectiva y cedieron el último capítulo a Kloppenborg para que defendiese Q y tratase de refutar los capítulos anteriores. Sobre el argumento de que Lucas cambia el orden de Mateo, como ocurre en el sermón de la montaña, Goodacre dice que Lucas, a veces, hace con Marcos lo mismo: retener parte, omitir algo y cambiar alguna cosa de sitio. Esto ocurre al menos dos veces: - Lc. 8:4-18 vs. Mc. 4:1-34: omite Mc. 4:26-29, 33-34 y traslada Mc. 4:30-32 a Lc. 13:18-19 - Lc. 9:46-48 vs. Mc 9:33-50: omite Mc. 9:43-48 y traslada Mc. 9:42 a Lc 14:34-35 En el caso del cambio de lugar del dicho de los tronos de los apóstoles para juzgar a las tribus de Israel, creo que los abogados de la hipótesis de Farrer lo tienen muy fácil, aunque no lo he leído (aunque supongo que se le habrá ocurrido a alguien antes que a mí): Mateo dice que los 12 apóstoles se sentarán en 12 tronos tras el famoso episodio del joven rico. ¡Eso incluye también a Judas! En cambio, Lucas omite el numeral 12 y lo sitúa en la última cena después de haber anunciado la traición de Judas, de modo que el lector puede pensar que Judas no se sentará en un trono. También es cierto que la Hipótesis de Farrer tiene dificultades y algunos cabos sueltos, como el evangelio de la infancia o la muerte de Judas. Ejerciendo de abogado del diablo, quizás Lucas introdujo cambios debido al patinazo de Mateo de confundir Jeremías con Zacarías. Pregunta: El sentido del capítulo 10 del Evangelio de Juan Respuesta: Esta respuesta no es mía, sino de un lector, al que aprecio mucho y que firma con el pseudónimo de Peio Salburúa Sobre las ovejas de Juan 10. En ese mismo capítulo Jesús dice a sus adversarios que no creen porque no son de sus ovejas, por lo que me inclino a creer que las ovejas que son de otro redil son cristianos de comunidades diferentes a la del discípulo amado, lo que no es obstáculo para una apertura a los gentiles. Pienso que el Capítulo 10 no puede leerse aisladamente del 21, en el que Jesús resucitado encomienda a Pedro que apaciente sus ovejas y corderos. Mi hipótesis es la siguiente: - En Juan 21 Pedro pasa de ser el asalariado que huye cuando el lobo Agripa ataca al rebaño al buen pastor que da la vida por sus ovejas al morir crucificado. - Las ovejas de otro redil son los seguidores de Pedro y, en Juan 21, se reconoce que Pedro es el pastor de todas las ovejas cristianas. Pregunta: Aunque con alguna excepcion,la mayor parte de las traducciones de la biblia indican en el evangelio de Juan capitulo 1 y versiculo 1 que el verbo era Dios.Sin embargo en el versiculo18 del mismo capitula afirma quien fuera el escritor del evangelio que a Dios nadie lo ha visto.Le agradeceria su opinion desde sus conocimientos de los idiomas originales cual es la traduccion correcta de Juan 1,1. Respuesta: Esta respuesta no es mía, sino de Carmen Padilla, encargada de la traducción y comentario filológico (las notas exegéticas irán a cargo de Fernando Bermejo) del Futuro “Nuevo Testamento San Millán”, la primera edición en lengua española de un Nuevo Testamento universitario, no confesional, no militante, puesto al día en cuanto a investigación, con introducciones histórico-críticas y literario-críticas, que será publicado hacia el 2016 (ya veremos con qué Editorial) y con una traducción española que debe ser modélica en cuanto a corrección, vocabulario y estilo de acuerdo con la Real Academia Española de la Lengua 1 1 Al principio existía la Palabra, la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios. Al principio existía la Palabra, la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios Al principio, en el comienzo: sin artículo (griego: en arkhé). Clara alusión a Gn 1, 1. En 1 Jn 1 vuelve a aparecer la expresión con la preposición apó, literalmente “desde el principio”. No parece haber diferencia significativa. la Palabra: traducción del término griego lógos, personalizado. También la sabiduría (ampliar aquí sobre el término). estaba junto a Dios: Otros traducen: “en la presencia de Dios”, “en Dios”, “se dirigía a Dios”… La preposición prós con Acusativo suele indicar direccionalidad con verbo de movimiento, pero no es frecuente con verbo de estado. Hemos optado por el sentido de proximidad o relación. (Vg, apud Deum). La misma construcción en 1Jn 2. Saludos cordiales Saludos cordiales
Martes, 26 de Agosto 2014
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Hoy escribe Gonzalo Del Cerro
Homilía VII En pleno debate entre Pedro y Simón, el Mago abandona la escena de la discusión para refugiarse en Beirut. Pedro se quedaba en Sidón dando rienda suelta a sus deberes de evangelización. Siempre con el repetido esquema: conversiones, curaciones, establecimiento de la estructura de una nueva iglesia con el consiguiente nombramiento de un obispo con su colegio de presbíteros. Pedro ponía así fin a su estancia en Sidón y se trasladaba a Beirut. Allí volvía a encontrarse clon Simón y sus estrategias. Terremoto en Beirut La llegada de Pedro a Beirut vino a coincidir con un fuerte terremoto que sembró el pánico en los ciudadanos. La mentalidad de la época no era proclive a interpretar los fenómenos naturales como fruto de la vitalidad de la naturaleza, sino como reacción de los dioses a la conducta desviada de los hombres. Alguien cargaba con la culpa del entuerto. Simón y sus amigos Apión, Anubión, Apolodoro y sus demás compañeros tuvieron la osadía de tachar a Pedro como mago y hechicero. La prueba estaba a la vista y a la comprobación de los ciudadanos de Beirut. Apenas puso Pedro sus pies en la ciudad cuando se desencadenó el terrible movimiento de tierra que llenó de terror a los timoratos ciudadanos. Él era también la causa de enfermedades que proliferaban cuando Pedro estaba presente. La forma de librarse de tamaños estragos no era otro que la huida. La solución estaba en permanecder lo más lejos de Pedro. Nueva huida de Simón y sus colegas Pedro aceptó el reto y dijo a gritos que era en efecto capaz de realizar las acciones que sus enemigos le achacaban. Pero todo lo que sucedía era obra de Dios, que estaba dispuesto a proteger a Pedro y a confirmar sus palabras y sus obras. Podía incluso arrasar la ciudad entera si necesitaba el testimonio del poder de Dios. Pero Dios estaba con él, y con él estaba la bondad divina. Los fieles podían confiar en ella y en la firmeza de la palabra de Pedro. La estrategia de Simón y sus colegas se volvió diametralmente contra ellos. La multitud recurrió a los argumentos más contundentes. Echaron mano de palos y otros argumentos de "convicción". El resultado fue que Simón y sus colegas pusieron pies en polvorosa y desaparecieron de Beirut. El campo queda a merced de Pedro, que realizó curaciones de enfermos y expulsiones de demonios a mansalva. Pedro proclamaba abiertamente que si fuera verdad que tenía poderes especiales, los emplearía no en provocar calamidades, sino en procurar la salvación para todos, incluido Simón. Su vocación era predicar la verdad y sembrarla en el corazón de sus fieles y oyentes. Hubiera tratado de hacer de Simón un amigo con el camino expedito para llegar a la salvación eterna. Pero Simón no estaba bien dispuesto para aceptar los planes de Pedro. La razón era su postura doctrinal y práctica. Simón según el criterio de Pedro En realidad, Simón “es un mago, es un calumniador, es un ministro de la maldad contra los que ignoran la verdad. Por eso, puede provocar enfermedades en los pecadores, porque tiene a los pecadores como colaboradores de su poder contra ellos mismos” (Hom VII 11,2). Pedro, en cambio, presume de ser siervo del Dios que lo ha hecho todo, discípulo del Profeta que está a su derecha. Por eso, siendo su apóstol, dice siempre la verdad. Y de acuerdo con la mentalidad de su auditorio, sus palabras no son un sonido vano, sino que van acompañadas y ratificadas por milagros numerosos, argumento más convincente que la dialéctica para las mentes llanas y sencillas. Pedro el segundo en su teoría de los pares Pedro remata su argumentación presentando la justificación y la razón de su verdad. Decía, en efecto, que sirviendo al príncipe del bien, expulsaba las enfermedades. Pues había sido enviado el segundo. Pedro hace referencia a su doctrina de los pares, de los que Simón, el malo, va el primero, como sucede con la enfermedad que precede a la salud. Detrás sigue Pedro portador del remedio contrfa la enfermedad. Por aquel mago malhechor, dice, al no creer en Dios, enfermasteis; y por mí, si creéis en él, seréis curados. Todo acaba una vez más en la llamada a la conversión. Porque, al tener la experiencia del poderoso príncipe del bien, convertidos a las buenas obras, podrán también los pecadores salvar sus almas. La atención que los ciudadanos de Beirut prestaban a Pedro provocaron nuevamente la huida de Simón, que fue una constante en el debate dialéctico y en la conducta real. De Beirut partió Simón para Biblos, de donde marchó a Trípolis. Pedro seguía a la zaga de las huellas del Mago. Saludos cordiales. Gonzalo Del Cerro
Domingo, 24 de Agosto 2014
Notas
Hoy escribe Antonio Piñero
