En palabras de los coordinadores de dicho número de la selección de las obras, Jesús Galindo Cáceres y Héctor Gómez Vargas

“Entre los últimos días del mes de septiembre y los primeros del mes de octubre, del año 2010, publicamos una convocatoria para celebrar a los libros que nos han construido como campo de estudios en Iberoamérica. Esa convocatoria abre este número setenta y cinco de Razón y Palabra. La convocatoria circuló por todos los medios posibles a nuestro alcance buscando tener la mayor participación posible de los actuales actores del campo de la comunicación iberoamericano. La propuesta fue muy simple, hay libros que nos han marcado, vamos celebrando su importancia con un ensayo sobre su contenido, ubicación y contexto. (…) Respondió el mundo iberoamericano con setenta y cinco libros posibles. Unos meses después el resultado final es de treinta y dos textos sobre treinta y dos libros”

La verdad es que para mí ha sido inesperado el encontrarme rodeado de algunos de mis clásicos: Luhmann, Kerckoven, Giddens, Mathelart, Watzlawick; Klapper, Bernays, Baudrillard, Adorno, Sartori, etc. Entre los 32 libros seleccionados hay autores de diez países distintos aunque la mayoría se concentran en dos países: España y México. Entre los españoles figuran Manuel Martín Serrano (con dos obras); Jesús Martín Barbero; Ignacio Ramonet; Eulalio Ferrer y Javier Echeverría. Autores todos ellos por los que siento un gran respeto y a los que me unen lazos personales, excepción hecha de Ignacio Ramonet, pues a pesar de ser paisanos, nunca hemos coincidido todavía.

Martin Serrano fue profesor mío en la Escuela Oficial de Publicidad y en la actualidad es Miembro de la Academia de FISEC ; Jesús Martin Barbero me ha prologado la edición del 2008 de “Estrategias de Comunicación”; con Eulalio Ferrer, recientemente fallecido, compartí la nómina académica del Instituto Nacional de la Publicidad y su hija Ana Sara fue la primera que me invitó a cruzar el charco para impartir postgrado en la universidad privada CADEC en México D.F.; Javier Echeverría también fue el primero que me invitó- pero esta vez dentro de España- a participar en una Universidad fuera de la Complutense. Recuerdo muy bien que fue en unas muy bellas Jornadas sobre El Juego, en el marco siempre incomparable de San Sebastián/Donostia. Echeverría también escribió en 2003, un texto muy generoso sobre el mismo libro de “Estrategias de Comunicación” que suscita este comentario.

Desde aquí mi agradecimiento a Jesus Galindo Cáceres y a Héctor Gómez Vargas por haberse acordado de mí.