DERECHOS HUMANOS: J. R. Blanco Aristín

INSTITUTO DE DERECHOS HUMANOS SRI AUROBINDO

Este adagio o aforismo, significa CEDAN LAS ARMAS ANTE LA TOGA


Cedant arma togæ (Marco Tulio Cicerón)
La frase tiene un sentido demasiado profundo como para desdeñarlo, significa que las "armas" y el poder militar debe ceder antes las togas. Ojalá sea o fuera así, y que allí donde haya violencia ceda ante la Ley, y donde hay uso de la fuerza militar ceda ante las togas y la justicia que falta...

Antes en Roma, la toga era un símbolo de la magistratura y de cargos públicos, como senador. Al igual que en la actualidad, que las togas son de diversos tipos, pero que letrados, letrados de la administración de Justicia (LAJ) antes llamados secretarios judiciales y encargados de la oficina de tramitación judicial de los juzgados y tribunales, y los fiscales y jueces. La diferencia hoy es que fiscales, jueces, pueden tener unas togas con "puñetas" que son unos adornos en las mangas, y unas medallas o escudos. También hay togas en las universidades, incluso con birretes.

Pero lo más importante es que por encima del poder militar -incluso de generales- estaba el poder de la palabra, la verdad y libre exposición de la defensa del pueblo, de la ley, del derecho y de la JUSTICIA.

Es un símbolo de la Justicia y se ve en juzgados y tribunales, y su color suele ser negro.

Señalar algunas otras frases célebres de CECERON...
 

Cedant arma togæ (Marco Tulio Cicerón)
Tuve la oportunidad de hacer un master o título propio en la UCM en 2000-2001 sobre RETÓRICA Y ARGUMENTACIÓN JURÍDICA, y me sorprendió enormemente el poder que la ORATORIA había tenido en la historia de Roma, en la república y en el imperio. Como es Senado se construía con los instrumentos de la Retórica, y como sus usos, leyes y normas tenían un poder que suponia un cambio la opinión y parecer de las personas. Lo mismo ocurre según la intención profundo y la significación psicológica del uso de la palabra y del lenguaje... (a veces para atacar, a veces para defender, a veces para herir, y otros para sanar y curar... también).

Pero también hay una enorme retórica en el lenguaje judicial de todos los tiempos que muestra la "mens iudicialium iudicum" o "mens iudex", la mentalidad de un estamento judicial determinado en un país determinado sobre un tema o asunto concreto y determinado. Esto significa que la aplicación de la ley, su interpretación y uso, su destino es logrado o malogrado según el sesgo cognitivo, intención política, preferencia personal (hombre, mujer, joven, anciona, progresista, conversador, amigo, etc., etc.) o espíritu de verdad y rectitud del juez. Sin duda he visto y he encontrado en muchos más de 25 años, de ejercicio de la abogacía, jueces y juezas verdaderamente de una noble, rectitud y magnanimidad extraordinaria que hace no solo a la clase judicial una clase social superior dentro de la sociedad y del estado sino dentro de la especie humana, con un calidad, calidez, humanidad, y bondad muy superiores a la media de la sociedad, y en los más altos niveles de la misma. Pero no siempre esto es lo común, sino algo extraordinario, y hoy en día hay miles de jueces y juezas jovenes con un saber hacer muy bueno y profundo, se nota quienes tienen vocación para ello...



La finalidad, o una de ellas, es cambiar la intención y opinión del auditorio. Y esto es un poder tan magnético que a los intelectuales les sorprende tanto que como los más mentirosos y digamos "fútiles" políticos son capaces de arrancar el aplauso y la afinidad de miles y millones de personas, cuando es auto-evidente que mienten, engaños, embaucan, enlucen para ocultar, y ocultan... Tal vez haya que descubrir, para quien no lo sepa aún, que eso puede ser debido a un maravilloso poder de la palabra sobre la ignorancia y el desconocimiento. 