En primer lugar, adjunto el vínculo para que quien desee pueda acceder al contenido de una entrevista que me hicieron los miembros de la directiva de “Misteriored”: http://www.misteriored.com/index.php/topic,11306.0.html He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: En el Libro de los Hechos cap. 7:20-30 se da alguna informacion que no aparecece en el A. T. sobre la vida de Moises como: - Poderoso en palabras. - El pensaba que sus hnos. sabian que el iba a ser el libertador de ellos. - Que paso 40 años en Madian. Eso especificamente, he estado buscando por todo lado y no encuentro nada, quiero saber si fue sacado de un targm, o viene de una tradicion judia, o algun apocalipsis judio. <!--more--> Respuesta: Es muy difícil de responder. Los especialistas discuten aquí sobre la presunta fuente de Lucas y no están de acuerdo entre sí. Por ejemplo: la elocuencia de Moisés, que yo sepa, no aparece en ninguna fuente antigua que yo conozca. El Antiguo Testamento más bien dice lo contrario (Ex 4,10).En general todo paree una composición de Lucas, basada quizás en la presunta “información de Antioquía” de judíos helenistas, expulsados de Jerusalén por los judíos por sus atrevidas ideas (Hch 6-8). La edad de Moisés y los 40 años en Madián no están en el Antiguo Testamento ni tampoco en los targumim. De lo contrario, los comentaristas lo habrían señalado. Se deduce de que su esposa, Séfora era madianita. Así que en síntesis: creo que no sabemos a ciencia cierta de dónde salen esas ideas. Pregunta: que opinión tiene sobre el evangelio hebreo conocido como "Shem Tov". Respuesta: Es bien conocido que este “evangelio” procede del siglo XIV Este evangelio está dentro de un tratado sefardí escrito en hebreo titulado “Even Bohan”. Fue compilado y completado alrededor del año 1385, por el médico judío Shem Tov Ben Isaac Ben Shaprut, en Tarazona. De ningún modo es un ejemplar de un presunto evangelio de Mateo compuesto originalmente en hebreo, porque el Evangelio de Mateo fue compuesto en griego. Según la tradición de Papías, Mateo, uno de los Doce, fue el primer Evangelista y compuso su historia de Jesús en hebreo (arameo), que cada uno tradujo como pudo. Pero la crítica no acepta esta opinión por dos razones fundamentalmente: • En primer lugar porque el Evangelio de Mateo llegado hasta nuestros días no es una traducción del arameo, sino una obra compuesta originalmente en griego. Recuérdese que Mateo utiliza como base de su escrito a Mc y la “Fuente Q”, ambos en lengua griega. Por tanto, o bien ese “Mateo arameo” se ha perdido, o bien el “Mateo” que poseemos es otro evangelio. • No es posible tampoco que haya sido compuesto por uno de los Doce, pues éste tendría información de primera mano y no seguiría tan extensamente fuentes previas… y en griego. El autor de Mt es un escritor cristiano de segunda generación, puesto que utiliza textos escritos. Por tanto, parece quedar excluido que sea uno de los Doce, el publicano Mateo/Leví, cuya vocación se narra en Mt 9,9. Algunos estudiosos han supuesto que este desconocido autor pertenece a una “escuela de escribas cristianos”, por su modo de manejar las Escrituras y porque se puede ver una alusión al propio autor en la mención al buen “escriba” que saca de su tesoro cosas viejas y nuevas (13,52). Esta suposición, sin embargo, no se puede probar aunque sea atractiva. Por tanto, no se sabe quién es verdaderamente el autor del Evangelio de Mateo. El que la tradición eclesiástica lo haya puesto bajo el nombre de un discípulo de Jesús es sólo un intento de dar autoridad a un evangelio muy querido e importante por su riqueza doctrinal para el buen desarrollo de una Iglesia aún con pocos años. El autor es ciertamente un judío helenizado, pero de tradición palestina (conoce muchas sentencias de Jesús recogidas por la comunidad cristiana palestina), docto en las Escrituras, que vive y compone su evangelio dentro de una comunidad judeocristiana mixta, con mezcla de otros creyentes procedentes del paganismo. Su grupo aún no está separado completamente de la Sinagoga, pero se encuentra en fuerte tensión respecto al judaísmo oficial, el “nuevo”, el que se desarrolla después de la caída de Jerusalén (“judaísmo rabínico”). El Evangelio de Mateo dice expresamente “sus sinagogas” en 4,23 refiriéndose a los judíos, pero se ve que no ha roto sus lazos definitivamente con el judaísmo: hay que seguir pagando la contribución al Templo (17,24-27); aunque el "nuevo Israel" (los cristianos) tenga su código legal propio, este código es al fin y al cabo la antigua Ley más las interpretaciones de Jesús. La ética del Jesús de Mateo se resume en dos formulaciones netamente judías: la "regla de oro" (7,12 = Dt 6,5) y el doble mandato del amor (22,27-40 = Lv 19,18). Su impulso fundamental, la imitación de Dios (5,48), es también muy judío. Tal como se deduce de la escena final de su Evangelio (28,19), este judío cristiano tiene un enorme interés por la tarea misionera de su nueva fe, una misión a todo el mundo ciertamente, pero sobre todo a los judíos a la vez tan cercanos y lejanos, a quienes intenta convencer de que deben ver en Jesús al nuevo Moisés. Pregunta: en el programa "La Otra Realidad", siendo uno de los panelistas invitados el Ufólogo Salvador Freixedo, así como tambien usted Prof. Antonio. En dicho coloquio Salvador F. mencionó la existencia de unos documentos que fueron escritos en la India y que por alguna razon hoy se encuentran en un templo Tibetano. Tales documentos, que según Salvador datan de una fecha anterior a la fecha del evangelio de Marcos, hablan de "San Issa" un Judio que viajó de Israel llegando hasta la India donde se supone que fue influenciado por el Budismo y según algunos se cree que es el mismo Jesucristo. Dentro de su investigación Prof. Antonio ¿Qué datos tiene de la existencia de esos documentos? ¿Existirá algún docuemento en el que se hable de "San Issa" y que tal documento sea "anterior" a los cuatro evangélios canonicos? Respuesta: No existe, ni lo piensa ningún estudioso, ningún documento evangélico anterior a la composición de los evangelios canónicos. Todo eso son leyendas y fábulas. Y lo que tenemos son copias de copias. Lea por favor, y si le es posible el capítulo dedicado a el tema de la trasmisión del texto en mi obra “Guía para entender el Nuevo Testamento” de la edit. Trotta. Pregunta: mi pregunta es si es posible relacionar a los sumerios y los anunaki con yahve y elohim, me refiero a Enlil y Enki, como parte de la misma historia del génesis Respuesta: Naturalmente que sí. Aunque la respuesta debería ser muy matizada porque la historia de las divinidades semitas son distintas de las sumerias. Pero es conocido que la Biblia toma historias míticas sumerias (transmitidas por semitas como acadios y babilonios) que conocieron durante el exilio de Babilonia. El Génesis, como compilación y redacción definitiva es muy tardío: del siglo V a.C. Pregunta: Si Jesús nació el 5 o el 6 a.C., ¿tenemos un calendario equivocado? Respuesta: Sí. En cinco o seis años. El causante fue un monje tracio, residente en Roma, Dionisio el Exiguo, quien por orden del Papa Juan I (finales del siglo V comienzos del VI) estudiaba cronología con la intención de determinar con exactitud la fecha de la Pascua. En esas circunstancias pensó que habría que modificar la manera cómo los cristianos numeraban los años. Hasta el momento lo hacían a partir de la fecha de la fundación de Roma, o bien desde el inicio del gobierno del emperador Diocleciano, a partir del 284 hasta el 313. Pero tal sistema la parecía incorrecto, ya que ese emperador había sido un pagano y un cruel perseguidor de la Iglesia. Decidió entonces cambiar el sistema tomando como “año 1” la fecha del nacimiento de Jesús. Por medio de estudios cronológicos comparativos --el procedimiento usual-- y retrocediendo en el tiempo, el Exiguo fijó la fecha del nacimiento de Jesús en los últimos días del año 753 de la fundación de Roma (el 1 de enero del año 754 sería el primero de la era cristiana: Jesús tendría en ese momento ocho días). Pero éste fue su gran “error”. De acuerdo con la cronología de Herodes el Grande que hemos mencionado anteriormente, este rey murió en el 750 desde la fundación de Roma. Por tanto Jesús debió nacer en el 748 o 749, uno o dos años antes. De aquí los cinco o seis años de diferencia que duran hasta hoy. Saludos cordiales www.antoniopinero.com
Domingo, 24 de Agosto 2014
