La innovación empresarial y tecnológica es el principal motor de crecimiento en las economías avanzadas. Son las empresas, entre otros agentes, “las que generan riqueza y crean empleo” según World Economic Forum. De ahí, la importancia de invertir en I+D+i, por parte de los gobiernos y de las grandes compañías.
Telefónica es la teleco española que más invierte en I+D+i y una de las siete empresas españolas que más dinero destina a esta partida en todo el mundo según los datos del Informe '2016 Global Innovation 1.000', elaborados por la consultora de estrategia de PwC. Según informaciones de esta consultora, las 1.000 compañías del mundo que más invierten en I+D siguen tres modelos de innovación.
En primer lugar, las que crean necesidades, las llamadas 'need seekers', como Apple y Tesla, es decir, compañías capaces de descubrir y crear nuevas necesidades a partir de su relación con los clientes y materializarlas en el mercado. En segundo lugar, las analistas de mercado, las llamadas 'market readers', empresas como Samsung, cuya capacidad de innovación parte de un análisis profundo de sus mercados, sus clientes y sus competidores y que, normalmente, están focalizadas en la innovación sobre productos que ya existen en la realidad del mercado. En último lugar, las tecnológicas, 'technology drivers', como Google o la marca tecnológica, Siemens. Son empresas que dependen de su propia experiencia para el desarrollo de nuevos productos y servicios.
En el proceso de innovación, las empresas deben asumir que ésta afecta a todas sus áreas funcionales, desde la del diseño y el desarrollo de bienes y servicios, la comunicación y el marketing, hasta la internacionalización, los recursos humanos, los procesos o la gestión empresarial.
Telefónica es la teleco española que más invierte en I+D+i y una de las siete empresas españolas que más dinero destina a esta partida en todo el mundo según los datos del Informe '2016 Global Innovation 1.000', elaborados por la consultora de estrategia de PwC. Según informaciones de esta consultora, las 1.000 compañías del mundo que más invierten en I+D siguen tres modelos de innovación.
En primer lugar, las que crean necesidades, las llamadas 'need seekers', como Apple y Tesla, es decir, compañías capaces de descubrir y crear nuevas necesidades a partir de su relación con los clientes y materializarlas en el mercado. En segundo lugar, las analistas de mercado, las llamadas 'market readers', empresas como Samsung, cuya capacidad de innovación parte de un análisis profundo de sus mercados, sus clientes y sus competidores y que, normalmente, están focalizadas en la innovación sobre productos que ya existen en la realidad del mercado. En último lugar, las tecnológicas, 'technology drivers', como Google o la marca tecnológica, Siemens. Son empresas que dependen de su propia experiencia para el desarrollo de nuevos productos y servicios.
En el proceso de innovación, las empresas deben asumir que ésta afecta a todas sus áreas funcionales, desde la del diseño y el desarrollo de bienes y servicios, la comunicación y el marketing, hasta la internacionalización, los recursos humanos, los procesos o la gestión empresarial.