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Una vez más, hemos de recordar que la inseguridad y la violencia están globalizadas y reflejan una organización social también en crisis, que involucra a individuos y a instituciones, donde los ciudadanos han de buscar los referentes para hallar las soluciones a los problemas más comunes, porque la seguridad no está globalizada.
Así, hemos de pensar en global como instituciones y ciudadanos del mundo pero, hemos de actuar en local, en nuestra dimensión ciudadana. La fragilidad y las vulnerabilidades se ponen cada vez más de manifiesto y potencialmente con más violencia.
Nuevas exigencias y retos para la seguridad
Vivimos un panorama globalizado de nuevas amenazas, mayores riesgos en las actividades sociales, industriales y comerciales que ratifican nuevas demandas y exigencias de la sociedad con nuevos retos para la protección de sus actividades con plenas garantías para su seguridad.
Continuas señales de alarma, las más que percepciones de inseguridad, nos llegan por todos los frentes, provocando una sensación generalizada de múltiples inquietudes, problemas globales e inseguridades.
Así, si hablamos de Seguridad hemos de tener en cuenta esa clara existencia de una “seguridad objetiva” y, sobre todo, de la otra, la “seguridad subjetiva”, que puede generar alarma social.
Cultura Integral de Seguridad Nacional
Una Seguridad Objetiva, que es la que puede medirse cualitativa y cuantitativamente y es resultante de las acciones proactivas y reactivas programadas y realizadas por el Gobierno y sus Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Y una Seguridad Subjetiva, que es aquella que realmente es percibida por el ciudadano en su propia vivencia y estado de ánimo y es más importante que los resultados de las frías estadísticas y estudios comparativos.
La idea de Seguridad Nacional está relacionada con la forma en la que vivimos a nivel geopolítico y, en la actualidad, el enemigo ha cambiado y los retos se han incrementado.
Así, disponemos de un Plan Integral de Cultura de Seguridad Nacional, un espacio de colaboración público-privada para desarrollar actividades e iniciativas dirigidas a incrementar la conciencia sobre la trascendencia de la seguridad nacional, así como la corresponsabilidad de todos en su salvaguarda.
Este Plan Integral de Cultura de Seguridad Nacional ha sido elaborado y aprobado en España por Acuerdo del Consejo de Ministros de 25 de mayo de 2021 con la participación de los veintidós Ministerios de la XIV Legislatura, la Secretaría de Estado de Comunicación y el Centro Nacional de Inteligencia.
Plan Integral de Cultura de Seguridad Nacional que ha de servir de catalizador para la implantación progresiva de una cultura de Seguridad Nacional inclusiva, participativa y colaborativa, todo ello con el fin de reforzar el Sistema de Seguridad Nacional, mejorar la coordinación y eficacia de la acción del Estado y la participación de la sociedad.
Los ámbitos de actuación y líneas de acción para el desarrollo del Plan, establece cuatro ámbitos de actuación: Formación, Comunicación pública y divulgación, Relevancia en el exterior y Participación, en los que se fomentará la colaboración y cooperación entre las comunidades de referencia.
- Formación para lograr una percepción correcta y fundamentada sobre la Seguridad Nacional, su trascendencia para garantizar la vida cotidiana y los esfuerzos que requiere su salvaguarda.
- Divulgación y comunicación pública para fortalecer una opinión pública consciente del carácter imprescindible e irrenunciable de nuestra seguridad a través de los medios y las plataformas de comunicación.
- Relevancia en el exterior, para mejorar la imagen de España como país íntegro, seguro y comprometido con el mantenimiento de la paz y la estabilidad internacionales.
- Participación, de la ciudadanía y de las organizaciones de la sociedad civil en las actividades de fomento de la cultura de Seguridad Nacional.
Igualmente, la Seguridad Nacional y las Infraestructuras Críticas y Estratégicas, pueden considerarse un problema global que se ha de abordar a nivel institucional, siguiendo políticas nacionales y un enfoque internacional.
Por las múltiples amenazas y los nuevos retos y desafíos para la Seguridad, el Esquema Nacional de Seguridad (ENS), en su capítulo de “Objetivos generales y líneas de acción de la Seguridad Nacional”, identifica cinco objetivos generales:
“Avanzar en un modelo integral de gestión del riesgo y de crisis, promover una cultura de Seguridad Nacional, favorecer el buen uso de los espacios comunes globales, impulsar la dimensión de seguridad en el desarrollo tecnológico y fortalecer la proyección internacional de España”.
Seguridad Global, Plan integral e integrado
El orden global y el paradigma socio-económico liberal se encuentran en un periodo de cambio, sin que aún se haya definido claramente el nuevo panorama del sistema internacional. Los principales vectores de transformación son: el contexto geopolítico, el entorno socio-económico, la transformación digital y la transición ecológica.