Hay un tipo de retórica podemos decir, académica o universitaria, muy típica que consiste en cerrar grandes discursos plagados de citas de autores de todo tipo. Así el orador o profesor parece una persona sabia, puesto que sabe mucho de lo que dice, y puede ser simplemente extraído de un diccionario de citas, sin haber leído los libros que cita, y esto es lo más común...

Sin embargo en estos casos, el "aturdimiento" y confusión de tantas mentes e ideas cruzadas no solo no ayuda sino que dificulta la comprensión, pero es usado para birlar, lucirse y parecer ser sabios, y esto es -podemos decir- una arte de la levadura de la palabra, o "palabrismos", o si se me permite haciendo un juego de palabras "Mala-palabristas", es decir, charlatanes, embaucadores, y engaña tontos (sobre todo en política) de todo tipo.

He usado muchos años,  miles de horas, y cientos de escrito de todo tipo, en los que he usado el instrumento del pensamiento para buscar razones, en dialécticas, lógicas, para ampliar los motivos, argumentos, razones y motivos de defensa de todo tipo de casos, y me ha maravillado como en verdad si puede ser un arte la retórica, más allá del uso abusivo que de ella se hace o se pueda hacer por personas sin escrúpulos, ambiciosos u opulentos. 

La corrupción del lenguaje y las disonancias cognitivas están ahí para el que las quiera descubrir, observar y poder usar para librarse de los "trampantojos " -como diría Santa Teresa de Jesús- de la "inteligensia"  -palabra también usada en sus obras por Sri Aurobindo al referisse a los "filisteos" y barbaros modernos...

Ese térmio es muy apropiado para referirse a la IA, en abreviatura, y que tiene los mágicos nombre de INTELIGENCIA y Artificial que ahora lejos de significar algo negativo parace que se le da un laurel benéfico y semimágico. Ya iremos viendo, como algunos casos perniciosos, la IA es una pseudo-inteligencia, o disonancia cognitiva, y una prevaricación del lenguaje, como se ha dado llamar en otro foros, muy grave, pero esto lo dejo para otro artículo posterior más extenso al respecto de este punto.

Pero no solo me refiero aquíe a la diferencia de conocimiento entre diversos operadores, como si fuera o estuvieran en una escalera, en la que en cada escalón uno sabe algo más o algo menos que el otro, y las diferencias por el conocimiento pueden ser sumanente graves, importantes y trascendentales -y en esto radica uno de los peligros más graves de la inteligencia, o del ABUSO DE INTELIGENCIA/s para controlar al que no sabe, al que no puede conocer, o no tiene capacidad de discernir. Valga esta referencia para hacer una denuncia pública contra el abuso tremendo de la Inteligencia/s, como trampas y manipulación del lenguaje, y otras técnicas psicológicas para engañar y embaucar, para obtener seguidores, o hacerse un experto de la retoríca vacia y falsaria del engaño y manipulación (que tantos ejemplos tenemos en la política de hoy y de ayer....)

La retorica fue entendida como el arte de la persuacion, y esto ha sido la tecnica en las que los políticos, oradores, predicadores, y todo tipo de malabaristas o charlatanes han conseguido fama, reconocimiento y prestigio en la historia...

Pero más allá de engañar más o menos a un auditorio, o de hacerles pasar un buen rato, con humor y otros chistes, o ironías, el foro de las retóricas es un foro muy elemental e infantil donde no hay o no se transmite ningún tipo de conocimiento. Y que el conocimiento brilla por su ausencia, y puede ser usado como un medio de ataque contra otros grave...

Cedant arma togæ (Marco Tulio Cicerón)

Juan Ramón Blanco Aristin


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Viernes, 13 de Diciembre 2024

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Juan Ramón Blanco Aristín
Juan Ramón Blanco es Licenciado en Derecho y abogado en ejercicio. Es asimismo asesor jurídico de Tendencias21, Secretario General Técnico del Instituto Ciencia y Sociedad y socio fundador del Instituto de Derechos Humanos Sri Aurobindo.






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