NotasHoy escribe Antonio Piñero He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: muchos interpretan que en la parabola de las otras ovejas Jesus esta hablando de los gentiles a quienes tambien llegaria su palabra, ¿como lo entiende Ud. en base a sus estudios? Respuesta: Me imagino que se refiere al Evangelio de Juan 10,16. En realidad no sabemos con absoluta exactitud qué quiere decir aquí el Jesús de Juan. Puede referirse a otros gruppos de judeocristianos que no pertenecen al grupo de Juan. Pero lo más probable es que se refiera a los gentiles, que son igualmente hijos de Dios y que están esperando la salvación como los judíos, a tenor de lo que dice el evangelista en 11,51-52: 51 Esto no lo dijo por su propia cuenta, sino que, como era Sumo Sacerdote aquel año, profetizó que Jesús iba a morir por la nación, 52 y no sólo por la nación, sino también para reunir en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos. La nación son los judíos; luego los otros debe de ser los gentiles o paganos, que esperan la proclamación del Mesías. En esto es Juan paulino. Aunque no sólo él. En el mismo sentido puede entenderse Mt 8,11, “Y os digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se pondrán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los Cielos,” y Mc 11,17, “«¿No está escrito: = Mi Casa será llamada Casa de oración para todas las gentes? = ¡Pero vosotros la tenéis hecha una = cueva de bandidos” ,dichos de Jesús reelaborados por la Iglesia en un sentido que no era el de Jesús, pero sí el de sus seguidores paulinos. Pregunta: En su última entrada del blog titulada “Conclusiones: Pablo como autor de cartas dentro del judaísmo de la época del Segundo Templo (526)”, usa – como es habitual, por otro lado – la expresión “Hijo del Hombre”, concretamente cuando dice: “Pablo, como otros seguidores de Jesús, estaba convencido de que el Mesías había venido a la tierra –si no como Hijo del hombre estricto; esto se verá claramente por primera vez en el evangelista Marcos…”. Imagino que “Hijo del hombre” es un apelativo para el Enviado, Mesías, o Cristo, pero ¿de dónde viene ese apelativo?, es decir ¿Por qué “hijo del hombre”? Desde el punto de vista de los creyentes todos somos “Hijos del hombre”, el enviado debería ser en todo caso “Hijo de(l) Dios”, ¿no? Respuesta: “Hijo de hombre” se dice en arameo para designar sencillamente a un ser humano. Y probablemente Jesús lo empleó para designarse modestamente a sí mismo, sin usar el molesto “yo”. Pero Hijo del hombre (ya traducido al griego, que necesita idiomáticamente dos artículos) pasa a ser un título mesiánico tomado de Daniel 7, 11-14: 11 Miré entonces, atraído por el ruido de las grandes cosas que decía el cuerno, y estuve mirando hasta que la bestia fue muerta y su cuerpo destrozado y arrojado a la llama de fuego. 12 A las otras bestias se les quitó el dominio, si bien se les concedió una prolongación de vida durante un tiempo y hora determinados. 13 Yo seguía contemplando en las visiones de la noche: Y he aquí que en las nubes del cielo venía como un Hijo de hombre. Se dirigió hacia el Anciano y fue llevado a su presencia. 14 A él se le dio imperio, honor y reino, y todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieron. Su imperio es un imperio eterno, que nunca pasará, y su reino no será destruido jamás. Los cristianos aplicaron este título a Jesús, aunque es más que probable que él no lo usó como título jamás en su vida pública. Consulte mi obra “Guía para entender el Nuevo Testamento” (Edic. Trotta, Madrid 4ª edic. 2011), y vea el índice de materias. Pregunta: en relacion a la cuestion de que Mateo y Lucas probablemente copian algunos de sus escritos de una supuesta fuente llamada Q , le queria preguntar sobre la posibilidad de que esas coincidencias entre los evangelistas pudiera ser debida a que uno de los dos evangelistas copiara del otro , y en tal caso la supuesta mencionada Fuente Q de dichos de Jesus no haya existido. Respuesta: Desde el principio de la investigación sobre los Evangelios y para resolver el problema de Quién copió de quien entre los evangelistas, Johann Jakob Griesbach (muerto hacia 1810) propuso Mateo fue escrito primero y que los otros dos evangelistas, Lucas y Marcos copiaron y rearreglaron el evangelio de Mateo. Pero tiene muchos problemas. Transcribo, de la Introducción al Nuevo Testamento de R. E. Brown, publicada por Trotta Madrid, en 2002, lo pertinente a este problema SOLUCIONES EN LAS QUE MATEO ES EL PRIMER EVANGELIO, USADO LUEGO POR LUCAS. Esta hipótesis, que se retrotrae hasta Agustín en el siglo IV, es la explicación más antigua. Fue generalmente aceptada por los católicos hasta mediados del siglo XX, y tiene aún hoy abogados respetables (B. C. Butler; J. W. Deardorf; J. Wenham). En esta solución agustiniana el orden canónico es también el orden de dependencia: Mt fue compuesto el primero; Mc abrevió notablemente a Mt, luego vinieron Lc y Jn, y cada uno de ellos se inspiró en sus predecesores. En 1789 J. J. Griesbach propuso una teoría de dependencia, en la cual el orden era Mt, Lc, Mc23. El apoyo más firme de la prioridad mateana es que desde la antigüedad Mt fue considerado el primer evangelio. La mayor dificultad de cualquier hipótesis que otorga la prioridad a Mt es explicar la existencia de Mc. En la hipótesis agustiniana, ¿cuál fue la lógica de Mc al omitir tantísimo material del relato de Mt? La hipótesis de Griesbach intenta resolver esta dificultad colocando a Mc el último, y considerándolo ante todo como un digesto que presenta componentes en los que están de acuerdo Lc y Mt. Sin embargo, ¡Mc omite la doble tradición en la que concuerdan Lc y Mt! El mejor sustento de la tesis de que Lc utilizó a Mt se halla en los pasajes de triple tradición en los que Lc y Mt están de acuerdo en contra de Mc, es decir las llamadas concordancias menores (“minor agreements”). Por ejemplo, cuando los judíos se burlan de Jesús, tanto Mt como Lc presentan con idénticas palabras una pregunta al Nazareno, ausente en Mc: “¿Quién es el que te ha golpeado?”, pregunta que otorga pleno sentido a las dudas sobre el don de profecía de Jesús (Mt 26,68; Lc 22,64; Mc 14,65). Si Lc y Mt escribieron independientemente uno de otro, ¿pudo haber ocurrido tal acuerdo por pura coincidencia? ¿No es más plausible que Lc haya copiado la pregunta de Mt?24. Existen, sin embargo, argumentos importantes contra la dependencia de Lc respecto a Mt (cf. Fitzmyer, Luke I 73-75). Cuando Lc y Mt presentan relatos casi contradictorios, ¿por qué no se esforzó Lc un poco para conciliar tal desacuerdo? Por ejemplo, la narración de la infancia en Lc no sólo difiere enormemente de Mt sino que en algunos detalles es virtualmente irreconciliable con él. Así respecto al hogar de José y María (en Belén, en Mt 2,11 [su casa]; en Nazaret, en Lc 2,7, sin casa en Belén); o respecto a los viajes después del nacimiento de Jesús (a Egipto, en Mt 2,14; a Jerusalén y Nazaret, en Lc 2,22.39). Otro caso: el relato lucano de la muerte de Judas en Hch 1,18-19 es casi irreconciliable con el de Mt 27,3-10. En lo que respecta al orden, si Lc utilizó a Mt, ¿por qué la colocación del material de Q en Lc difiere tan notablemente del de Mt? (a excepción de las palabras de Juan Bautista y la historia de la tentación: cf. la tabla 2, infra). El argumento resulta más constriñente si Lc utilizó también a Mc (tesis agustiniana), puesto que Lc sigue el orden de Mc estrechamente. Otro problema sería la ausencia en Lc de las adiciones de Mt a Mc, p. ej., Mt 3,14-15; 12,5-7; 16,17-19; 21,14-16; 26,52-54. Le recomiendo que lea el libro editado por mí Fuentes del cristianismo, El Almendro, Córdoba, 1993, con reediciones, los capítulos sobre Evangelios , “Fuente Q” y “Quién copió de quién. Pregunta: Tras 200 años de exégesis bíblica más rigurosa, podemos trazar (grosso modo) las líneas maestras de lo que fue la figura de Jesús. Con este cliché en mente, ¿qué rama del extinto judeocristianismo –ebionitas, nazarenos, etc…- se acercó más al pensamiento del rabí de Nazaret?, ¿cuál fue la trayectoria de dicho grupo y qué queda de su legado en los escritos canónicos o apócrifos? Respuesta: Sin duda la representada por los evangelios judeocristianos, que los tiene Usted todos recogidos (los pocos fragmentos que quedan en “Todos los evangelios”, Edaf, Madrid, 2009, creo. Pocos sabemos de la trayectoria exacta porque la mayor parte de estos grupos perecieron por las dos guerras de os judíos contra Roma (66-70; 132-135 d.C. ). La Iglesia paulina, transformada en Gran Iglesia, eliminó los restos de estos evangelios. Sobre la teología del judeocristianismo puede consultar mi Blog de Religiondigital donde he hecho un resumen (utilice el Buscador). Un libro básico es de Jean Daniélou. Teología del judeocristianismo. Datos en Internet. Pregunta: Me gustaría saber su opinión sobre el Evangelio Secreto de Marcos. ¿Es una falsificación? ¿Antigua?, ¿del propio Morton Smith? ¿Hay alguna novedad sobre el documento encontrado en Mar Saba? ¿Han tenido acceso a él otros investigadores? He leído esta rocambolesca historia en un libro de Bart Ehrman ("Cristianismos Perdidos"). Respuesta: El tema de una presunta homosexualidad de Jesús planteado por un “evangelio secreto”, de Marcos, de cuya autenticidad se discute mucho y que aún no es cuestión resuelta. Mi opinión personal es muy negativa. Y la he expresado en un capítulo que dedico a este Evangelio en mi obra “Jesús y las mujeres” reedic. De Edit. Trotta, Madrid, 2014, que rueego xonsullte si tiene posibilidad. Le transcribo una de mis opiniones: “Del pasaje se deduce que Jesús impartía enseñanzas secretas y privadas a ciertas personas –sus discípulos predilectos- que consideraba aptas sobre el contenido profundo del reino de Dios, aunque no se ve por qué hay que interpretar esta iniciación como un bautismo, ni tampoco que en él hubiera una especie de ceremonia secreta de iniciación, para la que se requería una vestimenta especial. Con razón, opina en contrario Reginald Fuller respecto a estas novedades que la enseñanza secreta y la iniciación son sospechosas de anacronismo para el momento histórico de Jesús, pues encajan demasiado bien con la gnosis secreta y mistérica que reinaba en Alejandría a finales del s. II”. Pregunta: La divinización de Jesús, como hecho histórico ha sido rebatido en teoría, pero sus consecuencias son evidentes a muy corto plazo (antes de Pablo) y son fundamento sólido de fe, sin la creencia en esta resucitación Jesús no hubiera trascendido dentro de muchos profetas