El comercio tradicional también se ha adaptado al cambio y al ritmo frenético que la tecnología ha impuesto en nuestros hábitos y usos. Una muestra de ello es que, gracias a las herramientas digitales, la tienda tradicional está trabajando en cambiar sus negocios para ofrecer a sus clientes experiencias de compra favorables que generen, además, una mayor rentabilidad en sus puntos de venta.
Esta nueva forma de venta conocida como “Shopping Experience 3.0” o ‘marketing sensorial’ identifica dónde están las oportunidades de mejora de las empresas en sus puntos de venta, es decir; en sus tiendas. El objetivo último de esta nueva tendencia es que los clientes no sólo compren sino que tengan una experiencia de marca que estimule sus sentidos y les proporcione una experiencia de compra inolvidable.
Para lograr que el punto de venta sirva de reclamo a los clientes lo primero es conseguir un conocimiento exhaustivo del tráfico de la tienda, del mercado potencial, del entorno competitivo y de los nichos de comunicación, como por ejemplo, los que puedan existir en las Redes Sociales.
A partir de ese conocimiento, se construye un entorno que favorezca experiencias sensitivas y facilite a los clientes el recuerdo del establecimiento. Para ello soluciones tecnológicas como la ambientación musical, el marketing olfativo o el dinámico permiten construir experiencias de compra únicas además de maximizar ingresos y racionalizar costes.
Esta nueva forma de venta conocida como “Shopping Experience 3.0” o ‘marketing sensorial’ identifica dónde están las oportunidades de mejora de las empresas en sus puntos de venta, es decir; en sus tiendas. El objetivo último de esta nueva tendencia es que los clientes no sólo compren sino que tengan una experiencia de marca que estimule sus sentidos y les proporcione una experiencia de compra inolvidable.
Para lograr que el punto de venta sirva de reclamo a los clientes lo primero es conseguir un conocimiento exhaustivo del tráfico de la tienda, del mercado potencial, del entorno competitivo y de los nichos de comunicación, como por ejemplo, los que puedan existir en las Redes Sociales.
A partir de ese conocimiento, se construye un entorno que favorezca experiencias sensitivas y facilite a los clientes el recuerdo del establecimiento. Para ello soluciones tecnológicas como la ambientación musical, el marketing olfativo o el dinámico permiten construir experiencias de compra únicas además de maximizar ingresos y racionalizar costes.
Onthespot, trabaja desde hace unos años en esa línea y crea productos que ayudan a conocer mejor al cliente. Además de las encuestas de satisfacción que procuran datos acerca de posibles mejoras en los procesos de compra o en los servicios de atención al cliente; actualmente se trabaja en otra serie de métodos como es conocer cómo se usa la tecnología para recabar información sociodemográfica; saber cuántas personas entran en una tienda, qué edad tienen y su sexo; lo que permite optimizar el proceso de compra.
Unido al conocimiento detallado del público de los puntos de venta, desde Onthespot se trabaja en el Customer Journey: una asesoría que analiza desde la necesidad de compra del cliente hasta el proceso de adquisición de los productos; y no sólo eso también se analiza qué música hay en los comercios, qué posibilidad de interacción se les brindan a los usuarios o qué tipo de experiencia sensorial puede ser accesible para optimizar el proceso de compra.
Lo que permite el Shopping Exprience 3.0 es presentar la empresa, la marca o el establecimiento de una forma genuina y única. Este tipo de herramientas dotan a las marcas y los negocios de valores diferenciadores, que facilitan, en muchos casos, atraer, vender y fidelizar a clientes mediante la innovación y el conocimiento de sus canales.
Unido al conocimiento detallado del público de los puntos de venta, desde Onthespot se trabaja en el Customer Journey: una asesoría que analiza desde la necesidad de compra del cliente hasta el proceso de adquisición de los productos; y no sólo eso también se analiza qué música hay en los comercios, qué posibilidad de interacción se les brindan a los usuarios o qué tipo de experiencia sensorial puede ser accesible para optimizar el proceso de compra.
Lo que permite el Shopping Exprience 3.0 es presentar la empresa, la marca o el establecimiento de una forma genuina y única. Este tipo de herramientas dotan a las marcas y los negocios de valores diferenciadores, que facilitan, en muchos casos, atraer, vender y fidelizar a clientes mediante la innovación y el conocimiento de sus canales.