El planteamiento de la Seguridad Global algo más que un concepto. En este mundo global de retos colectivos y futuro incierto, nos ayudará a entender las nuevas dinámicas sociales, económicas, energéticas y tecnológicas el desarrollo de ese amplio concepto que es la seguridad global que va a definir el presente y futuro del mundo.
Debemos ser conscientes de que en el mundo actual se están produciendo cambios profundos, no eventuales, y que es necesario contribuir de una forma más eficaz y realista a la mejora de la seguridad global. Desde esta perspectiva de la seguridad hemos de ayudar a instituciones y organizaciones a rediseñar nuevas estrategias en el mundo globalizado.
Para ello, hemos de estudiar las grandes tendencias que vivimos, definir los nuevos riesgos económicos, políticos y sociales que nos acechan y esquematizar un escenario de futuro en el que un modelo de gobernanza y seguridad global sea capaz de responder a los nuevos retos colectivos que nos amenazan.
Uno de los proyectos estrella de estos últimos años es el análisis de riesgos, con un matiz importante, que sea global-convergente-integral. Un análisis que evalúe todos los riesgos que puedan afectar a los procesos críticos de nuestras organizaciones.
Debemos invertir en Gestionar el Riesgo para prevenirlo y garantizar en todo lo posible superar las crisis siendo especialmente resilientes.
Una Seguridad Global, base para el nuevo estudio y análisis integral de los riesgos y las amenazas globales existentes hoy, como el cibercrimen, la inmigración, los cambios climáticos, el terrorismo, el crimen organizado trasnacional, la desinformación, los servicios de inteligencia, etc.
Las amenazas tienen muchos tamaños y formas, como la inestabilidad geopolítica, la delincuencia, las catástrofes naturales y, más recientemente, las pandemias mundiales.
Hemos de establecer un Plan de Seguridad Integral e Integrado basado en objetivos e, igualmente, implementar una gestión integral de los riesgos y las seguridades, con el esquema básico siguiente: Análisis de Riesgos, Amenazas y Vulnerabilidades; Implementación de los Medios de Seguridad Pasiva, Activa y de Ciberseguridad; Organización de las Medidas y los Medios Humanos de Seguridad; Planes Estratégicos y Operativos y Plan de Formación continua.
Planes de Seguridad. Prevención + Protección
Para una adecuada política de protección se han de establecer los diferentes Planes de Seguridad teniendo en cuenta los siguientes aspectos fundamentales, como:
- Política de Seguridad de las Organizaciones y la protección de los servicios esenciales.
- La Gestión Estratégica de la seguridad alineada con la política de riesgos y amenazas.
- La Estructura Organizativa y de responsabilidades en materia de seguridad integral e integrada.
- La Responsabilidad, compromiso y participación de todo el personal interno y externo de la organización.
- La Formación Especializada y concienciación de los recursos humanos adscritos a la prevención y protección.
- El Desarrollo y Gestión de capacidades para la prevención, detección, protección, respuesta, resiliencia y recuperación.
- La Colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y establecimiento de planes de contingencia.
- El Cumplimiento Normativo, aplicación de buenas prácticas y la mejora continua de los procesos de seguridad implementados.
Solo una seguridad integral e integrada y una cultura de seguridad, garantiza una protección eficiente frente a amenazas globales y supone una aplicación globalizada de la seguridad, en la que se tienen en cuenta los aspectos humanos, legales, sociales, económicos y técnicos de todos los riesgos, amenazas y vulnerabilidades que pueden afectar a las personas y bienes integrantes en la actividad de una organización.
Finalmente, hay que tener en cuenta que el concepto de Seguridad Global es especialmente importante en el ámbito de las Infraestructuras Críticas y Estratégicas.
Recomendaciones
Hoy hay que dar una respuesta con una Seguridad Global, ÚNICA, con mayúscula, integral e integrada, pública y privada.
Fomentar una Cultura de Seguridad, identificando las oportunidades y debilidades de los diferentes actores que abarcan el espectro: global, nacional, local de seguridad pública y privada.
La actual sociedad y sus inseguridades requiere de un punto de vista nuevo y diferenciador, ha de ser creativo, intuitivo e inclusivo y servir para romper nuestros hábitos, modelos mentales y paradigmas ya obsoletos, todo hacia un pensamiento cuántico.
La necesidad de cambiar de paradigma es real e imprescindible para acometer nuevos retos y exigencias en la sociedad a través de un pensamiento cuántico y holístico que unifique, contemple y relacione todos los datos e integre los procesos del pensamiento en serie y asociativo.
Ahora, más que nunca, es tan importante la imaginación como el conocimiento y la inteligencia.
Con todo ello, y como recomendaciones finales, debemos potenciar una nueva Cultura de Seguridad con visión común sobre la base de amenazas complejas e incrementar los recursos de análisis para desarrollar un nuevo esquema de Seguridad Global, integral e integrada, pública y privada.