escatológicos del siglo I, que tiene de diferente Jesús para haber traspasado de la leyenda, del mito a la verosimilitud? Es notorio que la divinización es un hecho asombrosa sobre el cual que no le preguntan mucho. Respuesta: Jesús tiene de diferente que su personalidad, su propia autoestima, sus milagros de sanación y exorcismo, aunque no raros en el Israel de siglo I, sí fueron excepcionales. Se encontró con un grupo de seguidores que los siguieron después de la muerte y sobre todo con la figura, también excepcional de Pablo de Tarso y las iglesias que él fundó. Sobre el tema de la divinización/ apoteosis de Jesús tras su muerte debo decirle que no es tan raro en el siglo I y hay diversos personajes, como Augusto mismo que tuvieron este proceso. La apologética cristiana posterior ha magnificado este proceso. Sobre el tema he escrito largamente en la obra ya entregada a Trotta, “Guía para entender a Pablo de Tarso. Una interpretación del paulino”, que aparecerá, Deo favente en el primer trimestre del 2015. Ahí podrá leer sobre el tema largo y tendido. Le ruego un poco de paciencia. Un adelanto he enviado a la revista Arys, de la Univ. de Sevilla, pero no sé si ha salido aún. Sospecho que no. Pregunta: que libro suyo explica ese tema de la fecha del nacimiento de Jesús , para recomendarlo si fuera tan amable. Respuesta: Hay dos: • "Año Uno. Israel y su mundo cuando nació Jesús". Editorial Laberinto, Madrid, 2009 • "Ciudadano Jesús". Edit. Atanor. Madrid, 2012 Pregunta: quiero corroborar esta información, dígame por favor si es correcta o no: cuando en Marcos 11:2, Jesús ordena buscar un burro que nunca ha sido montado, el evangelista está dando cumplimiento a la versión griega de Zacarías 9:9, pero el texto hebreo de Zacarías 9:9 (en el cual se basa mi Biblia de Jerusalén) no dice que el burro no haya sido montado nunca. Me encuentro con este dato en algunos comentaristas, pero quiero corroborar. ¿Es correcta esta información? Respuesta: Le copio el comentario de Joel Marcus al respecto (El Evangelio según Marcos vol. II 8-16; Edit. Sígueme, Salamanca, 2011, p. 888; este libro ha sido traducido por mí): al que nadie ha montado todavía [eph’ hon oudeis oupō anthrōpōn ekathisen]. Es ésta otra de las negaciones dobles características de Marcos (cf. el índice temático “Expresiones/afirmaciones dobles” y “Doble negativa”). Strauss trae a colación muy a propósito Lc 23, 53 y Jn 19, 41, textos en los que Jesús tiene el honor de ser colocado en una tumba no ocupada antes por nadie. Además, el motivo del pollino aún no montado puede ser parte de las imágenes reales de nuestro pasaje; cf. m. Sanh. 2, 5, que estipula que nadie podrá montar posteriormente un animal sobre el que ha cabalgado un rey . Más concretamente, nuestro pasaje utiliza Zac 9, 9 (cf. nota a “pollino” supra), que imagina al rey davídico que entra en Jerusalén sobre “un pollino nuevo”. Algunos exegetas posteriores de este pasaje pudieron preguntarse cómo un hombre adulto podría montar un pollino nuevo (nacido hacía poco) sin que el animal se derrumbara bajo su peso; nuestro texto puede responder que el pollino es “nuevo” no en el sentido de ser casi un recién nacido, sino en el de no haber sido montado nunca. Pregunta: • Sobre la glosa (Mateo 28. 19) yo me he enterado que el Dr. George Howard tradujo una copia del Evangelio Hebreo de Mateo de "Shem Tov", en la traducción el descubre que no hubo tal idea trinitaria. Ahora bien, no se que tan cierta sea esta investigación, ni tampoco se si realmente existe el evangelio hebreo de "Shem Tov". Muchas Gracias Catedrático Antonio Piñero. Hasta Luego. • jueves • 21/08/2014 18:49 Kilmer Funes R Traigo una pequeña comparación entre dos versiculos que son considerados como parecidos y que tendrían la idea trinitaria: • 21/08/2014 19:02 Kilmer Funes R De referencia uso la Biblia Jerusalén (Mateo 28. 19) ||Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo|| (2Corintios 13. 13) ||La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros|| Las observaciones que hago de lo anterior son primero que Pablo apóstol usa la palabra DIOS en vez de PADRE como lo hace Mateo, y segundo Pablo cambia el orden de (Padre, Hijo y ES) pot (Jesucristo, Dios y ES). ¿Porqué Pablo usa la palabra Dios en vez de Padrer tal y como lo hizo Mateo? ¿Pablo fue trinitario? Respuesta: La pregunta está mal planteada. Pablo escribió primero y Mateo mucho después y conociendo a p. He dicho que este v. es probablemente glosa. Pablo no fue trinitario. Es imposible si es que fue siempre un judío observante, como asegura la investigación independiente hoy de modo casi unánime. Pregunta: 1) Por lo que se refiere a la fecha tradicional del nacimiento de Jesús (25 de diciembre), querría saber qué opina usted de la explicación que propone Hans J. Hillebrand en la Encyclopædia Britannica, a saber que el que se haya escogido el 25 de diciembre para hacer olvidar a la gente del dios pagano tiene la dificultad, según él, que de esa manera la Iglesia cristiana de aquellos tiempos mostraría superficialidad cuando, en realidad, ella iba con mucho cuidado para distinguirse de las creencias y prácticas paganas.Aquí hay el vínculo del artículo de Hillebrand: http://www.britannica.com/EBchecked/topic/115686/Christmas Respuesta: Pudo ser frívola. Pero probablemente fue así. La iglesia institucionalizada, como todas las sociedades, se convierten en instrumentos de poder Pregunta: • Inicio de la conversación jueves 2) ¿En qué sentido afirma usted (en una entrevista que ya no logro encontrar: en youtube el vídeo resulta no ser disponible, así que cito de memoria) que el autor del cuarto evangelio «resulta más judío que nadie, su lengua es judía»? ¿Me podría aclarar en qué sentido ha de considerarse judía la lengua de un autor que escribe directamente en griego, un griego sin ningún substrato semítico? Respuesta: Tenemos mil modos de saber cuándo un inglés escribe en un mal español, sin necesidad de copiar de texto alguno. Igual con Juan y con su griego, que es típico de un hablante arameo, pero que escribe en griego. Su “vida de Jesús” = IV Evangelio es una reflexión sobre Jesús y el material de los Evangelios Sinópticos a base sobre todo del Antiguo Testamento y del método midrásico = comentario judío de las Escrituras alegorizadas y espiritualizadas en ocasiones. Saludos cordiales Antonio Piñero
Sábado, 23 de Agosto 2014
NotasHoy escribe Antonio Piñero Estamos llegando al final de nuestro amplio comentario a la tesis de Gabriele Boccaccini, de la Universidad de Michigan, “Las tres vías de salvación de Pablo, el judío”, expuestas en el congreso de Roma, “Re-Reading Paul as a Second-Temple Jewish Author, Third Nangeroni Meeting, Roma 22-26 de junio 2014. Para rematar este comentario haremos una suerte de síntesis (incompleta, desde luego) de las ideas principales y obtendremos algunas conclusiones. Según Boccaccini, Pablo, como buen judío apocalíptico, asume en gran parte la concepción propia de muchos judíos piadosos de su tiempo del origen remoto y último del mal en el mundo, a saber el origen es suprahumano y radica en el influjo de las fuerzas del mal, lideradas por Satán. Pablo, por otra parte, respetaba el concepto de la libertad humana (como los esenios, incluso) a pesar de que era predeterminista tanto Pablo como esenios): consideraba a los hombres responsables de sus acciones perversas, pero a la vez como víctimas de ese Mal suprahumano. Por ello el hombre está necesitado de una ayuda divina para oponerse y vencer al poder del Maligno. Pablo, como otros seguidores de Jesús, estaba convencido de que el Mesías había venido a la tierra –si no como Hijo del hombre estricto; esto se verá claramente por primera vez en el evangelista Marcos; sí como una figura semiceleste, semidivina a la vez que humana, transportada por nubes = transporte celeste/divino en el Antiguo Testamento-- para lograr la reconciliación de la humanidad con su Dios por medio del perdón divino de los pecados cometidos hasta el momento. Y no solo los de los judíos (en principio el Mesías es para los judíos) sino los de todos los gentiles, puesto que para Pablo el mesías judío es el redentor universal. Por eso, y para que se cumpliera la promesa total de Dios a Abrahán, que además de elección (“pueblo elegido”) y tierra (se le otorgará la tierra de Israel), conllevaba una tercera parte que era la admisión de los gentiles como hijos adoptivos de Abrahán (“Te haré padre de numerosos pueblos: Gn 17,5), Pablo se dirige a los gentiles. Pero al contrario que otros seguidores de Jesús (recuérdese el incidente de Antioquía: gentiles como posibles impuros; mesas aparte para judíos creyentes y gentiles creyentes), Pablo sostenía que los gentiles bautizados en el nombre del Mesías (y por tanto bajo el poder y domino del mesías) no tenían ese estado casi congénito de impureza ritual y no era inferiores a los judíos en cuanto a la salvación, una vez bautizados. Tanto los judíos como los gentiles habían sido pecadores y los dos grupos habían alcanzado la justificación ante Dios (es decir la declaración de estar limpio de pecado y por tanto amigo de Dios) por medio del acto de fe en el Mesías. Pero también sabemos que esta igualdad cristológica (= en el cristo o mesías) no implicaba la distinción sociológica –y de ciertas ventajas de trato con la divinidad de los judíos (Rom 9,4)-- porque para eso habían sido escogidos como pueblo predilecto. Esas distinciones sociales iban a durar, de cualquier forma, muy poco tiempo porque el final del mundo era inminente. Como judío de la época del Segundo Templo, Pablo jamás cuestionó la validez salvífica de la Ley completa para los judíos convertidos a la fe del Mesías (y por tanto para él mismo). Si defendió a capa y espada, aun con riesgo físico de su vida, que había ciertas partes de la Ley (circuncisión, pureza ritual, alimentos) que sólo estaban dirigidas al pueblo elegido, miembros naturales de la alianza de Dios con Abrahán, su padre físico, y que por tanto los gentiles –que al convertirse en al Mesías y bautizarse no se hacen judíos-- no tenían por qué cumplirlas. Desgraciadamente para nosotros esta idea básica paulina no ha quedado clara por circunstancias históricas. Las cartas de Pablo iban dirigidas fundamentalmente a los gentiles conversos y sólo indirectamente a los judíos conversos. De ahí que –pensando solamente en los gentiles-- (sobre todo, Gálatas y Romanos) escribiera el Apóstol aparentes barbaridades sobre la Ley, que iban referidas a los gentiles, insisto, y sólo a esa parte de la Ley que no afectaba los gentiles. Precisamente por eso podía escribir a la vez Pablo que la Ley era buena justa y santa (Romanos 7,12: “Así que, la Ley es santa, y santo el precepto, y justo y bueno”). Pablo fue toda su vida un judío observante de la Ley (a pesar de textos como 1 Cor 9,19-23 y Flp 3,8-9, pasajes necesitados de una exégesis que tenga en cuenta todo el conjunto del pensamiento de Pablo y su encardinación en el judaísmo) y jamás cuestionó la validez de la Ley en general. Jamás enseñó que los judíos abandonaran la Ley después de creer en el Mesías (1 Cor 7,18-20), ni tampoco hay texto alguno de sus cartas (aparte de la malévola insinuación por parte de ciertos judíos recogida en Hch 21,21) que diga que los hijos recién nacidos de los judíos conversos no debían ser circuncidados. Nada hay de esa falta de validez de la Ley en general y completa como instrumento divino para la salvación en Pablo respecto a los judíos conversos al Mesías. Lo que sí hay en Pablo es, y expresado bien claro, una idea de la apocalíptica judía que afirmaba que todos, absolutamente todos, eran pecadores y que en el Juicio serían juzgados por sus obras. Incluso afirma que los gentiles serán juzgados en el Juicio Final según esa parte de la ley de Moisés (el Decálogo grabado en sus conciencias) que les hace conoce a Dios, a honrarlo y cumplir sus mandamientos básicos (Rom 2, 12-16). La humanidad estaba, pues, dividida entre pecadores y no pecadores. Y aparte de las precisiones sobre la Ley, el mensaje fundamental paulino para los gentiles, a saber la adoración del Dios único, la aceptación del Mesías y de la cruz, la ley del amor, y el perdón universal eran una parte del mensaje de Pablo que él predicaba a los gentiles…, ciertamente, pero que era válido también para los judíos. Antes he prevenido al lector del peligro de hacer universal el mensaje de Pablo respecto a ciertas partes de la Ley: no son mensajes universales (que incluyan a los judíos) los ataques a la Ley y una teología judía fanática basada en las obras de la Ley específica (circuncisión, pureza ritual, alimentos), sino que son solo válidos para los gentiles, la otra parte de una humanidad, no para los judíos conversos. Pero a la vez, insisto en que no se obtenga la errada conclusión (propia de algunos exegetas modernos) de que muchísimas cosas que Pablo predica a los gentiles, que no atañen a la circuncisión, la pureza y las normas de los alimentos, no van dirigidas a los judíos. Sí van y son válidas también para ellos. Hay que repetir una y mil veces que, salvo las distinciones sobre las leyes de la pureza, alimentos y circuncisión, etc., el evangelio de Pablo dirigido a los gentiles y el evangelio de Pedro, dirigido a los judíos, era el mismo, como dice el Apóstol en Gálatas 2,7. Dijimos que Pablo era muy pesimista sobre el poder del Mal sobre los humanos. Todos están esclavizados por el pecado, pero hay algunos que atienden a la proclamación, y otros, no. Esos que escuchan, y obedecen (“la obediencia de la fe: Rom 1,5) la palabra sobre el Mesías serán los que se salven, sean o no judíos. Decir que los judíos ya tenían la Ley, y que tenían igualmente la remisión de los pecados por medio del cumplimiento de esa Ley y sostener por ello que en realidad no necesitaban del Mesías, sino que este había venido en el fin del mundo para perdonar solo los pecados de los gentiles no es el pensamiento de Pablo, sino una gran distorsión de él. En el fondo, lo que piensa Pablo es que el Mesías no es para los gentiles propiamente, sino para los pecadores, ya sean judíos o gentiles. Pablo sabe que los judíos que cumplan la Ley y los paganos que observen la ley natural, se salvarán, aunque no hayan podido conocer al Mesías y la proclamación sobre él. Gran parte del mensaje paulino, válido para judíos y paganos, es que en la hora del final, tanto a los judíos como a los gentiles, el Mesías les ofrece la posibilidad de ser salvos, por el evento de la cruz, que hace que Dios mire hacia otro lado (Romanos 3,25), que deje un tanto de lado su Justicia y que haga actuar sobre todo la Misericordia, inducido a ello por la obediencia de su Mesías hasta la muerte en cruz. Por tanto, la posición de Pablo no se entiende bien por la interpretación que es doctrina luterana usual, al menos cuando se afirma que esta exige creer que la justificación es solo por la fe y que en el juicio no vale más que la fe y no las “obras”. Si se entiende así, hay que decir que esto no lo enseñó Pablo nunca. Lo que sí dice el Apóstol es que por la fe en el Mesías, a saber y en concreto, en el evento de la cruz como perdonador de los pecados del pasado, se justifica todo ser humano, sea judío o gentil. Pero luego —sostiene Pablo-- ha de seguir una vida de obras, de obras buenas, pues la ley del amor del Mesías (Gál 6, 2) exige una vida de fidelidad absoluta a las normas de esa ley mesiánica. Para los judíos esa fidelidad incluirá el seguir cumpliendo íntegra la ley de Moisés, pero interpretada a la luz y con la óptica del Mesías. Para el gentil converso consistirá en cumplir la parte de la Ley que le corresponde y practicar todas las buenas obras que le enseña su conciencia y la ley del Mesías. Así que Pablo --concluimos en esto Boccaccini y yo mismo--, no enseñó que había como “dos vías de salvación”, sino “tres vías de salvación”: • La primera para los judíos piadosos, justos, observantes de la Ley que no habían podido creer en Jesús como Mesías porque no lo habían conocido o habían vivido antes de su venida. • La segunda: para los gentiles piadosos, justos, observantes de la Ley en cuanto ley natural que no habían podido creer en Jesús como Mesías porque no lo habían conocido, o habían vivido antes de su venida. • La tercera: la de los judíos pecadores y los gentiles igualmente pecadores, que están en la era mesiánica, que han sabido de la venida del Mesías y que lo han aceptado (que no son muchos), que saben que estaban bajo el poder del Mal y del Pecado, (así, personificados, como lo entiende a veces Pablo), pero que son perdonados de sus faltas pasadas por la Misericordia divina por un Dios, que movido aún más a la misericordia por el evento de la cruz, mira hacia otro lado y perdona los pecados pasados. Gracias al Mesías y a la cruz, ya no están ni judíos ni gentiles, sin escapatoria apenas, bajo el poder del Mal, sino que saben que el Mesías ha acabado en principio con el poder del Mal, del Pecado y de la Muerte y los ha hecho merecedores de la vida en el paraíso, “siempre con el Señor” (1 Tes 4,17). Saludos cordiales de Antonio Piñero Universidad Complutense de Madrid www.antoniopinero.com
Viernes, 22 de Agosto 2014
NotasHoy escribe Antonio Piñero He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: quisiera saber donde puedo encontrar el apocalipsis de Moises??? Respuesta: El “Apocalipsis de Moisés” es un nombre poco usual de un apócrifo del Antiguo Testamento conocido científicamente como “Jubileos”. Puede encontrarlo en el vol. II de la colección ATT = Apócrifos del Antiguo Testamento, de la Editorial Cristiandad, Madrid, 1983, pp. 67-193. Es la única edición científica hecha en España. Está traducida y editada, con introducción y notas por Federico Corriente y por mí mismo. Copio de mi Introducción, pp. 67-68 (se trata de un escaneo + OCR): El Libro de los Jubileos es una de las más importantes obras pseudo epigráficas del Antiguo Testamento, tanto por su extensión relativa como por su coherente contenido. Su último editor, R. H. Charles 1, lo describía apropiadamente como un comentario haggádico al Génesis, del que es en general paralelo, pero del que a menudo discrepa con interesantes adi ciones y casi siempre motivadas omisiones. Le movía a ello, además, el rasgo, muy propio de este tipo de obras, de presentarse como una reve lación -efectuada por encargo divino y en primera persona por un ángel «de la faz», o «divina presencia»- a Moisés en el monte Sinaí. Aquél le hace depositario de las tablas de la Ley y, a la vez, de profecías com pletas sobre las gracias y desgracias que alcanzarían a Israel, pueblo ele gido pero a menudo prevaricador, hasta el triunfo final de la ley, según un plan eterno. Así pasan ante los ojos del lector la creación, las vicisi tudes de las primeras generaciones humanas sobre la tierra, con la pro gresiva caída del género humano, salvo algunos de sus miembros, en la iniquidad y sus dolorosas consecuencias. Sin embargo, Abrahán, poste riormente, restaura el verdadero culto divino y lo transmite entre sus descendientes, protegido en adelante por una celosa observancia de la ley, basada tanto en un ritual pormenorizado de acciones (festividades y sa crificios) y omisiones (descanso sabático, prohibiciones rituales y de co mercio con gentiles, prohibición de matrimonios mixtos) como en el sometimiento más estricto a un calendario sabático. Es éste el verdadero eje cosmogónico de un judaísmo articulado así, en oposición a cualquier otro sistema cronológico . Precisamente esta articulación ha dado su nombre al libro, donde todos los acontecimientos se gobiernan por su ocurrencia y se expresan en fechas de semanas, septenarios y jubileos, es decir, semanas de días, semanas de años y semanas de semanas de años. Il. TITULO. AUTOR. FECHA DE COMPOSICION. UNIDAD. FUENTES El Libro de los Jubileos ha recibido también otras denominaciones 2, fácilmente explicables por su contenido, como la de «Pequeño Génesis» 1 Cf. bibliografía, ediciones . 