Notas
Escribe Antonio Piñero
Pregunta: Me gustaría saber su opinión acerca de la afirmación que hace Jesús de que el reino de Dios está entre nosotros, como se cita en Lucas 17:21 "Ni dirán: Helo aquí o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros." RESPUESTA: Se trata probablemente de una de las sentencias más difíciles de todo el Nuevo Testamento. No es posible encontrar una unanimidad entre los críticos en cuanto al significado del griego idoù gàr he basileía toû theo entoòs hymôn estìn, en especial el «entòs hymôn». Teniendo en cuenta que tal como se ha transmitido –el contexto es sin duda redaccional- el entòs hymôn se refiere a los fariseos, parece muy improbable que ni siquiera en la mente del evangelista Lucas, que recompone la escena en torno a un dicho suelto de Jesús, esté clara la idea de que «el reino de Dios esté ya presente en medio de…» (o «entre») ¡los fariseos! Por tanto, si la frase originaria se había transmitido aisladamente, y si resulta difícil estar seguro de captar su sentido, tenemos otro caso del deber del filólogo de interpretar el entos hymon de alguna manera que case con el significado de la mayor parte de las sentencias de Jesús referidas al Reino y entre las que no hay discusión. Ahora bien, la mayoría, y de una claridad deseable, hacen nítida referencia al Reino como entidad inmediata, pero futura. Por tanto, parecería más prudente filológicamente entender la frase de un modo que pudiera casar con esa mayoría. Por ejemplo, como que «el reino de Dios está a vuestro alcance» o «en un espacio que es el vuestro» (Fr. Bovon, El Evangelio de Lucas III, Salamanca: Sígueme 2004, 209-211). Al menos una conclusión me parece clara: al ser de dudoso significado no puede ser una sentencia contundente para demostrar que Jesús pensaba que el reino de Dios había venido ya. Hay otro argumento filológico de peso para no entender este texto clave –Lc 17,20- como escrito en pro del reino de Dios presente: apoyándose en la argumentación de R. H. Hiers (The Kingdom of God in the Synoptic Tradition, University of Florida Press, Gainesville, 1970, y The historical Jesus and the Kingdom of God. Present and future in the message and ministry of Jesus, University of Florida Press, Gainesville, 1973, Gonzalo Puente Ojea dio hace ya tiempo una explicación de este pasaje más concorde con lo que acabo de sostener en el párrafo anterior («A unos fariseos que le preguntaban cuándo iba a llegar el reino de Dios les contestó: La llegada del reino de Dios no está sujeta a cálculo, ni podrán decir: míralo aquí o allí; porque, mirad, ¡entre vosotros está el reino de Dios! En cambio a sus discípulos les dijo: Llegará un tiempo en el que desearéis vivir siquiera un día con este Hombre y no podréis. Os dirán: míralo aquí, míralo allí. no vayáis, no corráis detrás; porque igual que el fulgor del relámpago brilla de un extremo a otro del horizonte, así ocurrirá con este Hombre en su día...). Aunque pueda entenderse en cierto modo como presente el «“está” entre vosotros», todo el contexto de la perícopa se refiere a una venida futura de los «días del Hijo del Hombre»: «No se dirá» (v. 21a); «llegarán los días en los que...(v. 22); «así será el Hijo del Hombre en su día» (v.24), e igualmente en los vv. 30 («así será en el día en el que el Hijo del Hombre se revele... ») y 36» (Cf. Fe cristiana, Iglesia y Poder, Siglo XXI, Madrid, 1991, 134-136). Como puede observarse, todo el contexto alude en realidad al futuro. De hecho el presente estin puede ser sin problemas un praesens pro futuro, tal como lo es, ciertamente, el érchetai («viene» = «vendrá») de la pregunta de los fariseos que da lugar a la respuesta de Jesús. Y el sentido futuro es perfectamente congruente con la escena compuesta por Lucas: los fariseos preguntan: ¿Cuándo viene [= vendrá] el reino de Dios? Jesús responde precisando a sus discípulos: No os preocupéis de los que os anuncian esta venida: «Está aquí o allá»; será tan visible como la de un relámpago que brilla cerca, la percibiréis sin más. Y a los discípulos se aplica lo mismo que a los fariseos «el reino de Dios estará en medio de/entre vosotros». Pregunta: Asherah, la esposa de Dios, fue editada fuera de la Biblia, según una experta La Diosa Madre, pareja de Yahveh, ha sido exlcluida dolosamente de la Biblia, ante la construcción de un paradigma de hegemonía masculina, según revela una investigadora; Asherah, es la eterna Astarte, Ishtar, diosa del mar, del cielo y símbolo del árbol de la vida RESPUESTA: Es posible que haya ocurrido así. Pero no creo que haya sido por construir conscientemente un paradigma masculinista. Esto significa proyectar hacia milenios atrás nuestra mentalidad. probablemente