El desarrollo de la globalización de nuestras relaciones, comunicaciones y aperturas de fronteras nos ha llevado a la globalización de inseguridades de todo tipo y dimensión, lo que requiere de soluciones también globales y de un nuevo planteamiento de la cultura y ecosistemas de seguridad, adaptando en todo momento nuestras acciones y reacciones, y tratando de ajustar siempre el marco de la más adecuada prevención y protección.
El reciente atentado contra el expresidente Donald Trump en una granja de Butler, Pensilvania, perpetrado por un joven de 20 años que hizo ocho disparos desde 150 metros, causó dos muertos y dos heridos. Este intento de magnicidio marca quizá la mayor crisis de seguridad para los Servicios Secretos norteamericanos desde que Reagan fue tiroteado en 1981 y requiere replantearse la seguridad en los mítines, “incluyendo una revisión de los recursos y el análisis de cómo el tirador pudo asumir una posición elevada de ataque fuera del área segura del evento sin ser detectado y eliminado antes de que se dispararan los tiros”.
Amenazas globales, soluciones globales
Los riesgos y amenazas globales requieren de soluciones globales basadas en revisiones permanentes para asegurar el disponer de una seguridad global, integral e integrada, pública y privada.
No nos cansamos de recordar que la seguridad global requiere prioritariamente de un marco legal armonizado, con adopción de normativas y protocolos específicos desde una visión holística, así como todo un planteamiento de nuevos paradigmas en y para una sociedad global con cambio de valores y avances tecnológicos (nuevas situaciones de redes globales, herramientas online y de cloud, nuevos canales de comunicación con la globalización del ciberespacio con riesgos y amenazas de eventos, probables y frecuentes, de gran impacto).
Por ello, tenemos una mayor necesidad de confianza, incremento de controles y protecciones y una eficaz gestión integral del riesgo y las seguridades con una gran resiliencia en tecnologías y personas.
Amenazas y vulnerabilidades. Gestión del Riesgo
Ante las amenazas globales precisamos de modelos de Gestión Integral del Riesgo basado en nuevos marcos que abarquen todo el espectro:
- Situacional, de análisis de vulnerabilidades, riesgos y amenazas.
- Estratégico, con alineación de ejes de acción y estructuras de seguridad, prevención y protección.
- Operativo, para la gestión, planificación y evaluación de los riesgos y amenazas.
En definitiva, debemos invertir en gestionar los riesgos y amenazas para prevenir y minimizar en todo lo posible las consecuencias con garantías de eficiencia y resiliencia.
Gestión y Protección Tecnológica
Como los nuevos problemas implican nuevas soluciones hemos de establecer áreas de trabajo e implantar nuevos sistemas de gestión de las seguridades, que abarcarían todo un espectro:
- Sistemas de Dirección de Seguridad Global de riesgos y cumplimiento.
- Sistemas de Gestión que garanticen la adecuación constante al marco normativo actual y futuro que afecte al normal funcionamiento, contemplando un sistema de evaluación de riesgos que permita realizar el seguimiento de las acciones de mejora de forma continua.
- Sistemas de Integración de subsistemas de seguridad que permita, desde nuestro proceso de Diseño del Sistema de Seguridad Integral, garantizar la convergencia.
- Sistema de Inteligencia y Prevención que permita, mediante vigilancia permanente, la agregación de datos de eventos que se integren en Cuadros de Mando con herramientas avanzadas y específicas.
- Sistema de Respuesta para la gestión de las alertas tempranas que produzca el análisis automatizado de eventos, notificando a los destinatarios los problemas inmediatos, poniendo en marcha soluciones y mecanismos de contingencia y generando una seguridad adaptativa.
- Sistemas de Análisis Forense de nuestro histórico de eventos e incidentes, para realizar las investigaciones y adaptar o corregir nuestros requisitos de seguridad.
En resumen, la globalización de la inseguridad requiere de un ecosistema de soluciones globales, basadas en el estudio y abordaje de amenazas y vulnerabilidades crecientes y reales, a través de una Gestión Integral del Riesgo y las Seguridades.
París acoge la celebración de los Juegos Olímpicos 2024 del 26 de julio al 8 de septiembre, y Francia estará atenta ante cualquier posible ataque contra los actos y sedes, mientras los parisinos parecen estar interiorizando la que se les avecina, algunos con entusiasmo y otros con malestar que no dejan de manifestar.
Los Juegos Olímpicos son la cita más importante del mundo del deporte y apenas queda un mes para que se celebren y, cuando todo debería estar casi listo en París para acoger un evento de estas características y dimensiones, las dudas sobre la seguridad siguen surgiendo en las últimas semanas debido a distintos episodios.
Ahora, tras un nuevo período electoral, el otro gran problema del presidente Macron, son las Olimpiadas de París y las pesadillas sobre la seguridad aún no resueltas. El presidente francés ha señalado que no afrontan la situación "con ingenuidad", sino "conscientes" de las amenazas que pesan sobre estos eventos. "No minimizamos la situación, el mundo está en desorden, tenemos una guerra en Europa (Ucrania), vemos lo que sucede en Oriente Medio y que hay un riesgo terrorista, pero nos preparamos para afrontarlo, con transparencia", afirmó Macron.