2 Charles (1927), p. XVI. «Apocalipsis de Moisés», «Testamento de Moisés», «Libro de las Hijas de Adán» 3 y «Vida de Adán» 4, a las que hay que añadir, por supuesto, la de la versión etiópica, Mashafa Kufale, «Libro de la distribución (de los días de la ley ..., etc.)», que podría muy bien ser la original. Pregunta: Cual es la fecha más probable del nacimiento de Jesús de Nazareth, la primera navidad o natividad histórica verdadera, según las investigaciones históricas-científicas más recientes, completas y confiables?? Respuesta: Jesús no nació probablemente Jesús el 25 de diciembre. No es probable, porque el Evangelio de Lucas (2,8) implica que cuando nació Jesús los pastores guardaban sus rebaños al raso, algo implausible en diciembre. Dionisio el Exiguo aceptó como fecha de nacimiento de Jesús el 25 de diciembre, fiándose de una tradición ya consolidada en su época. El monje ignoraba (¿?) quizás que tal fecha había sido establecida artificialmente por la Iglesia tan sólo un par de siglos antes, de modo que el nacimiento de Cristo se superpusiera a la fiesta del Sol invicto. Así se obligaba a las gentes, recién convertidas del paganismo, a olvidarse del dios pagano y a celebrar en ese día el nacimiento de Jesús. La opinión de que así tal fiesta se superponía a la del nacimiento del dios Mitra en ese día es falsa. Ni un solo texto de la Antigüedad sostiene que el dios Mitra había nacido el 25 de diciembre. Pregunta: Usted ha dicho> "La fórmula trinitaria probablemente es un AÑADIDO posterior. Quizás de inicios del siglo II" Entonces mi pregunta es ¿Por qué existe la probabilidad de que la formula trinitaria sea un añadido? Respuesta: Porque en la fecha probable en la que se compuso el Evangelio de Mateo, hacia el 85/90 d.C., no existía ninguna conciencia trinitaria entre los grupos cristianos. Sabemos, por otra parte, que se muy probablemente se hizo una edición de los evangelios a finales del siglo II. En ese tiempo es probable que sí existiera esa idea trinitaria. Por ello esa posible glosa aparece en todos los manuscritos de Mateo que poseemos. Saludos cordiales de Antonio Piñero
Jueves, 21 de Agosto 2014
NotasHoy escribe Antonio Piñero He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: Hace tiempo vi un programa de televisión donde una persona decia que si la prueba del carbono 14 en la Sabana Santa mostraba una fecha mas reciente, podría deberse a la sangre humana. Que cuando databan vasijas que contuvieron ese elemento durante los sacrificios prehispánicos, alteraban las fechas. ¿Podría ser posible? Un saludo, Respuesta: Le confieso que no soy un experto, ni mucho menos, del carbono 14. Utilizo los datos que me ofrecen técnicos solventes. Estimo, sin embargo, que es posible esa alteración, debido a material orgánico humano. Pero, me imagino que los técnicos en su informe indicarán cuándo hay también ese material. Pregunta: Qué opina sobre la reencarnación Respuesta: A pesar del texto de Orígenes, Sobre os principios, Libro III, cap. 5, que defiende la reencarnación, opino que esta doctrina nunca fue mayoritariamente cristiana. Recomiendo el libro, muy amplio y documentado, compuesto por gente de mi Departamento de griego y de Hebreo de la Facultad de Filología, Universidad Complutense de Madrid, “Reencarnación”, Editorial Abada, Madrid, 2012 (editores Alberto Bernabé – Kahle –Santamaría). Ahí está todo, y en todas las religiones importantes. Pregunta: El evangelio de los esenios el cual fue publicado por el filólogo Edmond Bordeux szekely y q es considerado un evangelio apócrifo, de q fecha es su origen ? o cual es la historia detrás de eso, donde encontró el manuscrito . Respuesta: Es un evangelio que no vale nada históricamente, totalmente apócrifo y fantasioso. Por ello, no me he preocupado de sus orígenes y fuentes. Sencillamente, debo confesar que no me interesa. Pregunta: ¿Le resulta que en algún Evangelio Apócrifo –ya que seguramente no resulta en los canónicos– Cristo se compare, gritando, a un escarabajo? Así se narra en una novela (Drood) del escritor americano Dan Simmons, aunque el personaje no dice dónde Cristo se calificaría a sí mismo de escarabajo. Le facilito el pasaje en su lengua original: “But the scarab, not your man-god Christ, is the ‘only begotten,’ Misster Wilkie Collinsss, sir, even though your people’s pretender god once cried out, ‘But I am a scarab, and no man,’ in envy of the true Khepri.” Respuesta: No tengo la menor idea de este asunto. Debe de ser fantasía personal del autor. He editado todos los evangelios apócrifos en mi obra, como traductor y sobre todo editor, "Todos los Evangelios" (son unos 83 evangelios desde el siglo I al IX aproximadamente), Editorial EDAF, Madrid 2010, con diversas reediciones. Pregunta: ¿En que medida influyó la guerra judía de los años 65-70 y la destrucción del templo en el nacimiento del cristianismo como una religión independiente y distinta del judaismo? ¿porqué? Respuesta: Realmente es esta una pregunta importante. Influyó y mucho, aunque el proceso de la independencia no comienza en serio hasta finales del siglo II o comienzos del siglo III cuando el original grupo cristiano pasa de ser una secta judía a una religión propiamente tal. Aun así hoy día los investigadores opinan que el proceso de separación definitiva del judaísmo y del cristianismo no se dio hasta el siglo V después de que a consolidar totalmente la doctrina sobre la Trinidad. Y ¿por qué? Creo que por razones variadas. En primer lugar porque la caída de Jerusalén y de Templo validaba una profecía de Jesús acerca de que el santuario sería destruido. Espíritu significaba para los seguidores de Jesús que los judíos increyentes empezaban a recibir su merecido. Segundo, porque se consolidaba la idea de que Jesús había mucho más que un mero hombre, lo que parecía blasfemo para muchos judíos no apocalípticos. Tercero. Porque se interpretaron las cartas de Pablo y sus ideas acerca de que la ley de Moisés, en su parte específica sobre la circuncisión, las normas sobre la pureza y las leyes sobre los alimentos, que iban referidas a los paganos que se convertían a la fe en el Mesías, y solo a ellos, como algo que era también válido para todos los judíos. Con ello comenzaba a pervertirse el sentido de la teología de Pablo convirtiendo en dogma universal que la ley de Moisés dejaba de tener valor salvífico incluso para los judíos, aunque el pensamiento del Apóstol no era ese: una parte de la ley de Moisés no era válida para los paganos conversos, porque al convertirse no se hacían judíos. Pero para los judíos creyentes en el Mesías, la ley de Moisés, según Pablo, seguía siendo absolutamente válida (lo mismo que para el evangelio de Mateo: 5,17-19. Estas y otras razones, que explico en mi obra “Guía para entender a Pablo. Una interpretación del pensamiento paulino (que aparecerá en Trotta el año que viene Deo favente) hicieron que la primitiva seta judía de los nazarenos se fuera haciendo poco a poco, tras la caída de Jerusalén y su Templo, verdaderamente cristiana en el sentido moderno de la palabra. Pregunta: ¿Se equivocó el evangelista Lucas al fechar el “censo de Quirino” que es el dato que el evangelista usa para datar el nacimiento de Jesús? Respuesta: Probabilísimamente sí. Los anales del Imperio Romano no han conservado ninguna noticia de este censo universal durante el reinado de Augusto, lo cual lo hace muy improbable. Lucas dice que tal cómputo ocurrió siendo gobernador de Siria Quirino y que a la vez que eran los tiempos del rey Herodes el Grande. Ahora bien, la situación que resulta de esta doble afirmación es inverosímil. ¿Cómo iba a permitir este monarca de Israel, en sí independiente, que un legado de Augusto hiciera un censo en su territorio? El único padrón que se llevó a cabo fue precisamente cuando muerto Herodes el Grande, Arquelao, su hijo, fue depuesto por Augusto y Judea pasó a ser provincia imperial romana. Entonces hubo necesidad de censar a la gente para que pagara sus impuestos a los nuevos amos. Ello ocurrió efectivamente en el 6/7 d.C., y el tal censo fue llevado a cabo por Quirino. Por tanto, ¡unos diez años después del nacimiento de Jesús, no en el mismo año! Además, la razón dada por el evangelista (necesidad de que José se tras¬¬ladara a Belén, al lugar de donde procedía la familia, es decir un censo tribal) es también inverosímil. Porque un empadronamiento tenía motivos fundamental¬mente impositivos, de pagos a la hacienda imperial. Cada uno debía censarse y pagar sus tasas allí precisamente donde residía, no en donde era oriunda su familia; tal sistema hubiese sido un enorme caos en nada deseado por los romanos. Por tanto, parece que Jesús no nació durante los años en los que Quirino fue gobernador de Siria, sino antes. Saludos cordiales de Antonio Piñero Universidad Complutense de Madrid www.antoniopinero.com
