La historia, tal y como la conocemos en la actualidad (a pesar de otras opiniones aún no hemos conocido el "fin de la historia") fue una actividad intelectual que inventaron los antiguos griegos. En las culturas del Próximo Oriente, en Egipto y en otros muchos pueblos, existieron crónicas y anales que registraban a modo de acta notarial las principales hazañas de sus reyes, de sus dinastías y de sus clanes...

Sin embargo, nunca se preguntaron por las CAUSAS que habían provocado tales acciones ni reflexionaron acerca de los agentes y las fuerzas que se vieron implicadas en el origen y desarrollo de las mismas. Los griegos, en suma, fueron los primeros, en dar al estudio de los acontecimientos del pasado una dimensión estrictamente humana, enun proceso de racionalización paralelo al que siguieron los primeros médicos (Hipócrates, en su tratado Sobre la enfermedad sagrada) y los sofistas en el ámbito de la política.

TUCIDIDES (460-399 a.C.) compuso una monumental obra, Historia de la Guerra del Peloponeso.
Influido por los grandes intelectuales de su momento (Anaxágoras, Protágoras, Gorgias) nuestro autor vivió el ambiente ilustrado en el que circula como moneda corriente la creencia en el carácter convencional de la Ley, en el que se busca una interpretación racionalista del universo y de la realidad social de la comunidad o polis.
Al igual que el médico debe basar su diagnóstico de la enfermedad a partir de una sintomatología etiológica, la tarea del historiador será la de interpretar los acontecimientos de la vida social de los hombres partiendo de la observación, del análisis y del estudio crítico de sus auténticas causas naturales.

De este modo, Tucídides, criado en este ambiente, se verá abocado a escribir un tipo de HISTORIA POLITICA, fundada en unas bases científicas, una historia racionalista. Y más que el relato de los unos acontecimientos históricos concretos (hoy en día de escaso interés) loque interesa a Tucídides es proveerse de un método hisotriográfico

UN METODO HISTORIOGRAFICO

Quien se dedique a escribir historia deberá atender a los problemas concernientes a la heurística, esto es, a todo lo relativo al asunto -muy complejo- de las fuentes históricas de las que se bebe; fuentes que no deben aceptarse sin más sino que deben ser sometidas a una crítica interna, estudiando su autenticidad, su coherencia, y valorando sus contradicciones.
A este propósito no resulta ocioso recordar que una de las característica diferenciales entre un historiador antiguo y el historiador moderna es que con frecuencia durante la antigüedad, antes de que apareciera la profesionalización del oficio (recordemos los nombres de César, Jenofonte, Josefo o Polibio) el historiador es alguien que ha participado directamente en los acontecimientos y sucesos que son objeto de su narración histórica. Esta singularidad es la que se conoce conel nombre de AUTOURGÍA o "participación", concepto típico griego y paralelo al concepto de AUTOPSIA "ser testigo presencial".

Tucídides se ha autoimpuesto como objetico una irrenunciable voluntad de objetividad, y dejar de lado los bellos relatos seductores de poetas y las sesgadas interpretaciones de los líderes religiosos de la comunidad. La historia debe abandonar esa ingenuidad de corte etnográfico y teocrático y establecer un método de análisis riguroso. Desde Tucídides, la divinidad no tiene cabida en la interpretación de la historia y al operar así nuestro autor nohace sino actuar de portavoz del espíritu ilustrado de su época, durante la cual se comienza a tener una confianza cada vez mayor en el propósito del hombre por entender su realidad circundante en términos estrictamente científicos y naturales. Ni siquiera el AZAR (Tyche) es enTucídides una potencia divina, sino más bien el límite azaroso que enocasiones tienen los hechos humanos.

UNA ADQUISICION PARA SIEMPRE

Su pretensión fue la de ser una adquisición para siempre, porque se propone establecer los fundamentos mismos de un método correcto de narrar los acontecimientos. Para él ello sólo será posible si se es capaz de extraer de un caso particular y concreto (los acontecimientos bélicos protagonizados por atenienses y espartanos durante los 20 años de guerra) unas categorías de carácter universal.

Sólo así se podrá conseguir transmitir unos conocimientos políticos de valor duradero, que trasciendan el momento histórico del conflicto que nos relata. Tucídides extrae del análisis de una situación concreta la certeza de que la verdadera causa y la raíz última del estallido bélico no fue otra que el TEMOR que sintieron los espartanos a perder su influencia geoestratégica, así como el deterioro de sus INTERESES en beneficio del expansionismo y la irrfrenable ambición de sus adversarios atenienses.

Así aborda Tucídides la cuestión de la UTILIDAD de la historia. ¿Podremos afirmar, pues, que la Historia sea "magistra vitae"?. Tucídides está convencido de que la historia no se repite, y que por tanto no cabe interpretar unos acontecimientos como garantía segura para elfuturo. Ahora bien, para lo que sí vale la Historia es para encontrar en los sucesos del pasado una ayuda con la que adquirir la capacidad de iluminar situaciones similares que puedan presentarse en el futuro.

¿Qué pensáis de todo esto? ¡Qué lejos andaba ya Tucídides de una historia teocrática, aún no desterrada del todo en nuestros días!

En todo caso os recomiendo leer el Discurso de los Melios y los Atenienes, capítulos 85 a 113 del libro V de la Historia de la Guerra del Peloponeso. La podéis encontrar traducida en Alianza Editorial, Libro de Bolsillo.

Saludos