Realidad y escenarios
Todo evento como es el caso de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de “París 2024” tiene como primer componente de planificación el establecimiento de unos objetivos como país respecto a su organización y celebración.
El gran espectáculo que suponen los Juegos Olímpicos, con la gran participación de deportistas, la asistencia de millones de espectadores, su ceremonial y protocolos, la cobertura y repercusión en los medios de comunicación, la rentabilidad de las inversiones y de los patrocinadores, el reclamo de un mayor turismo, la imagen-país de Francia y mucho más, podría verse afectado, por cualquier falta o carencias en la seguridad que pudieran dar lugar a un suceso causante de graves daños.
El objetivo principal es conseguir mantener una situación de normalidad respecto al desarrollo del evento tal y como esté previsto, sin que se vea alterado por incidentes ni accidentes y que, en caso de emergencia que amenace a esa normalidad y que pueda afectar a personas o infraestructuras, servicios o funcionamiento de las actividades, la buena organización permita la minimización de las consecuencias y la continuidad, disponiendo de alternativa a lo que pudiera verse afectado para procurar en todo momento el cumplimiento del programa.
En este contexto, merecen especial mención algunos datos significativos que nos sirvan para dimensionar este París 2024, como son:
Se practicarán 32 deportes, contarán con 206 delegaciones, se prevé que participen 10.500 atletas, colaborarán 45.000 voluntarios y habrá 35 sedes olímpicas, y, como hecho destacable, entre otros, por primera vez en la historia de los Juegos Olímpicos, será igual el número de deportistas hombres que el de mujeres. Por su parte en los Juegos Paralímpicos habrá 22 deportes, se dispondrá de 17 sedes, participarán 182 países e intervendrán 4.400 deportistas.
Además, complicando aún más el panorama, se espera que estén presentes más de 100 líderes mundiales en los actos de inauguración, programados a las orillas del Sena.
Antecedentes de incidentes graves
Desde el punto de vista mediático los Juegos Olímpicos pueden ofrecer el tipo de impacto global que muy pocos objetivos podrían proporcionar, y no podemos olvidar que para el terrorismo internacional un atentado en semejantes circunstancias podría ser un deseable objetivo.
Conociendo esa repercusión, también existe un importante historial de movimientos y acciones de radicales islamistas que, sin llegar a la acción, articulan abiertamente una estrategia para agotar los recursos de los gobiernos occidentales, induciendo la adopción de medidas de seguridad sobredimensionadas, en el intento de evitar posibles atentados.
Cabe aquí destacar algunas acciones graves de terror:
MUNICH, 1972. Los Juegos Olímpicos más trágicos de la historia: el 5 de septiembre, un comando terrorista palestino logra introducirse en la Villa Olímpica y toma como rehenes a 11 integrantes del equipo olímpico israelí. Luego fracasan en su intento de salir de Alemania y asesinan a los cautivos.
ATLANTA, 1996. Un ataque dramatiza el encuentro deportivo: el 27 de julio, el terrorista Eric Rudolph hace estallar un explosivo en el Parque Olímpico de la ciudad, mientras miles de espectadores presencian un concierto de rock. A causa del atentado, dos personas mueren y 111 resultan heridas.
PARÍS 2015: la noche del 13 de noviembre, en Saint-Denis, son perpetrados ataques suicidas islamistas en los que murieron 130 personas y otras 415 resultaron heridas. Los ataques se efectuaron contra terrazas de cinco bares y restaurantes y con tiroteo y toma de rehenes en la sala de conciertos Bataclan y en explosiones suicidas alrededor del Estadio de Francia. Los ataques fueron reivindicados por la organización yihadista Estado Islámico.
Riesgos y amenazas
Con los Juegos Olímpicos de París a menos de un mes de distancia, las preocupaciones de seguridad son importantes.
Entre otras amenazas, los atentados terroristas encabezan la lista de preocupaciones de seguridad para los Juegos Olímpicos París 2024. Un informe revela que, además, se contempla la posibilidad de ataques físicos y de otras acciones de extremismo violento.
“Estamos preocupados por las amenazas de terrorismo, especialmente por el terrorismo islámico, pero también las amenazas de menor intensidad de grupos radicales ambientalistas, extremistas de izquierda y pro-Palestina”, ha asegurado Nunez, Jefe de la Policía, en conferencia de prensa.
“No hay una amenaza directa contra los Juegos y a nuestro país, pero les recuerdo que a finales de mayo dos individuos fueron arrestados en Saint-Étienne y que estaban planeando un ataque directo a los Olímpicos”, añadió.
Nunez anunció los planes para desplegar a 30.000 oficiales cada día, incluyendo policía armada y un máximo de 45.000 para la ceremonia de apertura en el rio Sena. La policía será apoyada por militares, en donde cerca de 18.000 miembros de las fuerzas armadas estarán involucrados.
