El Día Internacional de la Seguridad de la Información tiene un especial valor en los tiempos actuales. Con Internet nos encontramos en un momento en el que la información privada de los usuarios tiende, cada vez más, a ser más pública, en el que los niveles de información alcanzan límites históricos y en el que la sociedad, en general, se ha dado cuenta del poder que puede dar la información. Las redes sociales, como Facebook, Twitter o Instagram, que muestran aspectos de nuestras vidas privadas y las apps de mensajería instantánea están auge y han impactado de forma radical en la sociedad de la información. “Es cierto que estas plataformas, en los últimos años, han mejorado enormemente sus políticas de privacidad. Sin embargo, en último extremo, la efectividad de estas medidas siempre dependerá de los usuarios. Así que una educación deficiente, en cuestiones de seguridad de los usuarios, es lo que más puede repercutir en la seguridad de estas redes sociales. Whatsapp es un servicio de mensajería con ciertas connotaciones de red social y cuyos problemas están vinculados, en su mayor parte, con la privacidad de los usuarios” señala Antonio Guzmán Sacristán, Coordinador del área de Innovación en Telefónica.
Según Guzmán Sacristán “cuando el acceso a la información se realiza desde una perspectiva del usuario final, surgen dos alternativas: el usuario percibirá servicios cada vez más personalizados y alineados con sus intereses en los que la usabilidad será tan importante como la seguridad y la propia funcionalidad de los servicios. Por otro lado, los usuarios cada vez percibirán más la necesidad de preservar la integridad de sus datos personales. Esto supondrá la aparición o la consolidación de soluciones o productos que faciliten fuertes niveles de protección y de transparencia, entendida esta última como la facilidad de que el usuario pueda saber quién está consumiendo sus datos y le habilite cierto nivel de control”.
Telefónica, en su estrategia de ciberseguridad representada en ElevenPaths, desarrolla nuevos e innovadores productos desafiando el estado actual de la seguridad y replanteando la relación entre ella y las personas. La seguridad es una característica que debe estar siempre presente en la tecnología, alerta para proteger nuestra vida diaria pero sin entorpecer nuestra actividad profesional o personal. Para la compañía, todos los productos de seguridad deben ser capaces de poder evolucionar al mismo ritmo y eso sólo es posible transformando la concepción de seguridad y creando estructuras ágiles que permitan ir un paso por adelante de los atacantes.
Según Guzmán Sacristán “cuando el acceso a la información se realiza desde una perspectiva del usuario final, surgen dos alternativas: el usuario percibirá servicios cada vez más personalizados y alineados con sus intereses en los que la usabilidad será tan importante como la seguridad y la propia funcionalidad de los servicios. Por otro lado, los usuarios cada vez percibirán más la necesidad de preservar la integridad de sus datos personales. Esto supondrá la aparición o la consolidación de soluciones o productos que faciliten fuertes niveles de protección y de transparencia, entendida esta última como la facilidad de que el usuario pueda saber quién está consumiendo sus datos y le habilite cierto nivel de control”.
Telefónica, en su estrategia de ciberseguridad representada en ElevenPaths, desarrolla nuevos e innovadores productos desafiando el estado actual de la seguridad y replanteando la relación entre ella y las personas. La seguridad es una característica que debe estar siempre presente en la tecnología, alerta para proteger nuestra vida diaria pero sin entorpecer nuestra actividad profesional o personal. Para la compañía, todos los productos de seguridad deben ser capaces de poder evolucionar al mismo ritmo y eso sólo es posible transformando la concepción de seguridad y creando estructuras ágiles que permitan ir un paso por adelante de los atacantes.