quedó fuera por el impulso deuteronomista que luchó –desde la época del exilio en Babilonia y que es el responsable máximo de la biblia hebrea que tenemos hoy (sería interesante que los lectores pudieran leer una buena Introducción a lo que hoy se denomina Antiguo Testamento; no me atrevo a recomendar ninguna en español; consulte sin embargo, el libro de Julio Trebolle, “Imagen y palabra de un silencio”, de Edit Trotta, Madrid, 2012, que habla mucho de estos temas)– denodadamente por implantar de modo definitivo el monoteísmo en Israel. Para ello modificó textos con tradiciones muy antiguas, con claros restos de politeísmo en Israel, e hizo aparentar que ya casi desde el principio Israel fue rígidamente monoteísta. Pero no fue así. Saúl, el primer rey de Israel adoraba también a Baal como muestra que le puso al más pequeño de sus hijos un nombre que contenía este vocablo. En efecto, si hacemos caso a la crónicas, sin duda legendarias, uno de sus hijos tuvo el nombre de Ish-Baal (“Varón de Baal”) que la historiografía hebrea cambió en Ish-Boshet = “Varón de vergüenza” (1 Crónicas 8,33; hay más casos de estos cambios para denigrar a reyes malvados). Además en los Papiros de Elefantina (hacia el siglo V a.C.), que recogen textos de una colonia judía de mercenarios que allí residía, se da cuenta de que se adoraba a Yahvé junto a su consorte Aserá /Asherá/ Astarté. Por tanto, la lucha por el monoteísmo fue intensa, eliminó todo rastro de la consorte de Yahvé y de otros posibles dioses (que se convirtieron en ángeles) y se prolongó en Israel no solo en la edición de los textos sacros cono en la vida del pueblo hasta la época helenística, por lo menos (que comienza con la muerte de Alejandro Magno en el 323 a.C.). Pregunta: En general,en la mayoria de Biblias Cristianas,en el Salmo 110 se traduce "rey justo" como "Melquisedec",y tambien en el primer versiculo de este Salmo la tradicion lo ha asociado a Jesucristo("dijo Yahveh a mi Señor"),pero el punto de vista de los rabinos Judios parece ser muy distinto(hasta por lo poco que yo he leido,parece ser que muchos no coinciden en la misma interpretacion),hace poco estuve leyendo este tema explicado de un Judio,y el comentaba que respecto al versiculo 1 del Salmo 110,David escribia los Salmos inspirado por Dios para los levitas y ellos lo recitaban...por lo cual supone este Judio que el titulo de Señor va atribuido a David..y respecto a Melquisedec tambien explicaba que ni tenia nada que ver con las traduccion cristianas que lo han cambiado poniendo Melquisedec(cuando segun el es una mala traduccion "rey justo" como "Melquisedec")y mucho menos atribuirlo a Jesus...,perdone que no se lo pueda detallar mas,pero esque no guarde la web donde lo lei...Espero que me haya entendido perfectamente y me lo pueda explicar para poder comprenderlo mejor,Gracias. Y por ultimo,en el Ev. segun San Mateo 27:4-9 el evangelista explica que Judas Iscariote se arrepintio,que tiro las 30 monedas de plata y se ahorco,y fueron los Sumos Sacedotes los que compraron el "campo del Alfarero"...Ahora bien no entiendo una cosa,en Hch 1:19-21 es totalmente distinto,segun el autor y la predicacion atribuida a San Pedro parece ser que Judas Iscariote no se arrepintio y que fue el mismo quien compro el "campo del Alfarero",ademas de narrar la muerte de Iscariote(que parece ser que tampoco fue un suicidio segun el autor de Hch) totalmente distinta:"cayo de cabeza,revento por medio y todas sus entrañas se esparcieron."...Le rogaria tambien Profesor,que si no le quita mucho tiempo,haber si me lo pudiera explicar bien,gracias. Por ultimo,queria decirle si me puede aconsejar una buena biblia Hebrea en Español (Juía o no confesional si hubiera),y agradecerle el tiempo que se toma con sus lectores,muchas gracias Profesor. RESPUESTA: Respecto a 1. Efectivamente, la interpretación judía es muy distinta a la cristiana. Pero ninguna de las dos se acerca a lo que probablemente entendió el primer lector que leyó el salmo en el primer momento. Y eso sería la importante. Vea, en una buena Biblioteca eclesiástica, un Comentario al libro de los Salmos, que le aclarará todo. Como judíos y cristianos parten de un concepto de la inspiración divina según el cual favorece su propia interpretación, es imposible discutir desde el punto de vista histórico. E importante es que se o no verdad la exégesis cristiana, este Salmo contribuyó decisivamente al desarrollo de la cristología. Pero desde el punto de vista de la historia todas estas interpretaciones son fantasías. Respecto a 2: De mi libro “La verdadera historia de la pasión”, EDAF, Madrid, 2011, le transcribo lo siguiente: "La historia de la pasión está empedrada de