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Blog de Tendencias21 sobre las implicaciones sociales del avance científico, tecnológico y biomédico.
Los farmacéuticos conocían las propiedades toxicológicas del Bisfenol A y no entendían como no se prohibía su inclusión en los materiales de elaboración de biberones. Por fin, tras pasar bastante tiempo y gracias a una directiva europea, no se permite la fabricación de biberones a base de policarbonatos (que son los que incluyen el Bisfenol A).
Biberón de Bebé Due, sin Bisfenol A.
El 25 de Marzo del 2011 se ha publicado en el Boletín Oficial del Estado una Orden por la cual queda expresamente prohibido el uso de la sustancia conocida como bisfenol A en la fabricación de biberones a base de policarbonato para los lactantes.
Dicha Orden responde a una Directiva de la Unión Europea basada en el principio de precaución o cautela presente en la legislación comunitaria. No obstante, y aunque sea algo paradójico, la prohibición que se adopta única y exclusivamente hace referencia a la fabricación de biberones para lactantes y no tiene en cuenta otros tipos de utensilios no considerados biberones y que tienen gran demanda social (por ejemplo los vasos especiales para que el bebé aprenda a beber de un modo independiente).
El bisfenol A, como expone tan claramente la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, es un producto químico que se utiliza desde hace muchos años para la fabricación de policarbonatos. El policarbonato es un tipo de plástico rígido y transparente que se emplea en envases de alimentos como botellas retornables de bebidas, biberones, vajilla (platos y tazas) y recipientes. Como todos los materiales que entran en contacto con los alimentos pueden ceder a los mismos pequeñas cantidades de sus componentes y ser ingeridos. En el caso de los biberones a base de policarbonato, cuando se calientan, en determinadas condiciones, pequeñas cantidades de bisfenol A pueden migrar al agua que se utiliza para preparar el biberón.
El principio de precaución al que hemos hecho mención antes, es debido a los posibles efectos toxicológicos que pueden tener este componente en un organismo más indefenso, en desarrollo y que emplean estos artefactos para su alimentación durante un periodo relativamente prolongado de su crecimiento.
La medida ha sido aplaudida desde la industria afectada por esta medida. De hecho, conscientes del problema algunas empresas como Bebé Due a mediados del 2009 anunciaban que dejaban de fabricar biberones con este compuesto. No obstante, la Directiva de la Unión Europea es considerada insuficiente por algunos ecologistas. De hecho, en la web de Greenpeace España se preguntan: "¿han tardado meses en prohibirla y sólo en biberones? Un informe de Greenpeace y WWF, realizado en 2005 detectó esta sustancia en sangre de mujeres embarazadas y en cordón umbilical. Esto viene a demostrar que acabar con la exposición generalizada a esta sustancia tóxica va más allá de esta medida."
Como suele suceder siempre, el debate sigue abierto y la sociedad tiene que tomar partido bien para aceptar la medida y considerarla suficiente o bien para reivindicar nuevos cambios.
Dicha Orden responde a una Directiva de la Unión Europea basada en el principio de precaución o cautela presente en la legislación comunitaria. No obstante, y aunque sea algo paradójico, la prohibición que se adopta única y exclusivamente hace referencia a la fabricación de biberones para lactantes y no tiene en cuenta otros tipos de utensilios no considerados biberones y que tienen gran demanda social (por ejemplo los vasos especiales para que el bebé aprenda a beber de un modo independiente).
El bisfenol A, como expone tan claramente la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, es un producto químico que se utiliza desde hace muchos años para la fabricación de policarbonatos. El policarbonato es un tipo de plástico rígido y transparente que se emplea en envases de alimentos como botellas retornables de bebidas, biberones, vajilla (platos y tazas) y recipientes. Como todos los materiales que entran en contacto con los alimentos pueden ceder a los mismos pequeñas cantidades de sus componentes y ser ingeridos. En el caso de los biberones a base de policarbonato, cuando se calientan, en determinadas condiciones, pequeñas cantidades de bisfenol A pueden migrar al agua que se utiliza para preparar el biberón.
El principio de precaución al que hemos hecho mención antes, es debido a los posibles efectos toxicológicos que pueden tener este componente en un organismo más indefenso, en desarrollo y que emplean estos artefactos para su alimentación durante un periodo relativamente prolongado de su crecimiento.
La medida ha sido aplaudida desde la industria afectada por esta medida. De hecho, conscientes del problema algunas empresas como Bebé Due a mediados del 2009 anunciaban que dejaban de fabricar biberones con este compuesto. No obstante, la Directiva de la Unión Europea es considerada insuficiente por algunos ecologistas. De hecho, en la web de Greenpeace España se preguntan: "¿han tardado meses en prohibirla y sólo en biberones? Un informe de Greenpeace y WWF, realizado en 2005 detectó esta sustancia en sangre de mujeres embarazadas y en cordón umbilical. Esto viene a demostrar que acabar con la exposición generalizada a esta sustancia tóxica va más allá de esta medida."
Como suele suceder siempre, el debate sigue abierto y la sociedad tiene que tomar partido bien para aceptar la medida y considerarla suficiente o bien para reivindicar nuevos cambios.
Miércoles, 6 de Abril 2011
Perfil
Juan R. Coca
JUAN R. COCA Profesor Contratado Doctor del Departamento de Sociología y Trabajo Social de la Universidad de Valladolid (España). Actualmente es director de la Unidad de Investigación Social y Enfermedades Raras de la Universidad de Valladolid.
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