Qué tiene a tu alma atenazada,
para que tu juventud se haya esfumado
en una rutina comercial
Para que tus ventanas sean estrechas
Para que tu sonrisa sea sólo una mueca,
aunque de tu garganta surjan sonidos de agua cantarina
Qué impidió que crecieras
en todas las direcciones que tu naturaleza prometía
Dónde se perdió esa energía
para saltar, volar, cantar, reír a carcajadas,
que nos prometía tu sola presencia
Deshace niña ese nudo
Prepara una ligera maleta y ponte presta para el viaje
Con cada amanecer surge una nueva oportunidad de vivir
Y... a ti te está esperando
A Laura
( Madrid, 2002)