alusiones y citas a textos del Antiguo Testamento considerados profecías mesiánicas al menos por los cristianos: en total unos 80/90 pasajes de la Escritura judía aparecen citados o aludidos claramente en la Historia del Pasión . Este notable monto de acciones y dichos de Jesús rodeados por textos de la Escritura o expresados con palabras de ésta hace al menos sospechar que algunos eventos: a) Hayan sido acomodados para que cumplan con el esquema mental “promesa (Antiguo Testamento) / cumplimiento (Jesús)”. Estos son los casos, sobre todo en Mateo, en los que se afirma expresamente “Y esto sucedió para que se cumpliera la Escritura”. Algunos ejemplos claros: Mateo altera la redacción del Evangelio de Marcos para que cuadre bien con la Escritura; compárese Mc 11, 2 con Mt 21, 2-5, que es un caso célebre: para que se cumpla al pie de la letra el texto conjunto de Is 62, 11 + Zac 9, 9, el evangelista presenta a Jesús montado literalmente en dos animales a la vez en vez de uno. Otros dos casos son Mt 26, 56 (la huida de los discípulos durante el prendimiento de Jesús) y 27, 9-10 (las treinta monedas de la traición de Judas empleadas para comprar un campo conforme a Zac 11, 13) . b) Hayan sido creados expresamente a partir de algunos de esos textos de las Escrituras considerados mesiánico-proféticos. Dos ejemplos de este último proceder: Primero: la muerte de Judas. Ésta presenta dos versiones totalmente distintas en el Nuevo Testamento. La primera en Mateo (27, 5), por ahorcamiento; la segunda en los Hechos de los apóstoles, a efectos de una caída (“adquirió un campo, y cayendo de cabeza, se reventó por la mitad y sus entrañas se derramaron”: 1, 18). Es evidente que ambas versiones no pueden ser verdaderas a la vez, aunque de la primera sea garante en apariencia e indirectamente la Escritura (“Así se cumplió lo dicho por el profeta Jeremías cuando dijo: ‘Y tomaron las treinta piezas de plata’…”: Mt 27, 9) , y en la segunda lo sea el apóstol Pedro en un discurso que pronuncia antes de la elección de Matías como sustituto de Judas en el colegio de los Doce. Hay notable unanimidad entre los comentaristas al señalar que la muerte de Judas por ahorcamiento es un evento creado a imitación del episodio de Ajitófel, que traicionó al rey David y luego se ahorcó comido por los remordimientos (2 Sam 15, 1-37; 17, 23). Son curiosos e interesantes los paralelos entre la narración del Antiguo Testamento y la de los Evangelios: David, cuando su amigo y consejero Ajitófel lo traiciona (2 Sam 15, 12), cruza el torrente Cedrón (2 Sam 15, 23; cf. Jn 18, 1) y sube la cuesta del Monte de los Olivos. Allí llora con la cabeza cubierta y los pies desnudos (2 Sam 15, 30 = la agonía de Jesús en Getsemaní); entonces, al parecer, David se pone a rezar (v. 32 = plegaria de Jesús en Getsemaní). David, compasivo por la suerte de los demás, ordena a Sadoc y a los suyos que vuelvan a Jerusalén (2 Sam 15, 27 = Jn 18, 8: “Dejad id a éstos…”). Finalmente, Ajitófel ve que sus planes contra David fracasan y se ahorca (2 Sam 7, 23 = muerte de Judas también por ahorcamiento). La versión del fallecimiento de Judas de los Hechos de los apóstoles está inspirada probablemente en la historia de la muerte del rey perverso Antíoco IV Epífanes –que tanto molestó a los judíos por sus intentos de asimilarlos forzadamente a la tradición y religión griegas- en 2 Mac 9, 9-12: “Vino a caer Antíoco de su carro y todos los miembros de su cuerpo se descoyuntaron… postrado en tierra… del cuerpo del impío pululaban gusanos, sus carnes caían a pedazos… y su infecto hedor apestaba a todo el ejército”. Respecto a 3: La mejor Biblia, con mucho es la de Kittel-Kahle de la Deutsche Bibelgesellschaft. Vea Internet, por favor. Saludos cordiales de Antonio Piñero Universidad Complutense de Madrid www.antoniopinero.com
Lunes, 21 de Diciembre 2015
Comentarios
|
Editado por
Antonio Piñero
Licenciado en Filosofía Pura, Filología Clásica y Filología Bíblica Trilingüe, Doctor en Filología Clásica, Catedrático de Filología Griega, especialidad Lengua y Literatura del cristianismo primitivo, Antonio Piñero es asimismo autor de unos veinticinco libros y ensayos, entre ellos: “Orígenes del cristianismo”, “El Nuevo Testamento. Introducción al estudio de los primeros escritos cristianos”, “Biblia y Helenismos”, “Guía para entender el Nuevo Testamento”, “Cristianismos derrotados”, “Jesús y las mujeres”. Es también editor de textos antiguos: Apócrifos del Antiguo Testamento, Biblioteca copto gnóstica de Nag Hammadi y Apócrifos del Nuevo Testamento.
Secciones
Últimos apuntes
Archivo
Tendencias de las Religiones
|
Blog sobre la cristiandad de Tendencias21
Tendencias 21 (Madrid). ISSN 2174-6850 |