Miércoles, 20 de Agosto 2014
Notas
Hoy escribe Antonio Piñero
He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: Hola, me gustaría saber que parábolas o frases de Jesús tienen mayor peso histórico o están mejor documentadas ¿Estarían dentro de estas los sermones del monte? ¿cuál de sus libros me recomendaría sobre este tema? Muchas gracias. Respuesta: Es en verdad una pregunta muy difícil de responder, porque las parábolas son muchas y variadas. Los estudiosos suelen defender que las parábolas como tal provienen en general del Jesús histórico y que las alegorías son una recreación de la Iglesia primitiva. Normalmente esta Iglesia intentó alegorizar las parábolas para que, al entenderlas no sólo como comparación sino ante todo como símbolos, se les pudiera sacar más partido al interpretarlas. Desde que se extendió el Evangelio de Marcos, que explica alegóricamente la parábola del sembrador (Mc 4,13-20: tales aclaraciones no son probablemente palabras del Jesús históricos, sino explicaciones del evangelista) se hizo común en la Gran Iglesia interpretar las parábolas no como comparaciones, sino como alegorías. En líneas generales, puede decirse que casi todas las parábolas provienen en su base del Jesús histórico. Pero no siempre en el modo en el que aparecen en la tradición escrita evangélica. Una cosa fue lo que dijo exactamente Jesús en sus parábolas, y otra que, en la tradición oral que vino después, las parábolas fueran leve o crasamente modificadas por la Iglesia, por ejemplo, convirtiéndolas en alegorías y cambiando el contexto vital en el que fueron pronunciadas. Ejemplos de ello son las posibles comparaciones primitivas de Jesús, que se han perdido, y las que aparecen en el Cuarto Evangelio como el “Buen Pastor” (Jn 10,1) y “Jesús igual a una vid, y los discípulos igual a los sarmientos” (Jn 15,1), que contienen elementos alegóricos secundarios. El lector atento caerá en la cuenta de que son ideas del evangelista que se mezclan con una posible parábola de Jesús. Y al revés: de una parábola pudo surgir una historia inventada. Ejemplo: de una parábola perdida sobre un árbol malo que al final se seca pudo surgir la historia de la higuera maldecida por Jesús que se secó porque no tenía higos…, cuando no era tiempo de tales frutos (Mc 11,13). Otro caso: el de la mujer pobrísima que dio como limosna al Templo todo lo que tenía para vivir (Mc 12,44). Que esta última es una historia inventada se ve claro porque, según sabemos nadie estaba sentado en el Templo (¡era una descortesía para con Dios!); los “cepillos” de las limosnas estaban al parecer colocados de otro modo; desde lejos, Jesús no podía saber que la mujer pobre echaba exactamente esas monedas, y que era todo lo que tenía. Pregunta: Quisiera si es tan amable, que me recomendara literatura, respecto a el origen de satan(as) (Judaísmo)y evolución de éste (al cristianismo)y su relación con otras religiones (egipcias, griegas, romanas y otras). Gracias Respuesta: Lo mejor para empezar y no complicarse la vida con monografías muy especializadas es ir a un buen diccionario de la Biblia o de Teología y buscar el lema o voz “Satanás”. Allí encontrará todas las indicaciones necesarias. Y ¿dónde encontrar estos diccionarios? Normalmente en las bibliotecas de las Facultades de Teología o en las de los Seminarios Diocesanos o en las de las instituciones eclesiásticas más cercanas, por ejemplo, parroquias, etc. Pregunta: ¿En qué fecha nació Jesús? Respuesta: Según los evangelios de Mateo y Lucas, Jesús nació en los días de Herodes el Grande. Pero el segundo precisa que el Nazareno vio la luz justamente en el año en el que el emperador Augusto había ordenado un censo universal, cuando era gobernador de Siria un tal Quirino (Lucas 2,1-6). Por lo que sabemos a través del historiador Flavio Josefo, Quirino sólo llegó a esa provincia hacia el año 6/7 de nuestra era, realizando entonces un censo. Por otro lado, la cronología de la historia antigua nos enseña que Herodes el Grande murió en el año 27 del principado de César Augusto, es decir el 4 a.C. Si a estos cuatro años antes de nuestra era añadimos uno o dos --los que se dice que Jesús vivió en Belén antes de la matanza de los inocentes--, tenemos que Jesús nació en el año 6 o 5 antes de nuestra era.. Así, entre las noticias de Mateo sobre las crueles actuaciones de Herodes y el cómputo de Lucas ¡hay una diferencia de más de diez años! ¿Dónde está la verdad? Probablemente Mateo se acerque más a ella, porque los datos sobre el censo que aporta Lucas son más que sospechosos. Pregunta: ¿Que aspectos me podria mencionar que servirian para decir que Ireneo de Lion no fue un Invento de los contemporanos del siglo IV? ¿Que documentos originales existen de él? y si los hay ¿dónde estan? Respuesta: Me quedo sorprendido por su pregunta. No conozco ningún científico serio a quien se le haya ocurrido semejante idea. Y más que hacerle una larga y onerosa lista del estado de la investigación sobre Ireneo, yo le agradecería que consultar una buena Enciclopedia general, científica o histórica, y le dirá muchísimo sobre Ireneo, sus obras e ideas principales. Por ejemplo, consulte la “Patrología”, de Johannes Quasten publicada hace muchos años pro al B.A.C. y muchas veces reeditadas. Tiene también el primer volumen de Los gnósticos de José Montserrat (Editorial Gredos) que le ilustrará mucho. 19 de agosto 2014 Pregunta: Dos preguntas ¿Cúàndo aparecerá su prometido libro sobre Pablo de Tarso? Juicio final: no todos los evangelistas esperan el Jujicio Final. Concretamente Lucas no coincide con Mateo, sobe todo si leemos el Códice Beza. Respuesta: El libro sobre Pablo esta ya entregado a la Editorial Trotta. Pero, como ha sallido la reedición de “Jesús y las mujeres” en la misma editorial en junio 2014, no quieren cansar al mercado. Tienen previsto que salga en el primer trimestre del 2015. Es cierto lo que Usted dice. Pero la doctrina de la Iglesia es sincrética: va tomando de un evangelista o de otro y forma un canon o regla de la fe. Esa empieza a formarse pronto en las iglesias paulinas, como dice el Pseudo Pablo a Timoteo: “Custodia el depósito” (1 Tim 6,20) y luego se va conformando a lo largo de los siglos con la Tradición. Son dos fuentes de la revelación, según la teología católica, no una: la Biblia y la Tradición. Las declaraciones conciliares hacen el resto a lo largo de los siglos. El compendio de la fe católica está no sólo en el Catecismo, sino más ampliado en el Denzinger, Encheridion Symbolorum. Pregunta: Nuevamente soy yo, Daniel de México, le tenía un par de preguntas, ya que después de leer su acotación a las preguntas que publicó el día de hoy lunes, me surgieron algunas. Con respecto a las parábolas que Jesús empleaba para enseñar, son de él?, es decir, el comenzó a utilizarlas o son propias de la época? se tiene registro de que otros personajes contemporáneos a él, las utilizaran? Concretamente, el empleo de la oración del Padre Nuestro, por parte de Jesús, ¿se tiene algún registro o que cree usted que le sirvió para crear una oración así?, ¿es la original o con el tiempo pudo ser modificada o tergiversada? Respuesta: Las parábolas de Jesús son las primeras que se recogen en documentos en el judaísmo de la época del Segundo Templo (después del exilio de Babilonia hasta el 70 d.C.). Pero luego aparecen recogidas en la Misná y en los Talmudes parábolas similares. Por eso se supone, que aunque no se conserven, los rabinos acostumbraban a hablar así. Las de Jesús son las más desarrolladas y bellas. Paaul Fiebig, tiene un libro, en alemán, donde se recogen casi todas las parábolas de los rabinos sobre todo posteriores a Jesús El Padre Nuestro es probablemente una tradición que venía de Juan Bautista: “Enséñanos a orar como el Bautista hacía con sus discípulos” (Lc 11,1). Pero las ideas son judías comunes. Saludos cordiales
Martes, 19 de Agosto 2014
Notas
Hoy escribe Gonzalo Del Cerro