Un informe publicado recientemente por la empresa de ciberseguridad Recorded Future, del Grupo Insikt, afirma que, a pesar de la alta probabilidad de que se produzcan ciberataques, el mayor riesgo para los Juegos de París provendrá de las amenazas en persona y no del ciberespacio.
Se considera posible la amenaza por un atentado terrorista, pero, además. París ha sufrido en los últimos meses numerosos avisos de bomba y la ciudad ha estado fustigada por distintos ataques, que han puesto de manifiesto la falta de seguridad que hay en la ciudad.
Por ello, desde el Comité Organizador de los JJ.OO. ya se tiene en cuenta un plan B para la ceremonia de inauguración, uno de los actos más señalados de cara a un posible ataque terrorista.
Sin embargo y pese a toda amenaza, podemos pensar que la amplia infraestructura de seguridad implementada para el evento hará que sea muy poco probable que se produzca un ataque exitoso con un gran número de víctimas.
Para que eso sea posible, habrá que aplicar tajantemente el protocolo de seguridad básico, que obliga a implementar estudios y procedimientos exhaustivos para identificar los potenciales riesgos y amenazas, evaluar las posibles consecuencias y, a partir de ahí, poder calcular las vulnerabilidades y gestionar planes realistas, adoptando y aplicando la seguridad necesaria.
Planes de Seguridad
Francia se está blindando para la celebración de los Juegos Olímpicos que darán comienzo el próximo 26 de julio y las amenazas yihadistas continúan siendo uno de los grandes desafíos para la seguridad francesa, que prepara para unas medidas de prevención y protección sin precedentes.
La policía de París ya está "en alerta máxima”, atendiendo a las preocupaciones de seguridad que se derivan de estos Juegos, en los que se prevé el despliegue de 30.000 oficiales cada día y el apoyo a la policía por parte de militares.
Inevitablemente, las Olimpiadas de París afectarán a las rutinas de los habitantes y visitantes de la ciudad.
La Policía francesa ha dado a conocer los Planes de Seguridad para los Juegos Olímpicos de París y ha confirmado que, durante la ceremonia de apertura 35 embarcaciones de seguridad acompañarán a las 94 que transportarán a los deportistas a lo largo de los seis kilómetros de la sección del Sena. Francotiradores serán colocados a lo largo de la ruta y tres fuerzas tácticas de la policía francesa —BRI, RAID y GIGN— cooperarán por primera vez durante la ceremonia, creando una burbuja por tierra, agua y aire.
Para los servicios de seguridad, la decisión sin precedentes de hacer desfilar a miles de atletas olímpicos de unas 200 delegaciones en más de 80 barcos a lo largo 6 kilómetros del Sena, frente a una multitud de 320.000 personas, es un reto de envergadura. Se desplegarán unos 45.000 miembros de las fuerzas de seguridad y el espacio aéreo y todos los aeropuertos dentro de un radio de 150 kilómetros alrededor de París estarán cerrados para el espectáculo.
Se abre en Francia un periodo de fuerte seguridad en un clima de alta tensión, que culminará con la ceremonia de apertura el 26 de julio en París y se prolongará hasta el final de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos París 2024.
Colaboración internacional
Con este motivo, las autoridades francesas, a través de su embajada en Madrid, solicitaron en enero al Ministerio del Interior el despliegue de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de España.
Como consecuencia, el Ministerio del Interior desplazará a París un total de 313 policías nacionales y guardias civiles para que se integren en el dispositivo de seguridad que las autoridades galas han dispuesto para proteger la celebración de los próximos Juegos Olímpicos, que se disputarán entre el 26 de julio y el 11 de agosto próximos, así como los Juegos Paralímpicos, programados a continuación entre el 28 de agosto y el 8 de septiembre.
El refuerzo español para el dispositivo de seguridad de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París está integrado por 171 policías nacionales, que pertenecen a unidades como Intervención Policial, Caballería, Brigada-Móvil, guías-caninos (especializados en explosivos), Unidad Central de Fronteras o los equipos anti-drón de la Unidad Aérea, entre otras.
Por su parte, otros 142 guardias civiles se integrarán en este grupo, procedentes de unidades como Seguridad Ciudadana, Fiscal y de Fronteras, las academias de Valdemoro y Baeza, el Grupo de Acción Rápida, el Servicio de Desactivación de Explosivos, el Servicio Cinológico y la Agrupación de Tráfico, entre otras.
Las Policías de España y Francia realizarán simulacros antiterroristas antes de los Juegos Olímpicos.
El Ministerio del Interior francés solicitó a 45 países que proporcionasen agentes de policía para garantizar la seguridad durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, de los que la mayoría dieron una respuesta positiva. La delegación policial española es la más numerosa de cuantas se van a integrar en el dispositivo de seguridad que protegerá la competición olímpica dado el elevado nivel de reputación de que gozan las Fuerzas de Seguridad españolas en toda la Unión Europea.
