Los que me conocen saben que suelo actualizar los contenidos de mis cursos y seminarios a medida que voy avanzando en mis investigaciones. Y ese avance hoy está representado por la 2º Fase de la NTE, una aportación que cierra el ciclo revisionista que inicié en 1995 y que será objeto de mi próximo libro.

Pero antes de publicarla considero conveniente debatirla con profesionales y académicos. Tomar nota de las críticas y tratar de subsanar sus posibles defectos. Con esa intención la vengo presentando desde hace un año en diferentes foros. Entre los profesionales, figura el Congreso anual de CONFIARP en Montevideo en 2013 y en el Festival de la Comunicación de La Habana en junio 2014 organizado por la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales. Y entre los foros académicos figura la UNAM de D.F., y la Universidad de Guerrero en Octubre 2014 (campus de Acapulco y de Chilpancingo). 

Tal y como vengo narrándoles desde este blog, de México salté a Chile y allí volví a presentar la 2ª Fase de la NTE los días 21 y 22 de Octubre en la Universidad Santo Tomás de Santiago de Chile. El seminario titulado “Cómo dirigir en entornos turbulentos sin perder el Norte” era mi segunda intervención en la Santo Tomás, pues la anterior había sido en la sede de La Serena, de grato recuerdo para mí.

Quiero destacar que tanto este seminario como las anteriores presentaciones de la 2ª Fase de la NTE están evidenciando una buena acogida. Algo que no ha dejado de sorprenderme pues lo normal hubiese sido que, por su carácter rompedor, suscitase reticencias. Pero en vez de reparos lo que está dando lugar es a intensos debates. Un buen ejemplo fueron las 10 horas de intenso diálogo con los participantes: profesores, graduados y estudiantes en la Universidad Santo Tomás. Lo que, de paso, vino a confirmar una vieja idea mía de que el nivel de un curso lo marcan los alumnos con sus preguntas e intervenciones más que el profesor. A mí solo me queda dar las gracias a los profesores Darío Cuesta Cristóbal y Raúl Bendezú por haberme dado esa oportunidad y a los participantes por su cálida acogida y su participación activa.