Homilía VII Vuelve el debate que enfrenta a Pedro y a Simón Pedro vuelve a su enfrentamiento con Simón Mago. El debate de Clemente con su amigo pagano Apión había interrumpido el debate nuclear de toda la obra, que es el de Pedro con su paradigmático enemigo Simón Mago. Terminado el fragmento exclusivo de las Homilías griegas IV-VI, la narración retoma el encuentro de los dos grandes protagonistas del aspecto doctrinal de la obra. A pesar de su ausencia real en el debate entre Clemente y Apión, la sombra de Pedro y Simón se cierne sobre la muchedumbre y sus obsesiones. El texto había dejado claro que Simón era algo así como el par negativo de Pedro. Todavía en Tiro, Pedro volvió a repetir que Simón era la potencia negativa de Dios. Y por su parte continuó predicando la importancia de la penitencia para la salvación (Hom VII 5,1). Estancia de Pedro en Sidón y huida de Simón a Beirut Llegaron a Sidón las noticias de la actividad de Pedro y su eficacia doctrinal, apoyada por sus numerosos prodigios generosos a favor de los necesitados. Hicieron lo posible para que Pedro atendiera a sus necesidades y debilidades, y procuraron que se desplazara de Tiro a Sidón. Simón, poco partidario de tener cerca a Pedro, cuando supo que su enemigo había llegado a Sidón, se trasladó a Beirut con su amigo Apión y sus demás compañeros. La llegada de Pedro a Sidón tuvo como consecuencia un revuelo de interés en la población. Llevaban a muchos enfermos en camillas y los colocaban delante de él. Pedro reaccionó dando explicaciones sobre su labor taumatúrgica. Protestaba una vez más de que pensaran que todo era obra suya, de sus poderes personales. Él era un hombre mortal, sometido a multitud de deficiencias y defectos. Pero había sido discípulo, es decir, alumno del Profeta Verdadero, que le había enseñado el método para “conservar limpios los cuerpos y para encaminar las almas hacia la eterna salvación” (Hom VII 3). Los dos caminos De forma un tanto solemne, anuncia Pedro con claridad una de sus obsesiones recurrentes a lo largo de sus sermones: “Os anuncio que hay como dos caminos” (Hom VII 7,1). Explica luego como una obviedad. Los dos caminos son los que corresponden al príncipe del mal y al del bien. Por uno caminan los que perecen, por el otro caminan los que se salvan. Unos van guiados por el Maligno, los otros caminan bajo la guía de Dios. El relator continúa su presentación ofreciendo detalles de los caminos. “El camino de los que perecen, espacioso y llanísimo, causa la perdición sin esfuerzo, pero el camino de los que se salvan, estrecho y áspero, salva en definitiva a los que transitan por él penosamente” (Hom VII 7,2). Uno de los caminos es el de la incredulidad, el otro es el de la fe. Por el de la incredulidad caminan los que prefieren los placeres y no se preocupan de lo que les conviene. Los caminos de Dios no son nuestros caminos. Muchos hay que buscan lo que es bueno, aunque luego se equivocan. Con ellos tiene Dios especial sentimientos de misericordia. Otra cosa hacen los que no buscan ni intentan buscar dónde está el bien y la justicia. Aunque practiquen otras obras buenas, si no siguen la religión de Dios, sufrirán castigos graves bajo la acusación de descuido. La religión de Dios A los que ignoran en qué consiste la religión de Dios o abrigan dudas sobre su sentido y extensión les ofrece una definición detallada diciendo: “La religión definida por Dios es ésta: Darle culto a él solo, creer solamente en el Profeta Verdadero, bautizarse para el perdón de los pecados; de este modo, mediante el baño purísimo renacer para Dios por el agua salvadora; no participar de la mesa de los demonios, quiero decir, de alimentos ofrecidos a los ídolos, muertos, ahogados, cazados por bestias salvajes, sangre; no vivir impuramente, lavarse después de una relación sexual con una mujer. Las mujeres deben observar las mismas normas de la purificación; que todos sean castos, obren bien, no cometan injusticias, esperen la vida eterna de parte de Dios que todo lo puede, que pidan con plegarias y oraciones continuas que se la conceda” (Hom VII 8,1-2). Aparecen los datos expresados en muchos pasajes. La unidad de Dios es una de las bases de los debates de Pedro con Simón Mago. La fe en el Profeta Verdadero y en sus enseñanzas. El bautismo que es una forma de renacer para Dios en una nueva vida. Es fundamental apartarse de la mesa de los demonios y de los que los imitan. La pureza sexual, la misma para todos. Y finalmente, el elogio de la castidad, uno de los aspectos de la vida cristiana más alabados en las Pseudo Clementinas. El resto es obvio: practicar el bien, mantener viva la esperanza y confiar en el poder de la oración para que Dios conceda a los suyos la vida eterna. Saludos cordiales. Gonzalo Del Cerro
Domingo, 17 de Agosto 2014
Notas
Hoy escribe Antonio Piñero
He aquí algunas preguntas y respuestas: Pregunta: ¿Como se explica que Lucas ponga en boca de Pedro en Hechos que tras la muerte y resurrección de Jesús Dios lo exaltó a su diestra, y sin embargo en su evangelio, con el nacimiento virginal le esté dando a Jesús ya desde el nacimiento una naturaleza divina? Respuesta: No puede explicarse desde el punto de vista de hoy de un escritor cuidadoso. Otro caso sorprendente es que en el Evangelio la estancia de Jesús en la tierra trs la resurrección dura solo 24 horas. Pero en Hechos dura 40 días!!! La única explicación es la distancia temporal entre la composición por escrito entre la primera parte de la obra lucana, el Evangelio (compuesto hacia el 85-90) y la segunda parte, Hechos, compuesta quizás 20 o 30 años más tarde. Lucas, aunque es muy sesgado a veces, es a la vez y sorprendentemente un autor fiel a la fuente que sigue en cada momento aunque sea contradictoria con su composición general. Pregunta: ¿Cuándo se publica su novela junto con José Luis Corral? Respuesta: El martes 14 de octubre de 2014. No habrá presentaciones (salen caras), pero sí promociones = radio, prensa, TV según puedan lograr los comerciales de la Editorial Planeta. El título sigue el mismo: "El trono Maldito". La cubierta ya se ha filtrado en Facebook (no sé cómo), y me parece impactante. La leyenda bajo el título es: “Un Imperio, un Reino, un Mesías La gran novela sobre Jesucristo” Pregunta: ¿Cuáles son los criterios filológico-histórico-críticos utilizados por los historiadores para discernir qué material evangélico puede atribuirse al Jesús histórico y cuál no? ¿Cuáles son los más importantes? Respuesta: Son fundamentalmente diez. Pero los más importantes son tres o cuatro: 1. Debe considerarse que tiene visos de ser histórico aquel hecho o dicho de Jesús que esté atestiguado por más de una rama independiente de la tradición. Estas son: la fuente “Q”; Marcos como primer evangelista; el material exclusivo o propio de Mateo o de Lucas; tradiciones especiales recogidas por Juan o por otras fuentes exteriores al Nuevo Testamento, si se demuestran fiables y aportan una información independiente. Por ejemplo no cuenta como tres atestiguaciones un exorcismo o una sanación de Jesús si procede del Evangelio de Marcos y la misma historia ha sido copiada por Mateo y Lucas. Se considera que está sustentado sólo por una fuente, no tres. 2. Criterio de “desemejanza o disimilitud”: Ciertos dichos y hechos de Jesús pueden considerarse auténticos si se demuestra que no pueden derivarse de, o son contrarios a, concepciones o intereses del judaísmo antiguo o del cristianismo primitivo. Ejemplo: un Jesús iracundo (Mc 1,41) que se contrapone a la figura tradicional de un Jesús manso y humilde de corazón (Mt 11,29). O un Jesús ignorante (Mc 13, 32) que se contrapone a uno divino, que es omnisciente 3. Criterio de “dificultad”: Es probable que una tradición proceda del Jesús histórico cuando tal tradición causa muchos problemas a la Iglesia posterior. Ejemplo: El bautismo de Jesús. Que éste fuera bautizado como un pecador por Juan Bautista para la remisión de los pecados es una historia molesta para los intereses teológicos de la Iglesia primitiva, que consideraba a Jesús dios y por tanto no pecador. Es difícil que la historia del bautismo sea un puro invento de la iglesia primitiva. 4. Criterio de “coherencia o consistencia”: se puede aceptar como material auténtico de Jesús aquello que es coherente o consecuente con lo establecido como auténtico por los tres criterios anteriores. Ejemplo: a partir del uso de “abba” por parte de Jesús (Mc 14,36) para dirigirse a Dios como “padre” y las diversas menciones en los evangelios a sus continuos ratos de oración se deduce que Jesús predicaba la cercanía de Dios al ser humano. Con el material evangélico, y en algunos caso del resto del Nuevo Testamento, debidamente cribado por la crítica, procedemos a responder preguntas sobre la vida, palabras, doctrina, figura misión, etc., de Jesús de Nazaret El resto de los criterios, ampliamente comentados pueden encontrarse en el libro siguiente: A. Piñero (editor), ¿Existió Jesús realmente?, Editorial Raíces, Madrid 2009, 350 pp. ISBN 978-84-86115-64-7. El capítulo correspondiente ha sido redactado por el Prof. Dr. D. Gonzalo del Cerro Saludos cordiales
Domingo, 17 de Agosto 2014
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Editado por
Antonio Piñero
Licenciado en Filosofía Pura, Filología Clásica y Filología Bíblica Trilingüe, Doctor en Filología Clásica, Catedrático de Filología Griega, especialidad Lengua y Literatura del cristianismo primitivo, Antonio Piñero es asimismo autor de unos veinticinco libros y ensayos, entre ellos: “Orígenes del cristianismo”, “El Nuevo Testamento. Introducción al estudio de los primeros escritos cristianos”, “Biblia y Helenismos”, “Guía para entender el Nuevo Testamento”, “Cristianismos derrotados”, “Jesús y las mujeres”. Es también editor de textos antiguos: Apócrifos del Antiguo Testamento, Biblioteca copto gnóstica de Nag Hammadi y Apócrifos del Nuevo Testamento.
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