Las autoridades francesas tienen previsto movilizar durante los Juegos Olímpicos a 45.000 policías y gendarmes, así como a 18.000 militares. A ellos se les añadirán entre 18.000 y 22.000 guardias de seguridad privada al día, según el Comité de Organización.
En resumen, en esta ocasión, dado el lugar y las amenazas evaluadas, se dispondrá un dispositivo de seguridad sin precedentes.
Solo un planteamiento de seguridad global, integral e integrada, puede garantizar una protección eficiente frente a los riesgos, amenazas y vulnerabilidades de una organización y su gestión integral.
De acuerdo con la norma ISO31000, los riesgos son el efecto de la incertidumbre en los objetivos. Por ello, el fin principal de la gestión del riesgo es mejorar los procesos de toma de decisiones, proteger los activos y reducir las pérdidas potenciales o consecuencias adversas para alcanzar los objetivos organizacionales.
El proyecto es el desarrollo y despliegue de un modelo para la Gestión Integral del Riesgo y las Seguridades (prevención + protección) basado en una metodología de planificación, desarrollo y gestión de aplicación específica.
Un modelo Integrado, que contemple el catálogo de riesgos más amplio y transversal, con flujos de información interdepartamentales y sostenible de seguridad, con el objetivo de proporcionar una serie de herramientas y soluciones en sus diferentes posibilidades, en forma de aplicaciones tanto documentales como procedimentales.
Un modelo de recursos integrales e integrados, con el objetivo de que los Departamentos de Seguridad sean más de gestión global y resilientes, proyectando una mayor eficacia, sostenibilidad y viabilidad económica.
Veamos esquemáticamente la realidad de nuestro proyecto de establecer un Decálogo de objetivos y acciones a acometer en materia de seguridad en los distintos sectores o áreas de actividad:
AUDITORÍA DE SEGURIDAD
Desarrollo de un esquema de auditoría para las organizaciones, un modelo de realización de los Informes previos y las pruebas necesarias para conocer el estado actualizado de la gestión del riesgo y sus seguridades física y lógica, para preparar a la organización para acometer acciones de respuesta, actuación y resiliencia.
POLÍTICA DE SEGURIDAD Y CULTURA DE SEGURIDAD
Disposición de herramientas y protocolos para la elaboración de la Política General de Seguridad de la organización y de su marco de gobierno, para garantizar la protección integral e integrada del conjunto de activos, instalaciones o sistemas de su propiedad o bajo su gestión, así como para la implementación de una cultura de seguridad.
IDENTIFICACIÓN, CLASIFICACIÓN Y EVALUACIÓN DEL RIESGO
Identificar áreas de especial sensibilidad o preocupación y establecimiento de un proceso de desarrollo de perfiles de riesgo para los activos de información, activos e instalaciones, resultado de la combinación de la posibilidad de materialización de una amenaza (probabilidad) y sus consecuencias (impacto).
Igualmente, se completará este capítulo con la identificación, análisis y evaluación de las correspondientes vulnerabilidades derivadas del entorno, ubicación y diseño de todas y cada una de las infraestructuras de la organización.
APLICACIÓN Y MONITORIZACIÓN DE LA GESTIÓN DEL RIESGO
Desarrollo de la plataforma para la identificación, clasificación y evaluación de riesgos, amenazas y vulnerabilidades para la infraestructura e instalaciones de la organización, basada en diferentes estándares como la Norma ISO/IEC 31000 y normativas específicas de aplicación, con el aprovechamiento y la adaptación a las instituciones de las experiencias en la seguridad en entornos corporativos.
IDENTIFICACIÓN DE ESCENARIOS DE AMENAZA
Identificación de escenarios de especial amenaza y vulnerabilidad en áreas de preocupación o sensibles extendidas a escenarios de amenaza, lo que significa la identificación de otras preocupaciones para la organización que están relacionadas con sus activos de información críticos y que no son visibles a primera vista, como en el capítulo anterior.
DISEÑO DE MEDIDAS Y PLANTEAMIENTO DE LAS SEGURIDADES
Evaluación, aplicaciones y criterios para la selección e implantación de tecnologías específicas, protocolos, procedimientos y medios de protección, tanto de Seguridad Física y Operativa como de Seguridad Lógica, para alcanzar el nivel de prevención y protección requerido en la organización.
PLANES DE SEGURIDAD
Elaboración de los planes que preparen a la organización para la respuesta ante incidentes o ataques que puedan provocar una alteración o parada en sus actividades, mejorando la gestión de crisis, contingencia y continuidad, así como su correspondiente programa de implantación, mantenimiento y actualización.
Establecimiento de programas de seguimiento y actualización de los planes estratégico, operativos y de contingencia.
MONITORIZACIÓN, CONTROL Y SEGUIMIENTO
Diseño e implementación de las bases del conjunto de políticas para la Seguridad en la organización conforme a la norma ISO/IEC 27001 y otras de aplicación para: diseño, implantación y mantenimiento de procesos para gestionar y asegurar eficientemente la confidencialidad, integridad y disponibilidad de los activos, minimizando a la vez los riesgos de la Seguridad Lógica o Ciberseguridad.
