La satisfacción de los sentidos,
el no sentido de tanta satisfacción.
Puertas que se abren para llegar al interior,
bloqueos que se producen para negar la profundidad
Esfuerzos que persisten ante tanta resistencia,
corazón que se nutre de tanto dolor,
dolor que la rabia pretende resolver,
ira que se convierte en destrucción de todo.
De esta manera persistimos en nuestro sueño,
así lo trascendente no se vislumbra;
todo es dolor, frustración, sueño y muerte.
El ser humano sigue buscando respuestas
a las preguntas mal formuladas