CONCIENCIACIÓN, FORMACIÓN Y COMUNICACIÓN
Herramientas para la implementación de un sistema y programas de Concienciación y Formación específica en Seguridad y Gestión del Riesgo, de todos los empleados de la organización desde directivos hasta operativos, así como la obtención, en caso necesario, de las correspondientes habilitaciones de Seguridad por la autoridad competente.
La formación y la gestión del tiempo de los diferentes empleados y perfiles de la organización y la gestión de la comunicación también son clave.
Establecimiento de los programas y procedimientos de Comunicación interna y externa para la prevención, protección y resiliencia.
LEGISLACIÓN Y NORMATIVA
Modelo para la determinación y monitorización de cumplimiento del marco normativo y legislativo que sea de aplicación, así como evaluación de la conveniencia de implementación y aplicación en la organización de normativas específicas como la Ley de Seguridad Privada, la Ley NIS (Ciberseguridad), la Ley de Protección de Infraestructuras Críticas, el Esquema Nacional de Seguridad (ENS), el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, etc. para alinear a la organización con su correspondiente cadena de valor.
En resumen, en planteamiento esquemático de este Decálogo de objetivos y acciones a acometer en materia de la Gestión Integral del Riesgo y las Seguridades, en los distintos sectores o áreas de actividad, es un nuevo planteamiento y redefinición y, sin duda, una nueva oportunidad para avanzar en la Seguridad Global de un mundo de retos colectivos y futuro incierto, con necesidad de entender las nuevas dinámicas sociales, económicas, energéticas y tecnológicas para propiciar el desarrollo de ese amplio concepto de la nueva seguridad global que va a estar presente de ahora en adelante.
Implementar y adoptar una gestión integral del riesgo con estrategias robustas de reducción de las amenazas, además de ser es una inversión proactiva para la resiliencia, ofrece una serie de ventajas para las organizaciones como son: la reducción de las interrupciones, la mejora en la toma de decisiones, el ahorro de costes, la mejora de la eficacia y la mejora de la garantía reputacional y la continuidad del funcionamiento.
Los números son de Peggy und Marco Lachmann-Anke en Pixabay
Como es sabido, la Seguridad Privada no es nueva ni fruto de ninguna tendencia política significada, ni debe ser planteamiento alternativo a las posibles carencias de la Seguridad Pública o la potencial privatización de ésta.
Transcurría 1849 cuando se creó la figura de “Guarda Municipal de Campo”, la primera figura de seguridad privada en la historia reciente de España.
Como recordatorio, en la reciente celebración del “Día de la Seguridad Privada”, desde sus inicios a nuestros días, se ha venido desarrollando la actividad regulada por Órdenes y Reales Decretos, hasta que, en 1992, se aprueba la Ley 23/92 de Seguridad Privada que ordena la actividad y es primera norma de rango legal que regula todo el sector.
Con ello, “la Ley de Seguridad Privada pasa de poner el acento en el principio de la subordinación a desarrollar más eficazmente el principio de complementariedad a través de otros que lo desarrollan, como los de cooperación o de corresponsabilidad…” y, en resumen, ratifica que, en el modelo español, la seguridad privada es auxiliar, complementaria, subordinada, colaboradora y controlada por la Seguridad Pública.
A efectos de la Ley se entiende por seguridad privada: “el conjunto de actividades, servicios, funciones y medidas de seguridad adoptadas por personas físicas o jurídicas, públicas o privadas realizadas o prestadas por empresas de seguridad…
Todo ello, para hacer frente a actos deliberados o riesgos accidentales… con la finalidad de garantizar la seguridad de las personas, proteger su patrimonio y velar por el normal desarrollo de sus actividades”.
Por tanto, y según se expresa en la Ley, “… la seguridad privada se ha convertido en un verdadero actor de las políticas globales y nacionales de seguridad”.
En este sentido, no siendo defendible ni planteable la privatización de la seguridad pública, las voces altisonantes no salen del absurdo, quizá desconocedoras de la realidad y evolución de la seguridad privada dentro de la sociedad actual y la evidencia de que no es sostenible como alternativa a las posibles carencias de la seguridad pública Para darse cuenta, solo tendrían que imaginar lo que sería un día normal sin la seguridad privada.
Un día sin la seguridad privada
Si un día al despertarnos observáramos que las empresas y profesionales de la seguridad privada dejaron sus puestos y misiones… las armas, la vigilancia, la custodia y protección de los bienes y personas… ¿qué pasaría?
Pues sencillamente tendríamos un caos general de tamaño descomunal.
Un caos provocado sencillamente por la desaparición sin alternativa de una seguridad privada, en la que, solamente en España, trabajan, según datos del Ministerio del Interior, más de 1.500 empresas acreditadas, con más de 100.000 profesionales habilitados.
Y, muy especialmente, ¿qué pasaría en las más de tres mil infraestructuras críticas y esenciales, áreas industriales, polvorines, transporte público, hospitales, puertos y aeropuertos, etc.? ¿Cómo se gestionarían grandes eventos culturales o deportivos donde pueden llegar a trabajar más de 500 vigilantes de seguridad en uno solo de ellos?
En el mejor de los casos, se incrementarían las amenazas y los riesgos de actos violentos, robos, atracos, agresiones, vandalismo o, incluso, podría colapsarse la actividad normal dado que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad no podrían estar presentes.
Es evidente que la sociedad depende, especialmente con misiones preventivas, de la Seguridad Privada, como auxiliar y complemento de la Seguridad Pública en todas aquellas actividades, específicas, como lo es en las infraestructuras de transporte, industriales, comerciales o, caso especial, como el correspondiente a la mayoría de las infraestructuras críticas o estratégicas del país, cuya seguridad interna y de funcionamiento debe costearse por sus operadores, sin contar la actividad aparte que tienen los efectivos de la Seguridad Pública para garantizar la Seguridad Ciudadana en todos los entornos de su competencia.
En este sentido, capítulo aparte merece hacer constar que, para el normal desarrollo de la seguridad privada, se requiere una permanente revisión y ampliación rigurosa de los programas de formación, básica y de especialización, de todos los niveles profesionales del sector, en lógico acercamiento y complemento de los niveles de capacitación de la seguridad pública.
Es de subrayar un marco y concepto muy básico a tener en cuenta, como es el hecho de que la Seguridad Humana y Seguridad Ciudadana requieren del concurso y cooperación de la Seguridad Pública más la Seguridad Privada, logrando pasar de la simple “acción preventiva” al “compromiso preventivo” con una seguridad única, y sobre la base de los nuevos recursos implantados y en desarrollo, tanto de redes como de planes específicos, dentro del Ministerio del Interior, de quien depende, en definitiva, la regulación y control de la seguridad privada.
Finalmente, no se hagan lío los que piensen que la especialización y el crecimiento paralelo de la seguridad privada es una forma de privatización de la seguridad pública. El normal desarrollo de la sociedad, presenta nuevas complejidades, retos y exigencias que sólo se puede afrontar correctamente con soluciones nuevas y cooperativas.
No es eficiente plantear que sea la Seguridad Pública la que preste atención a este vastísimo campo de especialización, sino que los nuevos desafíos han de contar con un sector privado reforzado, bien formado y dotado de medios específicos de seguridad física y lógica, a fin de realizar su complementaria labor de la mejor manera posible y con la mejor capacitación.
Del mismo modo, no se puede aplazar más el canalizar situaciones irregulares que permanecen enquistadas, como lo es el volver requisito para el ingreso a la actividad de los cuerpos de la Seguridad Privada desde la oficializada Formación Profesional, en todos sus niveles.
Dedicado por más de 30 años a la Consultoría e Ingeniería de Seguridad y Defensa por más de 20 países como asesor para asuntos aeroportuarios, puertos, cárceles hospitales, entidades bancarias, museos, transporte ferroviario, servicios de Correos y puertos.
Es socio fundador y presidente para Europa de la Federación Mundial de Seguridad (WSF), Director para Europa de la Secretaría Iberoamericana de Seguridad, Asesor gubernamental en materia de integración operativa de seguridad pública y privada en diversos países latinoamericanos.
Como experiencia académica es profesor de postgrado en ICADE (Universidad Pontificia Comillas de Madrid) desde 1986, codirector de postgrado en la Facultad de Psicología (Universidad Complutense de Madrid) y director del Curso de Seguridad en Infraestructuras Críticas del Instituto General Gutierrez Mellado de la UNED, así como conferenciante habitual y profesor en más de 20 países sobre Seguridad y Defensa.
Su representación institucional es principalmente como Miembro Experto de la Comisión Mixta de Seguridad del Ministerio del Interior, Director para Europa de la Federación Panamericana de Seguridad (FEPASEP), representante “ad honores” de la Federación de Empresas de Seguridad del MERCOSUR (FESESUR), asesor del BID (Banco Interamericano de Desarrollo) para asuntos de Seguridad Ciudadana y Observatorio de Delincuencia en Panamá, socio fundador y de honor del Observatorio de Seguridad Integral en Hospitales (OSICH), socio fundador y vicepresidente de la Asociación para la Protección de Infraestructuras Críticas (APIC)
Autor y director de la BIBLIOTECA DE SEGURIDAD, editorial de Manuales de Proyectos, Organización y Gestión de Seguridad
Actualmente es presidente y director del Grupo de Estudios Técnicos (GET), socio-senior partner de TEMI GROUP Consultoría Internacional y socio-director de CIRCULO de INTELIGENCIA consultora especializada.
Tendencias 21 (Madrid). ISSN 2174-6850